El trasfondo de la ruptura de la modelo Laura Sánchez con David Ascanio

La modelo alemana Laura Sánchez siempre ha mantenido un perfil bajo frente a los medios de comunicación, aunque hoy es un personaje del papel cuché. También un referente para gran parte del colectivo LGTBI tras su interpretación de la policía Pepa Miranda. 

Esta pasada semana la también actriz anunció en las páginas de ¡Hola! su separación del músico tinerfeño David Ascanio, con quien contrajo matrimonio en 2015. La sorpresa ha llegado cuando la revista que en su día publicó el enlace de la top model, que mantuvo una relación con el futbolista vasco Aitor Ocio, ha anunciado que la modelo se encuentra de nuevo enamorada.

Al parecer, Sánchez ha iniciado una relación amorosa con el torero sevillano Manuel Escribano, expareja de la enfermera dermoestética Esther Bejarano. El diestro es la nueva ilusión que llega de la modelo, intérprete y colaboradora televisiva, que acaba de celebrar por todo lo alto la graduación de su hija Naia, fruto de su noviazgo con el exjugador del Athletic de Bilbao. Precisamente era el empresario vasco quien publicaba la instantánea en su perfil personal de las redes sociales. Un hecho que podría poner fin a diversos años de desencuentros entre la ex pareja.

Ahora, el diestro de Gerena podría formar parte de una nueva etapa en la que la modelo estaría de nuevo enamorada, pero ¿cuál es la historia de la top que se consagró como 'estrella' de la serie 'Los Hombres de Paco'?. 

La historia de Laura Sánchez, la top model de la 'eterna sonrisa'

Pese a que la modelo Laura Sánchez nació el 29 de mayo de 1981 en el municipio alemán de Gross-Gerau, "se considera más de Huelva que un choco". Si tiene ocasión no se pierde su cita con El Rocío, y Andalucía para ella es 'su tierra'.

La top model, al igual que su hermano, nació en la localidad alemana, ya que sus padres habían emigrado buscando mejores oportunidades. Sin embargo, Laura regresó a España con tan solo cuatro meses y junto a sus abuelos se mudó a la casa que tenían en la Sierra de Aracena y Picos de Aroche, mientras que sus padres se quedaron en tierras germanas hasta que Laura cumplió cuatro años, momento en el que regresaron y fijaron su residencia en la provincia de Huelva.

Tras finalizar sus estudios, Laura comenzó a despuntar en el mundo de la moda. Un sector en el que aterrizó por casualidad tras ganar un certamen de belleza que organizó la agencia de representación de modelos Élite en 1998. Fue aquel año cuando se subió por primera vez a una pasarela, en la edición que Adlib Ibiza organiza en la pitiusa, a donde volvió en 2022.

Tal y como ha declarado en las páginas de la revista ¡Hola!: "Empecé con diecisiete años y fue todo muy rápido. Mi padre me propuso hacer un curso de modelo para ver si me salía algún trabajillo y así pagarme mis gastos. Pero probar en la moda fue vivir nueve meses en París. Comencé a finales del noventa y siete y, en el noventa y ocho, me fui a vivir a la capital francesa y mi primer desfile fue la alta costura de Ungaro. Fue un poco meteórico, se nos fue de las manos a todos, a mi representante, a mis padres y a mí, y tuvimos que canalizar eso, dejando los estudios aparcados por un tiempo. Ahora lo recuerdo muy bien, pero lo pasé muy mal. El alejarme tan rápido de mi familia, sin un tránsito...".

Fue entonces cuando, al igual que coetáneas como Laura Ponte, Judit Mascó, Verónica Blume o Martina Klein dio el salto a la moda internacional. Ha desfilado en el marco de grandes eventos como la Fashion Week de Paris o Milán. Ha protagonizado editoriales para revistas como Madame Figaro, Donna, Marie Claire, Elle, Vogue, Telva o Harper´s Bazaar y se ha subido a la pasarela de la mano de diseñadores como Roberto Liz, Maite by Lola Casademunt o Juan Duyos. 

Pero desde hace años la modelo es un referente defendiendo la moda flamenca. No solo se ha vestido en infinidad de ocasiones con el traje sino que también se ha atrevido a aupar a los diseñadores que quieren hacerse un hueco en la cultura de la moda flamenca. Junto a su socio Javier Villa lleva más de una década apostando por ello ven el marco de la pasarela 'We love flamenco'. La conocida como modelo de la eterna sonrisa no ha dudado en afirmar que "le encantaría vestir a la reina Letizia de flamenca".

Y precisamente ha sido la moda flamenca el origen de una 'guerra' muy sonada en este sector, a causa del SIMOF (Salón internacional de moda flamenca), fundado por Raquel Revuelta en 2001 y del que es directora. Ambas pasarelas comenzaron a convivir aunque, según trascendió, para Revuelta la inauguración del evento creado por la modelo alemana "era un ataque directo a SIMOF".

Otra de las facetas de la modelo es su rol solidario, en especial, con las asociaciones o afectados por la diabetes. La enfermedad que padece desde hace años y a la que no duda en dar visibilidad. 

La carrera de Laura Sánchez en televisión

La versatilidad no solo entra en juego cuando Laura se sube a una pasarela sino que también la ha demostrado al debutar como actriz en la pequeña pantalla. Lo hizo en la serie 'Los Hombres de Paco' donde se puso en la piel de la policía Pepa Miranda, hermana del inspector Paco Miranda.

Su debut fue de lo más sonado ya que, al igual que otras historias como la que protagonizaron los personajes de Maca y Esther en la serie 'Hospital Central', Laura interpreta a una policía homosexual que inicia un romance junto al personaje de Silvia, hija de don Lorenzo, el Comisario de la Comisaría de San Antonio.

La historia de Silvia y Pepa es una de las más icónicas de la pequeña pantalla y todo un referente para el colectivo LGTBI. Cinco años después de su debut, la top model participó en la cinta 'Tres bodas de más', donde se pone en la piel de un transexual.

Laura también ha participado en series como 'Olmos y robles', 'Gym Tony', 'El chiringuito de Pepe' o 'La fuga'. También en programas como 'Masterchef Celebrity', 'Me resbala' o 'El club de Flo'. 

Los amores de Laura Sánchez

En 1998 Laura Sánchez no solo comienza a labrarse una carrera en el mundo de la moda sino que también inicia una relación amorosa con el modelo y presentador gaditano Enrique Miranda, del que se separa en 2003. Un año después inicia una de sus historias más mediáticas junto al entonces jugador vasco de fútbol Aitor Ocio.

La modelo y el futbolista se conocieron en la provincia de Sevilla, donde Ocio jugaba como defensa del Sevilla FC. Ambos oficializaron su historia de amor, se dejaban caer por la isla de Ibiza y dos años después llegó su hija Naia, que este mes de agosto cumplirá la mayoría de edad. De la ciudad hispalense la familia dio el salto a Bilbao, donde el exdefensa comenzó a jugar en las filas del Athletic de Bilbao y Laura continuaba su trayectoria laboral como modelo y actriz. Pese a que parecían una de las parejas más consolidadas del papel cuché y del deporte, en 2009 anunciaban su separación. 

Una separación que, pese a que iba a ser de mutuo acuerdo, supuso una guerra mediática y judicial por conseguir la custodia absoluta de la niña. "Todo está en los juzgados y espero que se solucione pronto. Confío en que podamos llegar a un acuerdo. Soy una persona muy positiva y de todo hay que sacar el lado positivo. Creo que si pasa algo malo hay que aprender de eso, hay que mirar la vida por delante y no ir para atrás ni para coger impulso”, subrayaba la modelo. Aquella pugna se saldó después de que un juez le dio la tutela a Aitor Ocio, un hecho que marcó un antes y un después en la vida de la actriz.

Pero la guerra no cesó, por el contrario, se incrementó después de que la modelo denunciara públicamente en 2019 que el exfutbolista había publicado diversas instantáneas de su hija en redes sociales. No obstante, Naia nunca perdió el vínculo con su madre, a quien también está muy unida. Así, esta pasada semana los padres de Naia coincidían en la graduación de esta, por la que parece que han enterrado el hacha de guerra. 

Tras la separación del exfutbolista, la modelo comienza en 2011 una nueva relación con el compositor y músico tinerfeño David Ascanio. Junto a él forma una de las parejas más discretas y consolidadas de la crónica social. Fue en 2014, tres años después de saltar a la escena pública, cuando la pareja participó en el reality 'A Bailar' junto a otras parejas como el Cordobés y Virginia Troconis.

Un año después, la pareja dio la sorpresa y en portada de la revista ¡Hola! anunció que había contraído matrimonio por sorpresa. Ambos pasaron por la vicaría en Tenerife, tierra natal del novio, aunque residían en la capital española. También poseían otras propiedades en Cádiz o Bilbao. Y su patrimonio no se limita al sector inmobiliario. Junto al compositor fundó la firma de ropa de baño 'Bloomers&Bikini', en la que seguirán colaborando ya que Laura figura como administradora y David como apoderado.  

Después de conocerse la ruptura de la pareja a principios de junio, ambos no han escondido el amor que se profesan y ha sido este pasado miércoles cuando la revista ¡Hola! publicaba la identidad de la nueva ilusión de la modelo de la eterna sonrisa.