Continúa la búsqueda de Celia Cavia, la menor desaparecida desde el pasado jueves 12 de diciembre en Santander. La niña tiene 14 años, es alta, rubia y tiene ojos azules. El día que desapareció llevaba un abrigo gris con pelo en la capucha, según hizo público la Policía.

Hasta ahora todas las hipótesis están abiertas y se desconoce el motivo de la desaparición de la menor. Entre ellas se barajan la desaparición voluntaria y el hecho de que la niña haya podido caer al mar, aunque no se descartan otras hipótesis hasta que sea localizada.

Según fuentes cercanas a la familia de la menor, sus padres, un matrimonio con dos hijos, están conmocionados por la repentina desaparición de Celia, "una niña muy buena", por lo que no ven sentido a que el motivo de la ausencia de su hija haya sido una fuga voluntaria. 

Celia Cavia

La Policía inició las labores de búsqueda el viernes y durante el domingo y el lunes han ampliado el perímetro tras patrullar diferentes arenales de Santander sin encontrar prácticamente ninguna pista. A los helicópteros de protección civil y salvamento marítimo se han sumado dos equipos de drones que han sobrevolado la zona de costa.

Del mismo modo, decenas de agentes de la Policía Nacional están volviendo a comprobar todas las playas de Santander y cuando mejoren las condiciones meteorológicas se incorporarán a este dispositivo más medios marítimos e incluso buzos, según informa el Diario Montañés de Cantabria.

Lo único que han podido encontrar ha sido una mochila que pertenecería a la niña, en el parque santanderino de Mataleñas. La menor habría abandonado el instituto de educación secundaria José María Pereda de Santander (centro donde estudia) el pasado jueves sobre las 2:15 horas diciendo que se encontraba mal, pero no fue a su casa. La mochila fue encontrada a unos 4 kilómetros del instituto de la joven, donde fue vista por última vez.