La violencia en Myanmar (antes Birmania) ha escandalizado al mundo. Las cargas policiales contra la población civil han dejado una colección de imágenes crueles y duras. Una de ellas ha dado la vuelta al mundo por el valor simbólico de la misma.

La protagonista es una religiosa llorando arrodillada frente a los representantes de policía y el ejército, que se quedaron parados ante la insólita imagen de la monja, casi como si se tratase de una aparición.

La instantánea se viralizó rápidamente y se conoció el nombre de la religiosa protagonista. Se trata de la hermana Ann Nu Thawng, que pertenece a la congregación religiosa de San Francisco Javier, instituto de derecho diocesano en Myitkyina. 

El cardenal Charles Maung Bo, arzobispo católico de Yangon (Myanmar), escribía en sus redes sociales lo siguiente: "Con lágrimas en los ojos, la Hermana Ann Nu Thawng ruega y detiene a la policía para que deje de arrestar a los manifestantes. Aproximadamente 100 de los manifestantes pudieron escapar de la policía debido a la monja". Además, más allá de la imagen, se ha sabido que la religiosa protegió en su convento a casi un centenar de jóvenes para evitar que fueran detenidos por la policía.

Imagen de la religiosa frente a las cargas policiales. 

“La acción de la religiosa y la respuesta de la policía que, al ver la súplica de la monja, se detuvo, ha sorprendido a muchos de nosotros. La hermana Ann hoy es un modelo para los líderes de la Iglesia: los obispos y sacerdotes están llamados a dejar sus zonas de confort y dar ejemplo de su valentía”, aseguró, Joseph Kung Za Hmung, director de Gloria News Journal, el primer portal católico del país.

El papel de los católicos

Desde que el pasado 1 de febrero se produjera en Golpe de Estado Militar, la minoría católica de la antigua Birmania se ha posicionado en contra de los actos violentos y represivos llevados a cabo por la policía y el ejército contra la población civil. 

A petición del citado cardenal Charles Bo, arzobispo de Rangún y presidente de la Conferencia Episcopal de Myanmar (CBCM), los obispos y directores de institutos religiosos de las dieciséis diócesis de todo el país pidieron un día especial de oración, ayuno y adoración. También ha condenado el Golpe de Estado y ha exigido públicamente la liberación de todos los detenidos, incluida la líder Aung San Suu Kyi

La mayor parte de la población birmana, el 99,51%, es creyente. La religión más extendida es el budismo, con un 74,79% de personas que lo profesan. En 2020 sólo el 7,76% se declaraba católica.