A las seis y diez horas de la mañana del día 13 de enero en el barrio Nueva Montaña de la localidad cántabra de Peañacastillo, a 4 km de Santander, un parque infantil y una pista de futbito en la calle Tomás y Valiente se hundieron sobre el parking subterráneo que hay debajo. Se trata de un barrio periférico en una ciudad dormitorio de la capital cántabra cerca de la bahía de Santander y de la autovía de Bilbao. En este lugar aparcan sus vehículos los 500 residentes de la urbanización cercana al centro comercial Bahía de Santander. Se trata de una urbanización de viviendas sociales, promovida en día por el gobierno autonómico, en forma de L, ángulo recto. Dentro de ella se encontraba el parking encima del mismo se encontraban el parque infantil y la cancha.

Policía Local, Nacional, bomberos y equipos sanitarios se personaron en el lugar de los hechos comenzaron a buscar posibles víctimas entre los escombros, pero a las nueve horas se confirmó que no faltaba ningún vecino de los tres bloques cercanos al parking. Afortunadamente no hay que lamentar víctimas mortales y sólo daños materiales y económicos.

Al saberse el siniestro la alcaldesa de la capital cántabra, Gema Igual del PP, solicitó megáfono en mano pidiendo a los jefes de escalera de los edificios que rodeaban el parking que preguntaran piso por piso si faltaba alguien.

Según ha publicado Diario Montañés los bomberos comprobaron que el forjado caído no afectaba a toda el área adyacente para empezar a intervenir asegurando los espacios de alrededor y para poder empezar a desescombrar todo lo derruido. César Díaz, concejal de Fomento del Ayuntamiento, ha informado de que se va a revisar bien todo el perímetro. Es el techo del parking y suelo del parque lo que se ha hundido mientras que los pilares se mantienen. “Afortunadamente por la hora en la que ha sucedido todo no había ni niños jugando en el parque ni vecinos recogiendo su coche. De haber sido por la tarde estaríamos hablando de una tragedia nacional”, asegura a Elcierredigital.com un vecino.