Sobre las 23.00 horas del pasado viernes 18 de octubre, agentes del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Calatayud, identificaron una furgoneta sospechosa que circulaba por el kilómetro 237 de la A2, dirección Zaragoza. 

Durante la identificación de dicho vehículo, ocupado por nueve personas de nacionalidad rumana, los agentes observaron cómo en la parte trasera se transportaban numerosas cajas y bolsas de rafia que contenían setas (boletus), no aportando los ocupantes ningún documento que acreditase dicho transporte.

Los agentes de Tráfico dieron aviso a especialistas del SEPRONA para verificar el estado de la mercancía y una vez en dependencias oficiales de la Guardia Civil de Calatayud se procedió a inspeccionar la misma para comprobar su procedencia y el estado en el que se transportaba.

Setas boletus intervenidas por la Guardia Civil

En el interior de la furgoneta se encontraron 51 cajas y nueve bolsas de rafia que contenían un total de 390 kilos de setas (boletus), que no guardaban las condiciones higiénicas y sanitarias para el transporte de alimentos, por lo que se avisó al Departamento de Sanidad y Consumo del Gobierno de Aragón para que se personase un Inspector Técnico, quien determinó que la mercancía no era apta para consumo humano y debía destruirse.

Los nueve ocupantes del vehículo fueron denunciados por una infracción a la Ley de Montes por aprovechamiento micológico sin la correspondiente autorización, así como el transporte de la mercancía, supuestamente para proceder a su venta, sin la correspondiente documentación que acreditase su trazabilidad.