El Sevilla volvió a coronarse campeón de la Europa League el pasado miércoles por séptima vez en su historia. Es el equipo que más veces ha logrado la hazaña, seguido por el Atlético de Madrid, el Inter de Milán, la Juventus de Turín y el Liverpool, con tres títulos cada uno, muy lejos del equipo andaluz.

La final ante la Roma de José Mourinho se decidió desde el punto fatídico, pero antes fue un partido intenso y bronco, que tras el empate a uno en los noventa minutos se dio paso a una prórroga no apta para aficionados con problemas de corazón. En especial el descuento antes de los penaltis, donde la Roma tuvo en sus manos la copa, pero el guardameta Yassine Bounou con una parada milagrosa lanzó un salvavidas al Sevilla que ya veía cómo se esfumaban sus ilusiones. 

Una vez en la tanda no fue menos, porque el marroquí emuló a Beto y Palop, convirtiéndose en el héroe al parar dos penaltis. En su día, Palop fue el héroe en el segundo título. El meta sevillista detuvo tres de los cuatro penaltis que le lanzó el Espanyol en la tanda de Glasgow y se erigió como adalid en 2007. Luis García, Jonatas y Torrejón sufrieron en sus carnes el acierto del guardameta valenciano.

Por su parte, Beto fue el protagonista siete años después, en la siguiente conquista. El guardameta portugués detuvo los penales de Cardozo y Rodrigo para dar al Sevilla en 2014 su tercera Europa League ante el Benfica. Otro de los protagonistas fue Gonzalo Montiel, ya que por casualidades del destino volvió a salir en la foto de la victoria al convertir el último de la tanda. El argentino, que transformó el penalti decisivo en la final del Mundial ante Francia, repitió el procedimiento para coronar al Sevilla como campeón de la Europa League 2022-2023.

Jesús Navas celebrando la victoria con la copa. Twiiter

Y es que el Sevilla tiene una historia de amor con la Europa League, ya que esta temporada ha mostrado dos caras muy diferentes en la liga española y en la competición europea. De hecho, cuando Mendilibar llegó al banquillo los de Nervión coqueteaban con el descenso. Tanto es así que sus rivales ya saben que para vencerlos no basta con conseguir ventaja en el marcador, han demostrado en repetidas ocasiones que se puede dar la vuelta en eliminatorias que para cualquier otro equipo sería imposible remontar.

El último caso es el del Sevilla FC en Old Trafford, que consiguió levantar el 2-0 inicial en el partido de ida y endosar un contundente 3-0 en el Ramón Sánchez Pizjuán. Pero hay otros precedentes.

El deporte español reina en Europa

Continuando con el fútbol, el Barcelona Femenino puede conseguir este sábado 3 de junio la segunda Champions de su historia. El equipo de Jonatan Giráldez se enfrentará al VFL Wolfsburgo Femenino a las cuatro de la tarde en Eindhoven, Países Bajos.

Allí las azulgranas pretenden poner un broche de oro a lo que ha sido y es una generación de jugadoras y de éxitos únicamente equiparable al Barcelona de Pep Guardiola y el sextete. En el césped del PSV volverá a ser titular en competición europea la dos veces balón de oro Alexia Putellas, que tras su grave lesión del verano pasado ha llegado justo a tiempo para ayudar a sus compañeras y poner la guinda a una temporada espectacular.

Sergio Llull levantando la copa de la Euroliga. Twitter

Pero el deporte español no solo domina en el panorama futbolístico. En el baloncesto los clubes de la Liga Endesa se han consolidado como referentes en Europa y no paran de ganar títulos. De hecho, este año ha habido doblete español, primero con la victoria del Gran Canaria al Turk Telekom en la Eurocup, que además les asegura una plaza en la Euroliga del año que viene, y luego, con el Real Madrid, que alzó su undécima Euroliga en un camino que a muchos aficionados madridistas les recordó el vivido en la Champions League del año pasado.

El Madrid ganó ante el Olympiacos en una final four en la que primero hubo que derrotar al Barcelona de Jasikevicius. Pero si algo marcó este título fue la polémica eliminatoria frente al Partizan, durante la que ocurrió la tremenda tangana que acabó con varios expulsados, entre ellos Yabusele tras su “llave de judo” a Dante Exum. A partir de ahí el Madrid supo sufrir y, a pesar de tener todo en contra e ir 2 a 0 en el cómputo global, resistieron al infierno de Belgrado y forzaron el quinto partido. El resto ya es historia del baloncesto.