Muerte de Álvaro Prieto, la segunda del año por electrocución con la catenaria de un tren: "Adif queda en evidencia"

La autopsia del cadáver de Álvaro Prieto, el joven cordobés desaparecido en Sevilla el 12 de octubre, ha confirmado que el joven de 18 años falleció por electrocución. Álvaro estaba caminando por el techo del convoy del tren donde fue encontrado y al tocar la catenaria se electrocutó y falleció, cayendo entre dos vagones.

Según las primeras conclusiones del primer informe forense tras el levantamiento del cadáver –confirmadas ya por la autopsia– a las que tuvo este lunes elcierredigital.com, el estado del cuerpo de Álvaro era de "avanzada descomposición" y presentaba "quemaduras en las manos" además de "ausencia de vello piloso", lo que explicaría la causa de la muerte por electrocución.

Sin embargo, este no es el único caso en el que una persona se electrocuta con la parte tendido eléctrico habitual que se sitúa encima de las vías del tren. El 27 de mayo de 2023 un menor de 15 años falleció electrocutado al entrar en contacto con una catenaria. Los hechos ocurrieron en la terminal ferroviaria de mercancías de Adif, en el distrito madrileño de Vicálvaro. 

Otros dos casos de electrocución con la catenaria de un tren

El joven se coló en el recinto y se subió al techo de un tren de mercancías que estaba estacionado en una vía muerta. En este caso, el fallecido no intentó colarse en el tren para volver a su casa, sino para bromear con sus amigos.

Una vez encima del tren el menor se desequilibró y tocó una catenaria, sufriendo una descarga eléctrica y falleciendo en el acto. El recinto donde ocurrieron los hechos disponía de cámaras de seguridad y vigilancia, y desde hacía unos meses había detectado el incremento de jóvenes que se colaban dentro de la terminal. 

Catenaria del tren.

Otro caso similar ocurrió en La Roda, en Albacete, el 31 de mayo. En la tarde de ese día dos jóvenes de 13 y 14 años resultaron electrocutados al tocar el cable de la catenaria cuando estaban en el techo de un vagón. Uno de los jóvenes fue trasladado a la UVI. Esta estación también cuenta con cámaras de seguridad y vigilancia.

La "falta de protocolos" en Adif

En los tres casos la situación es la misma: los jóvenes evitan los controles, se suben encima de un vagón y resultan electrocutados con la catenaria. Según la opinión de algunas voces cercanas a la empresa con las que ha podido contactar elcierredigital.com, “Adif está quedando en evidencia. No se entiende cómo se producen estas situaciones si las estaciones cuentan con cámaras de seguridad. Parece que o bien no hay nadie pendiente de esas cámaras durante el transcurso del día o a los vigilantes les da igual que se cuelen jóvenes”.

“Esta situación muestra dejadez por parte de Adif que debería realizar operativos de vigilancia enfocados a que no ocurran estas situaciones. Está claro que es una imprudencia por parte de las víctimas, pero dónde están los vigilantes cuando se les necesita”, protestan las fuentes consultadas.

Carlos G. Barret.

El experto en investigación civil Carlos G. Barrett ha indicado a elcierredigital.com, que le resulta sorprendente "que la seguridad no haya encontrado el cuerpo del joven. Si llevaba ahí cuatro días cómo puede ser que no hayan registrado las vías".

Barret sostiene que esto demuestra que "por parte de ADIF no se ha hecho un rastreo exhaustivo por todas las inmediaciones de Santa Justa. El problema en Renfe es que no hay un protocolo para este tipo de situaciones", añadía.

"Las labores de control de acceso y las intrusivas en zonas acotadas exclusivamente al tráfico de ferrocarril corresponden al personal de seguridad privada y es Adif o Renfe los que subcontratan a dichas empresas para estos servicios. Cabe destacar que en Madrid, el uso de los vagones como mural de grafiteros y el vandalismo en sí, son causas de preocupación en el sector de la seguridad privada de estos servicios ferroviarios", indica Carlos G. Barrett en una conversación con elcierredigital.com.