Segundo error policial en un año en la ciudad de Texas, en el que un policía mata a una persona en una operación rutinaria. El pasado viernes, el oficial Aaron Dean, junto a un compañero de la policía de la ciudad de Fort Worth, tiroteó a una mujer durante la inspección de una casa después de recibir un aviso de alerta.

La familia de la fallecida, Atatiana Jefferson, de 28 años, pidió el lunes en una conferencia de prensa que la policía de Fort Worth, que dirige la investigación, renuncie al caso y que el sospechoso sea inculpado “rápidamente”.

El agente Aaron Dean durante su servicio

La tragedia sucedió dos semanas después de que se llevara a cabo la sentencia que condenaba a diez años de prisión a un policía, que en 2018 mató a un vecino por una confusión en Dallas, a unos 50 kilómetros de Fort Worth.

En esta ocasión, el caso comenzó con una llamada a la policía durante la noche del viernes 12 de octubre. Un hombre llamó alertado porque vio que la puerta del piso de su vecino había estado abierta durante varias horas.

Dos agentes acudieron al lugar, recorrieron la casa “observaron a una persona parada cerca de la ventana”, según el comunicado policial. “Al percibir una amenaza, un policía sacó su arma de servicio y disparó”, explica el documento.

No anunció que era policía

El teniente Brandon O’Neil aseguró que el oficial “no anunció que era policía antes de disparar”. La mujer estaba jugando con su sobrino de 8 años cuando escuchó un ruido en el jardín y se acercó a la ventana para ver que sucedía, dijo el abogado de su familia, Lee Merrit. Tras el disparo, los servicios sanitarios llegaron para atenderla, pero era demasiado tarde, ella ya había fallecido.

Vídeo del suceso

Atatiana Jefferson no tenía antecedentes policiales, era licenciada en biología y empleada en una empresa farmacéutica. Había abierto la puerta para que el aire refrescara la casa, afirmó su familia.

La policía de Fort Worth publicó el vídeo del suceso, donde se aprecia a dos agentes revisando la vivienda con linternas. Al ver movimiento por una ventana, uno de ellos grita: “¡Manos arriba, enséñame las manos!” y acto seguido dispara. El agente fue suspendido e interrogado el lunes. La familia de la víctima, por su parte, quiere que un servicio federal se haga cargo de la investigación.