Los coches nuevos eléctricos tienen unas características muy particulares que le convierten en una opción muy rentable en ciertas ocasiones, y en otras es preferible comprar un vehículo convencional de gasolina, diésel o un híbrido. Su compra depende principalmente de las necesidades individuales, el presupuesto y la situación de cada conductor. En un mercado automotriz cada vez más centrado en la sostenibilidad y la eficiencia energética, los nuevos coches eléctricos que vienen incluidos con baterías de alta capacidad, están atrayendo cada vez más la atención del número de compradores, que ya no solo valoran positivamente esta opción ciñéndose a los beneficios medioambientales de estos vehículos, sino también la calidad de la experiencia de conducción que ofrecen. Dentro del mercado de los coches eléctricos, los coches que tienen las baterías de alta capacidad, cuentan con una mayor autonomía, pudiendo recorrer mayores distancias con una sola carga, mejorando así la experiencia de conducción en términos de comodidad y rendimiento.

Si en el día a día, la mayoría de los trayectos realiza transcurren por la ciudad, el coche eléctrico es una opción muy asequible a largo plazo, a pesar de que suponga una inversión inicial importante, pues a la larga, son más económicos de mantener y operar en comparación con sus equivalentes en gasolina o diésel. 

Además, al tener una menor autonomía, suponen un gasto menor gasto por su recarga completa, y por su parte, los coches convencionales, de diésel o gasolina, tienen una autonomía muy superior en comparación con un vehículo eléctrico y por tanto supondrá un mayor gasto mantenerlo.

 Baterías de alta capacidad

La capacidad de la batería es un factor fundamental para determinar la autonomía de un coche eléctrico. A pesar de que existen diferentes tipos de baterías para los coches eléctricos, con diferentes potencias y capacidades, todas ellas comparten el mismo principio fundamental de generar, almacenar y suministrar energía para propulsar el vehículo. Cuanto mayor sea la capacidad de la batería, más energía podrá almacenar y, por lo tanto, mayor será la distancia que el vehículo podrá recorrer antes de necesitar una recarga. Pero aunque estas baterías ofrezcan una mayor autonomía, también pueden requerir un tiempo de recarga más largo debido a la mayor cantidad de energía que deben almacenar.

Las baterías de alta capacidad también ofrecen una experiencia de conducción mejorada, que mejora notablemente la comodidad de los usuarios al conducir un vehículo eléctrico. Una mayor capacidad de almacenamiento de energía, ofrece un rendimiento más consistente en comparación con las baterías de menor capacidad, con una aceleración más suave y una potencia constante. Pero también, hay que tener en cuenta que estas baterías de gran capacidad suelen ser más grandes y pesadas, y esto podría afectar al rendimiento del vehículo y aumentar el consumo de energía en ciertas condiciones de conducción. 

Por otra parte, los vehículos eléctricos con baterías de gran capacidad tienden a tener un valor en el mercado más alto en comparación con el resto, debido al costo adicional de la tecnología de la batería. Sin embargo, a la hora de querer revenderlo, los vehículos eléctricos con estas baterías suelen mantener mejor su valor en el mercado.