26 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

El joven, con causas pendientes en los tribunales, es acusado de buscar en la política el escudo legal para evitar la Justicia

Acusan al pequeño Nicolás de hacer trampa en las redes sociales para difundir su “formación política”

José Nicolás Gómez Iglesias, ante el Congreso de los Diputados/Chema Barroso
José Nicolás Gómez Iglesias, ante el Congreso de los Diputados/Chema Barroso
El jueves 14 de enero, Francisco Nicolás Gómez Iglesias, más conocido como el Pequeño Nicolás, se paseaba por los alrededores del Congreso de los Diputados dejándose querer por los viandantes y fotografiándose con todo el que se lo pedía. En sus manos, el documento con el que acababa de inscribir oficialmente lo que denomina su “partido político” para las Europeas de mayo. Es decir, un proyecto que, para algunos, es más bien el instrumento con el que espera escapar de la Justicia.

Pero le acusan de haber hecho "trampa" en las redes sociales. Francisco Nicolás Gómez Iglesias se ha estrenado en Instagram ( la red social más popular entre los jóvenes ) con su proyecto de formación política y cuenta ya con nada menos que 2,7 millones de seguidores. Algo imposible nada más abrir un perfil social, a no ser que se utilice algún truco como que  alguien te ceda una cuenta con todos sus seguidores. Eso es justo lo que ha ocurrido. El conocido “instagrammer” Míster Ces, poseedor de varios perfiles en la red social, habría cedido al pequeño Nicolás su aclamado perfil a cambio de trabajar como director de redes sociales del partido del polémico joven.

 

La cuenta de la formación política del pequeño Nicolás en Instagram

De este modo, los seguidores de esta cuenta se han encontrado en cuestión de minutos con un cambio inesperado de contenidos y de protagonista o titular que no ha sido bien recibido. En las primeras horas, de hecho, hubo una fuga masiva de seguidores.

Maniobra discutible para ganar de golpe millones de seguidores

Los expertos en redes sociales y marketing online advierten de que esto puede ser ilegal, según las normas de la plataforma en cuestión, que deja claro en sus condiciones de uso "no intentes comprar, vender o transferir ninguna parte de tu cuenta (incluido el nombre de usuario) ni solicitar, recopilar o usar credenciales de inicio de sesión o insignias de otros usuarios". Si Míster Ces ha  cedido su cuenta por interés económico, Instagram podría cerrársela. Y en todo caso, lo que si ha sido criticada por los entendidos es la maniobra, un “engaño”, una “invasión y abuso de confianza” y hasta un “engaño” a los seguidores.

Francisco Nicolás Gómez Iglesias quiere atraer a los jóvenes con su formación política/ Chema Barroso

Otros ven en este intento de incursión en la política del polémico joven una argucia para escapar de la Justicia. De hecho, las causas le persiguen. Francisco Nicolás Gómez Iglesias  fue detenido en octubre de 2014 tras ser acusado de falsedad documental, estafa en grado de tentativa y usurpación de funciones públicas y estado civil. El joven fue imputado por revelación de secretos, cohecho impropio, malversación de caudales públicos y tráfico de influencias. Tres días después, la juez del caso dicta su libertad provisional sin fianza. ​Durante el proceso, el informe del médico forense concluyó que Gómez Iglesias poseía “una florida ideación delirante de tipo megalomaníaco”.

Con esta acción, el pequeño Nicolás ha logrado que se vuelva a hablar de él y de su “formación política”, cuyo programa aparece plagado de generalidades vagas y buenos deseos y del que no se sabe mucho más. Se dirige a los jóvenes y por ello actúa en las Redes Sociales. También cuenta con  la colaboración de otro famoso youtuber, Álvaro Valyrio,  con quien recorre Madrid en coche rumbo al Ministerio de Interior y le acompaña en la  promoción del proyecto ante jóvenes universitarios. Todo en tono muy jocoso mientras hablan del singular proyecto político... 

Una trayectoria estudiantil y profesional polémica 

El pequeño Nicolás estudió Derecho en el Colegio Universitario de Estudios Financieros (CUNEF). Y ya allí comete su primer delito conocido. El joven pudo acceder a dicha titulación porque falsificó su DNI para que Manuel Avello, hijo del embajador de España en Egipto Arturo Avello Díez del Corral, le suplantara en la realización del examen de selectividad. Por este hecho, junto a su examigo Manuel, fue procesado judicialmente el 1 de junio de 2017 por los delitos de falsedad en documento oficial y falsedad de identidad.


Francisco Nicolás Gómez Iglesias durante uno de los juicios que ha afrontado en los últimos años

A mediados de 2018, el Juzgado de lo Penal número 16 de Madrid absolvió también al polémico joven de los delitos de calumnias con publicidad contra el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) e injurias a las Fuerzas deS del Estado por asegurar públicamente que los espías españoles interceptaba móviles sin orden judicial. El CNI se había querellado contra el joven en 2014   después de que este asegurara en   entrevistas con varios medios de comunicación que el organismo oficial tuvo "pinchado ilegalmente su teléfono durante dos meses" y confirmaba que los servicios secretos intervenían comunicaciones de forma ilegal, incluidas las de uno de los periodistas que le estaban entrevistando.

Juicios y unos meses en Canarias para colaborar como asesor 

Esa era, en realidad,  la segunda sentencia que los juzgados de lo penal de Madrid emitían por este mismo contencioso. En la primera, se condenó a Francisco Nicolás Gómez Iglesias. Pero la defensa del joven la recurrió ante la Audiencia Provincial de Madrid, por lo  que se repetió el juicio y se realizó una prueba pericial independiente para analizar la situación mental del acusado. Dicho examen determinó que el joven sufría un "trastorno de personalidad" que le impedía dominar su voluntad, además de una "inmadurez emocional".

Entre juicios y sentencias, el pequeño Nicolás se dedicó en estos años a ser asesor del Club Deportivo Guadalajara y a participar, con discreto resultado, en varios negocios en Canarias, donde vivía por todo lo alto.

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