La decisión de la Junta Única de Resolución limita las opciones de recuperación de dinero de los antiguos accionistas del Banco Popular
La decisión de la Junta Única de Resolución (JUR), la autoridad de la Unión Europea que garantiza la liquidación de bancos en crisis, de no compensar a los afectados por la resolución del Banco Popular, dificultará, aunque no hará imposible, la compensación económica a los accionistas y los acreedores de Banco Popular, os explicamos los puntos clave.
¿Qué se puede hacer?
Lo primero, esperar a la decisión final de la Junta Única de Resolución (JUR), aunque esta irá en el mismo sentido, es imprescindible antes de realizar cualquier otro paso. El siguiente paso será interponer un recurso ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) sobre la medida adoptada para impugnar los informes que se estime pertinentes.
¿Puedo acudir ya a la Justicia española?
La Audiencia Nacional suspendió el procedimiento administrativo a la espera de agotar la vía judicial europea, ya que la resolución la ejecutó el FROB, fue adoptada por la JUR. Si el TJUE desestima las futuras demandas, en España las acciones serán más complicadas. Si prosperasen, la AN lo tomaría en cuenta para sus fallos.
Por esto, la vía administrativa es complicada y puede continuar por la vía civil solicitando una indemnización de los daños sufridos como consecuencia de haber adquirido acciones que, tras la resolución del FROB de 7 de junio de 2017, han perdido todo su valor
Qué alegar si acude por la vía civil
La recomendación de muchos bufetes especializados diferencian dos momentos en el tiempo:
Si compró acciones en la ampliación de capital de mayo de 2016 o posteriormente, pero antes de que se hicieran públicas las irregularidades contables y los problemas de solvencia del banco.
Las adquisiciones anterioridad a la ampliación de capital de mayo de 2016, al menos, desde el 5 de diciembre de 2012.
Aunque las sentencias positivas se han concentrado más en el primer grupo, en ambos deben alegar que Banco Popular transmitió en estos años una imagen de solvencia alejada de la realidad, y por tanto las decisiones de compra de acciones se basaron en estos datos.
