26 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

El dramático suceso destruyó la sala ubicada en el número 83 de la calle Toledo hace casi un siglo, en 1928, y se cobró 80 víctimas

El precedente de la tragedia de La Paloma: Cien años antes en la misma calle ardió el histórico Teatro Novedades

Teatro Novedades.
Teatro Novedades.
La obra dramática que presenció el Teatro Novedades fue la única que no estaba preparada para salir en escena. Un cortocircuito fue el causante que desencadenó las llamas que acabaron con los sueños de muchos y las vidas de otros. Otro incendio, esta vez en la Parroquia de La Paloma, de la calle Toledo, ha hecho rescatar del recuerdo aquel otro incendio del Teatro Novedades.

Corría el 23 de septiembre del año 1928 cuando tuvo lugar un suceso que traspasó las fronteras de todo lo imaginable, y puso el corazón en un puño a todo el país. Se trata del incendio que hubo en el Teatro Novedades de La Latina, en uno de los más famosos barrios de Madrid.

Este suceso se convirtió en una crónica negra para la historia de aquel entrañable arrabal ubicado en el número 83 de la transitada calle Toledo.

El bonito edificio había tenido otras vidas antes de pasar a ser un teatro, empezando como un cuartel de caballería, pasando por ser un teatro al que acudían los aficionados, y acabando con un circo ecuestre en los interiores de sus paredes.

Los comienzos del Teatro Novedades

Fue la Reina Isabel II quien, en compañía de su marido Francisco de Asís, abrió por primera vez las puertas del Teatro Novedades, exactamente el día 13 de septiembre de 1857, inaugurándose con una de las mejores actuaciones de la época: ‘El mejor alcalde el rey’, obra de uno de los dramaturgos más importantes del Siglo de Oro, Lope de Vega.  

El aforo con el que contaba el teatro era de 1.900 asientos que parecían quedarse cortos debido a la popularidad con la que contaba el teatro, pues muchos de los ciudadanos querían visitar sus interiores y disfrutar de la agradable velada que esto suponía.

Así quedó el Novedades por dentro.

Al teatro se le volvió a bautizar bajo el nombre de ‘El Coliseo’, y pasó por manos de varios dueños, situación que incrementó el deterioro del mismo debido al paso del tiempo y a los no tan buenos cuidados, por lo que se tomó la consideración de remodelarlo dos veces antes de que ocurriese el fatídico incendio.

La tragedia

De nuevo, el 13 de septiembre, pero esta vez de año 1928, se abre el telón con el sainete andaluz titulado ‘La mejor del puerto’, que además incitaba al público a tener la sensación de encontrarse junto a las orillas del Río Guadalquivir gracias al atrezo con el que se había decorado el teatro. Además, contaba con numerosos farolillos y guirnaldas que acompañaban el decorado para la ocasión.

La tragedia comenzó cuando alguien que se encontraba en el interior del edificio avivó una llama, posiblemente ocasionada de un cortocircuito, y el fuego comenzó a comerse el decorado de los interiores del teatro a una velocidad de espanto.

Humo saliendo del interior del Teatro Novedades.

El telón ardió con el decorado, y terminó cayendo sobre el foso de la orquesta. Al estar construido mayoritariamente con madera, la rapidez de propagación de las llamas fue vista y no vista, y en cuestión de segundos todo ardía por completo.

Lo que era un teatro con un entrañable decorado, se convirtió en un lugar lleno de llamas, ceniza y humo.

La tragedia se cobró varias víctimas mortales, entre ellas, las personas que se situaban en la zona de los anfiteatros a los que únicamente se podía acceder a través de unos pasillos que desembocaban a unas estrechísimas escaleras, en las que mucha gente perdió la vida debido a las avalanchas, y muchas otras debido a las llamas, y a la intoxicación provocada por inhalación de humo.

Aunque los forenses desmintieron esto, algunos de los cadáveres presentaban signos de violencia y de armas blancas debido a las peleas que se debieron ocasionar por la tensión de la situación cuyo objetivo era alcanzar la puerta de salida.

También hubo personas tan desesperadas por alejarse de aquellas llamaradas que atentaban directamente contra sus vidas, que sin pensarlo dos veces y en un intento por sobrevivir, se lanzaron desde los anfiteatros hacia el patio de butacas.

Por desgracia, los únicos supervivientes fueron las personas que se encontraban justo en este punto, ya que tuvieron mayor accesibilidad a la puerta de salida. Muchos de ellos malheridos, que acabaron perdiendo la vida días más tarde debido a esto, y muchos otros con secuelas psicológicas de por vida.

Recuento final: 80 fallecidos y 200 heridos

La situación que dejó el incendio fue devastadora. Cuando los bomberos pudieron acceder al interior una vez se sofocaron las llamas que acabaron con todo lo que encontraban a su paso, la imagen que se encontraron fue demoledora.

Dantesca imagen del interior del Teatro Novedades tras el incendio.

Decenas de cuerpos sin vida calcinados, prácticamente amontonados entre las escaleras y alrededor del patio de butacas. En total, un recuento de 67 fallecidos que aumentaron a 80 con el paso de los días, debido a que muchos de los que estaban heridos no pudieron soportar el dolor, y un total de 200 heridos por múltiples factores.

Bomberos entrando al interior del Teatro Novedades.

Fuera del teatro, una nube de color gris ocasionada por las cenizas que desprendieron las llamas se tornaba sobre la calle Toledo. Los cuerpos de seguridad acompañados por la Cruz Roja y los Bomberos temían que el edificio se derrumbase debido al destrozo de la infraestructura que habían provocado las llamas.

Hubo múltiples donaciones por parte de toda la Comunidad, y muchas recaudaciones benéficas que ponían en marcha otros teatros iban a parar a esta causa.

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