27 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Santiago Martín, coordinador de SOSDesaparecidos en Canarias, afirma que “la joven no tenía una residencia fija”

La "extraña" desaparición de Natalia Hernández: Su pista se pierde hace dos meses en el aeropuerto de La Palma

El Cierre Digital en Natalia Hernández desaparecida en La Palma.
Natalia Hernández desaparecida en La Palma.
Natalia Hernández desapareció el pasado 24 de octubre tras aterrizar en el aeropuerto de La Palma (Santa Cruz de Tenerife), donde dejó su equipaje. Su desaparición tardó 18 días en denunciarse. Según afirman fuentes de su entorno a elcierredigital.com, "tenía poca familia y no le había contado a nadie que se iba de Madrid, por eso se tardó tanto en denunciar. Quien finalmente lo hizo fue un amigo suyo de Tenerife”.

Natalia Hernández fue vista por última vez en el aeropuerto de la Palma, Santa Cruz de Tenerife, el pasado 24 de octubre, cuando aterrizó en la isla bonita para emprender un nuevo ciclo en su vida trabajando en un hotel de Fuencaliente. Dos meses después, no se sabe nada de la joven que nunca llegó a recoger su equipaje. La familia de Natalia denunció su desaparición 18 días después de no tener ninguna noticia de ella. 

Natalia había pasado por una ruptura sentimental y según sus amigos estaba algo perdida. También afirman que era una mujer que solía cambiar con frecuencia de lugar de residencia y que trabajaba por temporadas. El último sitio en el que había vivido antes de emprender rumbo a las Islas Canarias, fue en un camping de Madrid, donde residía junto a otras personas.

Según informan fuentes cercanas a elcierredigital.com “se tardó en denunciar porque no tenía un domicilio fijo. Finalmente, quien denunció su desaparición fue un amigo suyo de Tenerife”.

Aeropuerto de La Palma | Accesos y fachada exterior de la nu… | Flickr

Aeropuerto de la Palma.

Alexander Galván Baute, abogado portavoz de la familia y amigos, ha manifestado que Natalia viajó con su teléfono pero no se tiene rastro de su ubicación. Actualmente se mantienen todas las hipótesis abiertas, como que se pudiese tratar de un secuestro, una fuga o una desaparición voluntaria.

Natalia Hernández es una mujer de 34 años, de complexión delgada y pelo largo y rubio. Mide 1,68m y pesa 50 kg. Además, lleva un tatuaje que va desde la parte anterior del hombro derecho hasta la mitad de la espalda y un piercing en el lado derecho de la nariz. El día de su desaparición vestía pantalón y abrigo oscuro y un calzado deportivo rosa.

Una desaparición con muchos interrogantes

Elcierredigital.com ha contactado con Santiago Martín, coordinador de SOSDesaparecidos en Canarias que explica: “Hacía tiempo que Natalia llegó a Canarias desde la Península y pasó por varios puntos de las islas, parece ser que tenía amistades en varios puntos de Canarias. Fue un amigo suyo quien dio conocimiento a la Guardia Civil de que hacía tiempo no sabía nada de la chica, ya que él había dejado a la joven en el aeropuerto de Tenerife . Ella se estuvo moviendo por algunas islas, ya que trabajaba asiduamente. Estuvo en Tenerife viviendo en varios sitios hasta que le ofrecieron trabajo en la isla de La Palma y se desplazó allí”.

Santiago narra que “a través de las cámaras se confirma que Natalia llega a la Palma, pero a partir de ahí se le pierde el rastro. No se trata de un caso en el que haya desaparecido por gusto propio ni por haberse ido de casa, sino que se trata de una situación difusa. Tampoco sabemos si pudo ser manipulada por alguien, porque es un poco extraño que llegue a la isla con su maleta y deje la maleta atrás”.

Tatuaje de la joven

“Antes de llegar a la isla estuvo trabajando en un albergue de Tenerife durante una semana, donde contactó con un conocido, que fue quien la llevó al aeropuerto. De su familia tan solo hemos tenido contacto con una prima y una tía suya, creemos que mantenía muy poco contacto con familiares directos. Es una desaparición un poco oscura porque hay un montón de lagunas desde que comienza su odisea hasta que se la empieza a buscar, este caso no pinta bien, porque ha podido ocurrir de todo y se sabe muy poco”, concluye Santiago Martín.

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