Absuelven al sospechoso crimen de Nerea Añel, declarado culpable previamente: "Es un escándalo"

Nerea Añel desapareció en enero de 2020 y fue encontrada sin vida en una aldea de Orense. Desde un primer momento los focos se centraron en el novio de Nerea en el momento del crimen, Julio González Sierra, que ya se encontraba en la prisión provincial de Pereiro de Aguilar por delitos contra la propiedad. El 19 de febrero dio comienzo el juicio por el crimen de Nerea en la Audiencia Provincial de Ourense. 

Tras el juicio el jurado consideró que Julio era culpable de un delito de homicidio por omisión al no auxiliar a la víctima tras una caída que le provocó un traumatismo. Pese al veredicto unánime el magistrado de la Audiencia de Ourense, Antonio Piña, deliberó que el jurado había errado en su veredicto. El magistrado explicó que no se pudo determinar si la prestación de asistencia médica hubiese evitado la muerte y que el jurado consideró que estos hechos no quedaban probados. 

Además, otra de las claves fue que según el magistrado la pareja solo llevaba dos meses saliendo, por lo que “no se puede concluir que una relación de noviazgo tan corta presente la estabilidad necesaria para hacer nacer la obligación de garantía, algo que para la Fiscalía sí era así. La sentencia también estableció que no se puede afirmar cómo se produjo el fallecimiento de Nerea. Por todo esto, el magistrado absolvió a Julio del delito de homicidio por omisión. No obstante, cabe presentar recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Galicia.

Nerea Añel junto a su madre.

Esta decisión del magistrado ha indignado a gran parte de la sociedad, que ve como “la justicia ha dejado escapar a un culpable”. La madre de Nerea, Belén Vázquez, señalaba, “después sorprende la alta tasa de víctimas de violencia de género en España. ¿Para qué va a trabajar la Policía si los señores magistrados sacan a los delincuentes por la puerta de atrás?. Es una burla y una ofensa”. De hecho, la propia asociación SOS Desaparecidos ha catalogado la decisión del magistrado como “un auténtico escándalo”.

Fuentes cercanas al caso consultadas por elcierredigital.com señalan “es impresionante que se tenga al culpable, el jurado tome una decisión y el magistrado decida contradecir esa decisión. No se han hecho las cosas bien, es inaudito que el culpable quede impune. Es muy anómalo que un magistrado manifieste un criterio diferente al del jurado. El cuerpo de Nerea no se movió solo, alguien tuvo que llevarlo hasta allí. Es algo muy injusto para Nerea y su familia. Lo que no puede ser es que pase de ser culpable a inocente. Es indudable que el acusado no auxilió a la víctima y eso fue crucial para el fatal desenlace, hay muchos indicios”.

 Lo acontecido en el juicio

En la vista Julio estaba acusado de un delito de homicidio por el que se solicitaban 14 años de prisión. En el juicio el acusado negó su implicación en los hechos asegurando que no estaba con Nerea cuando falleció y su defensa, representada por Cristina Rial, solicitó la absolución tras afirmar que no se podía acreditar la vinculación de Julio con la muerte de Nerea. 

La acusación particular, representada por la madre de Nerea y ejercida por el letrado Jorge Temes, consideró que Julio atacó a Nerea en un camino que iba al motel donde ambos se alojaban. No obstante, la Fiscalía mantuvo que  ambos huyeron por el camino y la joven sufrió un golpe que, de recibir ayuda, no hubiese fallecido, ya que su muerte no fue instantánea. 

El jurado consideró probado por unanimidad que el acusado se encontraba presente en el momento en el que la joven sufrió un traumatismo craneoencefálico y vertebral y que no le prestó asistencia. Por otro lado, el jurado entendió que no había pruebas de que el acusado la golpease o la arrojase al río, ni tampoco que cargarse el cuerpo y lo depositase allí. Por ende, se adhirieron a la tesis de la Fiscalía y no a la de la acusación particular.

Autoridades trabajando en la zona en la que se encontró el cuerpo de Nerea.

En su relato en el juicio, el acusado señaló que ambos pasaron la noche juntos en un motel de Barbadás después de atracar a un taxista. Tal y como señalaba La Voz de Galicia, Julio recalcó que al día siguiente no les dejaron coger un taxi porque la empleada del motel advirtió de que habían robado a otro taxista. Por ese motivo, Julio sostuvo que se fueron caminando del motel y que al cruzarse con un coche de la Guardia Civil Nerea se asustó y le dijo que quería entregarse. Por ello, ha señalado que pensaba que Nerea estaba detenida.

Según la versión de Julio, en ese momento ambos se separaron y ya no volvió a ver a Nerea. Cabe recalcar que el cadáver de Nerea apareció en un río que se encuentra cerca de un camino que da al motel donde ambos se alojaron. Julio negó categóricamente conocer ese camino ni haber andando por el mismo con Nerea. Sin embargo, el jurado descartó la versión del acusado de que se marcharon por la carretera y después se separaron.

Los hechos ocurridos

En septiembre de 2020 unos senderistas que caminaban por Os Muiños, una aldea abandonada de la parroquia de Barbadás, en Galicia, encontraron el cadáver de una mujer en avanzado estado de descomposición. Tras la intervención de las autoridades, la autopsia y el estudio de los restos por parte del Laboratorio de Criminalística de la Dirección General de la Guardia Civil en Madrid confirmaron que se trataba del cuerpo de Nerea Añel, la joven de 26 años que llevaba desaparecida desde enero de 2020.

Tal y como explicaba La Voz de Galicia en 2021, el sospechoso, al que se le imputaba un delito de homicidio, contaba con un amplio historial delictivo a sus espaldas. De hecho, en aquel entonces se encontraba en prisión por otras razones. La noche de Reyes de 2020 fue la última vez en la que se vio a Nerea con vida. La joven acudió a cenar con su madre y sus familiares pero, tras esa reunión, su familia no supo nada más de ella.

Según apuntaban fuentes de la investigación, los hechos por los que se detuvo a Julio y que provocaron el fallecimiento de la joven tras romperse el cuello después de que alguien la empujase, tuvieron lugar cerca de un motel de Barbadás en el que ambos estuvieron alojados en la noche de su desaparición. La reconstrucción realizada en junio de 2021 resultó clave para descubrir qué sucedió en los alrededores de ese motel, lugar del que, según los testimonios recabados por los investigadores, ambos salieron juntos pero al que Nerea nunca regresó. Una testigo afirmó que, al volver al motel sin la joven, Julio estaba nervioso y dijo que no usaría más la habitación.

Pese a que Nerea estaba pasando por momentos duros, la joven había recuperado la relación con su madre, quien trató de encontrarla desde el primer momento, repartiendo carteles con su foto por toda la ciudad. De hecho, su familia denunció en su día que, en los últimos años, Nerea frecuentaba ambientes marginales de la ciudad y se relacionaba con personas a las que la familia no conocía, siendo una de ellas Julio.