Cómo afrontar el verano con los niños: Es importante que se aburran

Con la llegada del verano, los padres se enfrentan al desafío de gestionar sus vacaciones, junto con el tiempo libre de sus hijos. El verano puede ser una oportunidad maravillosa para que los niños desarrollen habilidades de independencia y creatividad. 

Desde elcierredigital.com hablamos con el psicólogo y exdefensor del menor Javier Urra, quien asegura que: "En verano, a diferencia de otras épocas del año,  las familias tienen más tiempo para hacer distintas actividades, pero es importante cuadrar horarios para todo, para fijar la hora de comer, de cenar, la hora de ir a la piscina, la playa...". 

El verano es una época esperada por muchos niños, ya que representa una pausa en las actividades escolares y la posibilidad de disfrutar de más tiempo libre. Sin embargo, para los padres, esto puede ser un reto en términos de cómo mantener a sus hijos ocupados y felices sin recurrir a un exceso de actividades planificadas o uso de tecnología. Con un enfoque equilibrado y algunas rutinas, los padres pueden ayudar a sus hijos a disfrutar del tiempo libre de manera constructiva, fomentando un ambiente familiar relajado y feliz.

Consejos para hacer en verano

En verano, a pesar de tener mucho más tiempo libre que en cualquier otra época del año, es importante para los padres planificar bien sus vacaciones y las actividades a realizar en ellas con sus hijos, pero también aquellas que les permitan tener cierto espacio para disfrutar también de su tiempo libre. "Es importante que en esta época se aburran, porque al final es algo normal de la vida. A lo largo de la vida habrá muchos momentos, y en cualquier época del año, en los que todos nos aburrimos. Permitir que los niños se aburran puede ser beneficioso para su desarrollo emocional y creativo", señala Javier Urra.

"Estoy totalmente a favor de mandar a los niños a los campamentos de verano. Que socialicen con otros niños, que conecten con la naturaleza, que sean más independientes... son todo beneficios para ellos y para los padres", señala Javier Urra. "También veo muy positivo el que se junten varias generaciones en una misma casa  de la playa o del pueblo -abuelos, padres y nietos- para que los más pequeños aprendan también cosas de los más mayores", añade.

Además, crear rutinas y hábitos durante las vacaciones es esencial, esto ayuda a los niños a sentirse organizados y seguros. Incluir tareas ligeras, tiempo de lectura y actividades de ocio puede ser beneficioso para mantener un equilibrio entre el descanso y la responsabilidad. "Hay que educarles de tal forma que colaboren en las tareas básicas del hogar como ayudar a poner la mesa; y que no piensen que todo es suyo y aprendan a compartir con los demás, por ejemplo: Aunque le gusten mucho las avellanas, si hay un plato de avellanas en la mesa, aunque sea el más pequeño no puede ser todo para él, tiene que dejar para que lo prueben también los demás", asegura Javier Urra.

El uso de la tecnología es otro aspecto crítico. Es importante limitar el tiempo que los niños pasan frente a pantallas y fomentar actividades físicas y creativas al aire libre. "Que una familia que vive en la ciudad se vaya un día a un pueblo o un sitio rural a conocer las costumbres de allí, y viceversa, que una familia rural se vaya un día a la gran ciudad a conocerla", señala Javier Urra. Es fundamental que los padres den el ejemplo, estableciendo acuerdos claros sobre el uso de dispositivos electrónicos y respetándolos ellos mismos. "Apoyo que se usen dispositivos electrónicos como móviles y tablets si se usan para un bien común: Buscar algo interesante sobre un sitio que se vaya a visitar, responder mensajes, contestar llamadas... Pero si es para jugar a juegos violentos o para ver pornografía no lo recomiendo en absoluto", concluye.