Alerta alimentaria en España: Gominolas 'sin gluten' y pistachos vinculados al cáncer.

La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN)  publica periódicamente alertas sobre los productos que están en el mercado. Recientemente, difundió una nota de advertencia sobre un producto comercializado en nuestro país que muestra en su envase el símbolo que lo define como producto 'sin gluten', pero que contenía, según la lista de ingredientes, harina de trigo. La consecuencia de esta incongruencia ha sido su retirada del mercado y la recomendación de que las personas celiacas o con problemas derivados del gluten no consuman los que ya están en circulación.

Ese mismo día, el Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos de la Unión Europea (Rasff) emitió una  alerta sanitaria desde España, advirtiendo de la presencia de aflatoxinas, hongos muy tóxicos y altamente peligrosos, que son capaces de causar, según la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC), cáncer en humanos. Estas sustancias se encontraban por encima de los niveles permitidos en pistachos procedentes de Turquía.

Estas alertas subrayan la importancia de las organizaciones que garantizan la seguridad y salud pública en el ámbito de la alimentación. Su labor de vigilancia y control contribuye a proteger a la población de riesgos asociados con los alimentos, además de desempeñar un papel fundamental en garantizar que los alimentos que llegan a nuestras mesas son seguros y saludables.

Gominolas con gluten

"No basta con que aparezca el símbolo de la espiga, con un círculo y una línea en diagonal (que significa "sin gluten"), hay que leer la etiqueta con los ingredientes", asegura el doctor Darío Fernández a elcierredigital.com. E insiste en que a pesar de que haya productos etiquetados como "sin gluten", es importante ser consciente de la posibilidad de que en los productos existan rastros de esta proteína, por lo que es conveniente leerse la información adicional para tomar decisiones informadas sobre su consumo.

La alerta de este viernes de la AESAN se refiere a un lote de gominolas que se comercializan en España, que tienen en el envase el símbolo de producto sin gluten, pero en su etiquetado aparece la harina de trigo como uno de sus componentes. "Falta una educación en la población, la gente tiene que  leer la etiqueta de los componentes y no el mensaje de marketing que hay en el cartón", señala el doctor Darío Fernández. 

Según la información proporcionada, se trata de un lote del producto MEGALIZ RELLENO, de la marca Miguelañez, cuya distribución se ha realizado por todo el territorio español. Se recomienda que se abstengan de consumirlo las personas celiacas o con problemas derivados del gluten.

"Las personas alérgicas al gluten que lo consumen, por lo general, tienen síntomas leves", señala Darío Fernández. Sin embargo, pueden variar desde malestar estomacal y diarrea hasta consecuencias más graves como problemas de crecimiento en bebes o problemas de atención y concentración en adolescentes. "Recomiendo a los celiacos que estén atentos al gluten oculto que puede haber en salsas, helados, embutidos, yogures, chocolates...", añade.

"Se trata de un fallo humano", sospecha el doctor Darío Fernández en este caso concreto. Entiende que se trata de un error en el etiquetado de un lote de este producto, pues "todos los productos siguen un proceso indicado por Sanidad para ser autorizados". Y considera que retirando el producto del mercado ya es suficiente sanción para la empresa.

Pistachos que producen cáncer

Tras detectar la presencia de aflatoxinas por encima de los niveles permitidos en unos pistachos procedentes de Turquía durante un control fronterizo, el sistema Rasff emitió una alerta sanitaria en España, donde se advertía de los riesgos que supone para la población su exposición a esta toxina. Sin embargo, no ofrece otros datos esenciales como la marca bajo la que se comercializa o la plantación de donde proceden estos pistachos.

Estas toxinas están producidas por el hongo Aspergillus, y las podemos encontrar en una amplia variedad de productos que se consumen a diario: Frutos secos, higos secos, cacahuetes, maíz, arroz, cereales en grano... El problema viene cuando crecen en alimentos almacenados de forma inadecuada, en ambientes cálidos y húmedos.

Sus principales síntomas son dolor abdominal, náuseas, vómitos, piel y ojos amarillos, somnolencia, pérdida de conciencia o convulsiones. Y sus consecuencias son más peligrosas en niños, pudiendo llegar a ser mortales, en función de la cantidad de aflatoxina ingerida.