26 de abril de 2024
|
Buscar
FIN DE SEMANA

Según el abogado Alberto García Cebrián, los motivos de separación van a dejar de ser internos para ser, en muchos casos, por estrecheces financieras

La evolución de los divorcios en España: Se pasará de los problemas afectivos a las dificultades económicas

El Cierre Digital en
/ Una pareja firma su divorcio.
A partir de este año 2023 aumentará el número de familias que quieren divorciarse, pero se verán reducidos los divorcios. Según explica el abogado Alberto García Cebrián, esta afirmación es consecuencia de las dificultades económicas y la inflación previstas, que afectarán a gran parte de las familias españolas. Para muchas, se hará realidad la frase de “cuando el dinero sale por la puerta el amor salta por la ventana”.

Teniendo en cuenta los datos de finales del año 2022, este 2023 aumentará el número de familias que quieren divorciarse, pero se verán reducidos los divorcios. A pesar de que muchos matrimonios necesitarán divorciarse, no todos podrán hacerlo por no poder cesar la convivencia y costear vidas por separado. Todo esto se deriva de la inflación y problemas económicos que se prevén para este nuevo año.

Las dificultades económicas previsiblemente crearan un malestar y preocupación en las familias que constituya una recurrente causa de divorcio. Para muchas familias se hará realidad la frase de “cuando el dinero sale por la puerta el amor salta por la ventana”.

En paralelo, también por las dificultades económicas, muchas familias no podrán separarse pues no será viable cesar la convivencia por no poder costear vidas por separado. Si ya va a ser complicado llegar a fin de mes estando juntos con el ahorro que ello supone, el divorcio no va a ser viable para una gran parte de las familias.

Personas con trabajo pueden pasar a estar en riesgo de exclusión social por el mero hecho de estar divorciados, lo que puede llevar a muchos matrimonios que necesitan divorciarse a mantener una convivencia tensa e insana que no quieren, pero llegar a final de mes. La otra opción, sería divorciarse a sabiendas de que sus gastos pueden ser mayores a sus ingresos. Además, cuanto mayores sean las responsabilidades familiares, más complicado será todo: Con hijos, hipotecas, préstamos… etc.

Un ejemplo real al que se enfrentan muchas familias en España

·       Familia con dos hijos en la que cada uno de los progenitores tiene un sueldo de 1.200 euros.

·       Residiendo en una ciudad como Madrid o Barcelona en la que un alquiler muy económico supone 700 euros.

Estando juntos podrán cubrir sus necesidades familiares, pero estando separados, si deben de costear dos viviendas, supondrá que cada uno de ellos deberá pagar unos 700 euros y por tanto tendrá 500 euros para llegar a fin de mes. Según están los costes de vida, por muy ahorrativos que sean en alimentación básica se gastarán 300 euros, en suministros otros 150 euros y en transporte público o coche y gasolina, ropa, teléfono/internet, gastos de ocio, gastos educativos y extraescolares de los hijos, imprevistos por mínimos que sean… mínimo otros de todos los miembros de la familia mínimo otros 150 euros… Es incuestionable que no salen las cuentas.

¿Usted que haría si quiere divorciarse pero entiende que no salen las cuentas y no es viable en términos económicos?

Yo y estoy seguro que la gran parte de familias, ante ese caso, aguantaríamos en una convivencia lo más razonable posible siempre y cuando no se sobrepasen ciertos límites. A pesar de ello, que conviva una pareja que necesita separase puede ser un foco de conflictos.

Según un informe del Consejo General del Poder Judicial, el tercer trimestre de 2023 los divorcios han bajado un 3,1 por ciento y previsiblemente el último trimestre de 2022 seguirá en la misma tendencia.

¿Qué ocurrirá en España con los divorcios en 2023?

La tensión, preocupación y estrecheces económicas provocarán que aumente el número de familias que necesite y quiera divorciarse, pero no puedan hacerlo y eso es muy preocupante.

Algunas de las últimas medidas del Gobierno ayudarán a las familias, pero no lo suficiente.

·   Vivienda: Seguirán aumentando las hipotecas variables y las familias que tengan que irse de alquiler se enfrentarán a precios muy elevados.

·     Alimentación: Aunque se hayan tomado medidas, son muy limitadas y la cesta de la compra está a unos precios que hará que se tenga que reducir drásticamente el presupuesto de la compra.

·   Suministros y combustibles: La inflación hace que muchas familias este invierno no puedan calentar sus hogares como necesitarían y pasen una situación de precariedad.

Como siempre, en los momentos difíciles, los más perjudicados son los más débiles, pues una familia media en España ha reducido su calidad de vida hasta tal punto de que quedarse en el paro para uno de los miembros o reducir sus ingresos, o simplemente tener que hacer frente a gastos imprevistos harán que no salgan las cuentas.

Aumentará la morosidad, los hurtos famélicos, las colas de los comedores sociales, los conflictos dentro y fuera de las familias fruto de la tensión, algunas empresas y autónomos dejarán de tener medios de vida viables... etc. La situación para muchas familias pasará a ser límite y dramática.

divorciosdentro

Representación de una familia que se plantea el divorcio.

En este contexto, lo razonable sería que la sociedad pasara a una vida más austera y ahorrativa y las familias se unieran más aún en beneficio común. Se acumula la experiencia de la crisis de la burbuja inmobiliaria de 2007, de la del Coronavirus de 2020 y la de la guerra de Ucrania que estamos atravesando.¿Hemos aprendido de todo lo vivido?

¿Una parte de la sociedad en España sigue viviendo por encima de sus posibilidades? El divorcio no es un capricho, es una necesidad. El hecho de que una persona sienta que quiere divorciarse y no pueda hacerlo será someterla a una vida y estado civil que no quiere realmente. Los costes de muchos abogados de familia son accesibles, pues no todas las familias pueden acceder a la justicia gratuita y obtener abogado de oficio.

Cada vez llegan a los despachos de abogados familias que quieren separarse en las que por no salir las cuentas, no hay una regulación viable pues no pueden asumir los costes de vida por separado. Esto es muy grave. Una mala convivencia es un muy mal ejemplo para los hijos y puede hacer un daño irreparable en la autoestima y salud mental de las personas.

Se espera un año 2023 muy duro para las familias, pero lo más importante es rebajar la tensión en todas las relaciones. Se pueden prevenir muchas de las rupturas, pues los motivos de separación van a dejar de ser internos para ser, en muchos casos, por estrecheces económicas. Además, de ser necesario el divorcio, ahora más que nunca, mejor amistoso.

COMPARTIR: