01 de mayo de 2024
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FIN DE SEMANA

Esta es la última versión de una norma que pretende que todas las violencias sexuales sean consideradas como violencia machista

Acoso callejero, consentimiento sexual, violación... Los términos que cambian con la Ley de Igualdad del 'solo sí es sí'

Manifestación feminista.
Manifestación feminista.
La ley de Libertades Sexuales, conocida popularmente como la del "solo sí es sí", ha experimentado una serie de cambios con el objetivo de ser aprobada por las autoridades pertinentes en los próximos meses. Las principales novedades están relacionadas con el aumento de la horquilla de las posibles penas, la protección a los niños menores de dieciséis años, la inclusión de un consentimiento positivo o la lucha y prevención de este tipo de violencia.

El día 3 de marzo del pasado año, el Ministerio de Igualdad, liderado por Irene Montero, logró que la Ley de Libertades Sexuales, conocida como la ley del “solo sí es sí”, llegara al Consejo de Ministros. Más de un año después de que este hecho se produjera y, tras una serie de cambios como consecuencia de las discrepancias con Justicia, esta norma será enviada al Congreso de los Diputados como proyecto de ley.

La modificación más importante que se ha realizado en esta última versión está relacionada con la consideración de la existencia de consentimiento “en positivo” de una mujer a participar en el acto sexual. En los borradores anteriores, se afirmaba que no existe consentimiento “cuando la víctima no haya manifestado libremente por actos exteriores, concluyentes e inequívocos su voluntad expresa de participar en el acto”, mientras que en los actuales “solo se entenderá que hay consentimiento cuando se haya manifestado libremente mediante actos que expresen de manera clara la voluntad de la persona”. De esta manera se elimina la doble negación que dificultaba la correcta comprensión del texto.

Irene Montero durante una rueda de prensa.

Pero este no es el único cambio que ha llevado a cabo el Ministerio de Igualdad ya que, tal y como han explicado desde la entidad, también se han incorporado al proyecto algunas variaciones respecto a las penas de los delitos. El sistema que se utilizará para establecer las condenas será progresivo, proporcional a la gravedad del delito y contará con horquillas más amplias que permitirán dar respuesta a las diferentes circunstancias que pueden existir. Además, se especifican una serie de agravantes como las agresiones grupales, el uso de armas o la especial vulnerabilidad de la víctima.

Uno de los pilares de esta ley que sí se mantiene es considerar todo acto sexual sin consentimiento como una agresión, lo que provocará que los abusos sexuales, que no son considerados como violación al no existir violencia o intimidación, sean eliminados del Código Penal. Este cambio tiene como consecuencia una redefinición de las penas que puede llegar a perjudicar a las víctimas si se concreta en una rebaja.

Otro gran objetivo del Ministerio de Igualdad es proteger a los menores de edad que sean víctimas de violencia sexual. Respecto a este asunto, la nueva ley propone incluir a niños menores de dieciséis años con el fin de asistirles si sufren este tipo de delito.

Manifestación contra la violencia de género.

El acoso ocasional también será penado y el acoso reiterado no necesitará alterar gravemente la vida cotidiana de la víctima, sino que solo será necesario que la altere para ser considerado como tal.

En cuanto a las compensaciones a las víctimas, la ley pretende equiparar la prestación de orfandad que reciban los hijos de mujeres asesinadas tras una agresión sexual con la que reciben los niños que pierden a su madre en crímenes de violencia de género. Y se creará un fondo que irá destinado a compensar a las víctimas de la industria del proxenetismo y cualquier víctima de violencia sexual tendrá garantizado el derecho de asistencia integral especializada.

En cuanto a otros tipos de violencia contra la mujer como la trata con fines de explotación sexual, la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado y la difusión digital de pornografía no consentida y extorsión, serán incluidos como violencia sexual y se unirán a las agresiones, el exhibicionismo, la prostitución y la corrupción de menores, que ya se encontraban en el Código Penal.

Por último, con el fin de prevenir este tipo de delitos, el sistema educativo incluirá la integración de contenidos sobre educación sexual en igualdad para sus alumnos y se promoverán acuerdos con empresas del mundo digital para implementar medidas de prevención y concienciación de este tipo de crímenes que tanto daño hacen a la sociedad.

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