El “efecto Illa” traslada su efecto a VOX
Las encuestas más recientes confirman que el efecto Illa ya es pasado. La posición de salida como ganador por haber sido Ministro ya no es real. Su llegada a Cataluña en el peor momento de la tercera ola le está suponiendo un descrédito de cara a los electores. En una entrevista concedida el pasado fin de semana aseguraba que quiere “recuperar el orgullo de la sanidad catalana” por aquello de lucir su carrera en Sanidad y tranquilizar al votante.
Illa ha mencionado en un mitin: “Os prometo que este voto esta vez sí va a tener utilidad”. La posición ideológica del PSC en estas elecciones quiere congregar el voto de los electores más constitucionalistas como ya ocurriera con Cs en 2017. Pero, la amenaza (real) radica en que el pacto más plausible del PSC será con los independentistas, como ya ocurrió en Madrid.
La alta abstención, el deshinche de Illa y la falta de proyecto independentista podrían favorecer a VOX. Al PSC la subida de VOX no le perjudica en principio. Illa ha defendido que a VOX hay que discutirle con “argumentos y no a pedradas”. Las agresiones vividas en los mítines le aportan una notoriedad que favorece al PSC, frente a Cs o PP en el lado constitucionalista.
