26 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Elcierredigital.com ya adelantó en junio de 2019 que el presidente de la RFEF le prometió que le guardaría el puesto para cuando quisiera volver

Los últimos meses de Luis Enrique, de luchar contra el cáncer de su hija al banquillo de la selección de Luis Rubiales

Luis Enrique en su etapa de la selección española.
Luis Enrique en su etapa de la selección española.
La vuelta de Luis Enrique al frente de la selección española de fútbol ha cogido de sorpresa a todo el mundo, excepto a los lectores de elcierredigital.com, ya que en junio de 2019 adelantamos en exclusiva el acuerdo al que habían llegado el entrenador y el presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales. El seleccionador necesita concentrarse en un objetivo y ya lo ha encontrado: Ganar la Eurocopa 2020.

El perfil del seleccionador que está de vuelta a los terrenos de juego después de tres meses de luto es el de un luchador, que pasó de jugar al fútbol como profesional a correr maratones como aficionado y ahora deberá superar la pérdida de su hija Xana el pasado 29 de agosto para triunfar al frente de la selección española de fútbol en la próxima Eurocopa. Dejó el cargo en junio para volcarse en el cuidado de su hija menor, a la que acompañó a hospitales en Alemania y en Barcelona. Estuvo hasta el último momento acompañándola y ahora, cinco meses después se siente con fuerzas para afrontar un nuevo reto y volver a ocupar el banquillo de la selección.

Nacido en Gijón (Asturias) el 8 de mayo de 1970, Luis Enrique tiene 49 años. Tras pasar por el Real Madrid y el F. C. Barcelona, como centrocampista, debutó como entrenador en el equipo blaugrana en 2008. Después, pasó por el Roma y Celta de Vigo, entre otros equipos.

Su esposa, Elena Cullel, familiar de una conocida y reconocida periodista catalana, también alto cargo de la Caixa en su día, sufrió mucho cuando el asturiano se puso al frente de la Roma durante la temporada 2011-12 y las cosas no fueron bien.

Luis Enrique y Elena Cullel.

Tras esta etapa, pudo devolverles a los suyos la estabilidad al ser fichado por el Celta de Vigo. Luis Enrique vivía entonces a caballo entre Vigo y Barcelona. “He dejado a mi mujer y a mis hijos en Barcelona y a mí me cuesta mucho vivir lejos de mi familia. Este es un punto en contra que he valorado mucho”, dijo en su momento a los medios de comunicación.

Contrajo matrimonio el 27 de diciembre de 1997 con Elena Cullell, una azafata de la que se enamoró un año antes, cuando fichó por el Barça, y a la que lleva unido más de dos décadas. Ella pertenece a la alta burguesía catalana, ya que su padre, Francesc Cullell, es un reconocido curtidor de pieles, con negocios en toda España.

Luis Enrique y Elena Cullel el día de su boda.

Elena estudió en el prestigioso Liceo Francés de Bon Soleil, de Gavà. Mejoró su inglés en Estados Unidos y se licenció en Económicas en Barcelona, aunque nunca ha ejercido su profesión. Cuando Luis Enrique aterrizó en Barcelona, después de su paso por el eterno rival blanco del Real Madrid, enseguida se enamoró de esta joven catalana. Ella tenía por entonces 25 años y era azafata de tierra de una conocida compañía aérea.

La pareja tuvo tres hijos: Pacho de 19 años, Sira de 18 y una pequeña niña de nueve años, Xana, tristemente fallecida y por lo que el seleccionador tuvo que abandonar el equipo en la fase de clasificación para la Eurocopa. El primogénito combina sus estudios con su pasión por el fútbol y el paddle-surf, mientras que Sira se ha convertido en una reconocida amazona, que ya ha conseguido sus primeras medallas.

Una casa familiar de 800 metros

La pareja vive en Gavá, un conocido y próspero municipio de la comarca del Bajo Llobregat, provincia de Barcelona. Allí mandaron construir una casa de 800 metros cuadrados sobre un terreno de 2.400 metros, con piscina y pista de paddle incluidos. Una de sus pasiones es su parque automovilístico. Por eso, Luis Enrique tiene un garaje de 60 metros cuadrados, donde guarda tres coches de alta gama.

Además del fútbol, Luis Enrique es un asturiano apasionado de otros deportes, como el ciclismo y la natación. Entre sus logros figuran subir el Mortirolo, el Tourmalet y la Marmolada. Además, ha corrido la Quebrantahuesos y completó el Ironman de Klagenfurt (Austria), una prueba durísima compuesta por 3.800 metros de natación, 180 kilómetros de bicicleta y la prueba reina del atletismo, la Maratón.

Luis Enrique en bicicleta.

La bicicleta le ha servido de refugio durante estos tres últimos meses de luto y se le ha podido ver salir de su casa algunos fines de semana. Su carácter más introvertido deja traducir poco sus emociones, pero sus amigos creen que su esposa Elena tardará más en reponerse, aparentemente.

El asturiano considera que su familia es su mayor tesoro y siempre ha querido mantenerlos lejos de los flashes, por eso en aquel momento dejó la selección, dio el paso adelante y decidió que su familia era más importante que su trabajo al frente de la Selección Nacional.

Con aquella decisión que solo conocieron Rubiales y Molina, el director deportivo de la selección, se confirmó lo que ya adelantó elcierredigital.com, que Luis Enrique habría puesto su cargo a disposición de Luis Rubiales, pero que el presidente de la Federación Nacional de Fútbol habría confirmado su confianza en el seleccionador permitiéndole quedarse en Barcelona todo el tiempo necesario e, incluso, ausentarse fuera de España. Después, sin embargo, el exseleccionador entendió que era el momento de dar un paso a un lado por el bien del combinado nacional. Ahora, vuelve para ganar la Eurocopa.   

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