Diez comunidades en alerta por fuertes lluvias y vientos: aviso urgente de la AEMET

La jornada de hoy trae consigo un escenario meteorológico marcado por la inestabilidad. Con diez comunidades autónomas bajo alerta, según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET).

El inicio de la semana ha venido cargado de fenómenos extremos. Con precipitaciones intensas, vientos fuertes y oleaje que afectarán a gran parte del territorio español. Las borrascas continúan atravesando el país, generando una situación complicada para muchas regiones.

Las comunidades afectadas según la AEMET por estos fenómenos son Andalucía, Castilla y León, Galicia, Aragón, Castilla-La Mancha, Cataluña, Extremadura, Madrid, Navarra y Aragón. Estas zonas han activado el aviso amarillo por lluvias, y salvo Galicia y Castilla y León, todas también mantienen la alerta por tormentas.

Aragón, en particular, se encuentra bajo aviso naranja tanto por lluvias como por tormentas, siendo una de las zonas más afectadas.

Fuertes lluvias y tormentas en gran parte del país

Uno de los elementos clave de esta inestabilidad es la presencia de varias borrascas que seguirán cruzando la península a lo largo del día.

Estas perturbaciones atmosféricas están provocando lluvias especialmente intensas en el oeste de Galicia, Castilla y León, y en varias áreas de Andalucía y Castilla-La Mancha. Extremadura también está recibiendo precipitaciones importantes, mientras que en el área cercana a los Pirineos se están registrando tormentas de gran intensidad.

Las lluvias, aunque más débiles, también se extenderán hacia otras regiones del país. La AEMET alerta de que comunidades como la Comunidad Valenciana, el sureste interior y la costa cantábrica occidental verán precipitaciones de menor intensidad. Pero que no dejarán de hacer acto de presencia durante el día.

Alerta por vientos fuertes y oleaje peligroso

El viento también será un gran protagonista en esta jornada. Las rachas más intensas se registrarán en áreas del noreste peninsular y en el Mediterráneo oriental, con vientos predominantes del sur y suroeste.

Las comunidades de Aragón, Baleares, Castilla-La Mancha y Cataluña ya tienen activadas las alertas por vientos fuertes. Mientras que en zonas costeras como Galicia y Andalucía, la preocupación principal es el oleaje. Estas regiones están bajo alerta debido a las fuertes olas que podrían causar problemas en las áreas más expuestas.

Se prevén rachas de viento que podrían alcanzar niveles peligrosos. Sobre todo en las zonas montañosas del norte y centro de la península. Así como en las costas de Galicia y en el mar de Alborán.

El poniente, por su parte, se intensificará en el estrecho de Gibraltar y Alborán. Agravando aún más la situación en las costas del sur de la península.

Descenso de las temperaturas máximas y ascenso de las mínimas

Además de las lluvias y los vientos, otro fenómeno relevante será el cambio en las temperaturas. Las máximas descenderán en la mayor parte del país, mientras que las mínimas subirán en áreas del este peninsular y en Baleares. Esto creará un contraste térmico en varias regiones, afectando la percepción del frío y generando una sensación de inestabilidad aún más marcada.

La AEMET también ha destacado que algunas zonas del sureste peninsular, Baleares y Canarias no verán un impacto tan severo como el resto del país. El seguimiento continuo de las condiciones atmosféricas es crucial debido a la velocidad con la que los frentes pueden desplazarse y cambiar el panorama meteorológico.

Qué esperar en las próximas horas

Con la entrada de estas borrascas, se espera que las precipitaciones continúen siendo persistentes en las regiones afectadas, y es probable que las tormentas sigan azotando el norte de la península. La situación se mantendrá inestable durante los próximos días. Ya que los restos del huracán Kirk, que llegará hacia mediados de semana, podrían agravar aún más las condiciones meteorológicas.

Con diez comunidades bajo alerta, es fundamental entender que las borrascas traerán lluvias y vientos a gran parte de la península. Además de un descenso de las temperaturas y un ambiente de inestabilidad que podría prolongarse durante toda la semana.