La desconocida señal de la DGT que hace temblar a muchos conductores: miles de multas

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha implementado una señal en nuestras carreteras que muchos conductores aún desconocen, pero que está causando un aumento significativo en las multas.

Esta señal se ha convertido en una herramienta crucial para la DGT, y su objetivo es mejorar la seguridad vial en tramos de carretera peligrosa. Sin embargo, su desconocimiento está llevando a muchos conductores a recibir sanciones inesperadas.

La curiosa señal de la DGT que miles de conductores temen

La señal en cuestión es un indicador de radar ubicado en tramos de carretera peligrosa. Este signo, que a simple vista puede parecer uno más del paisaje vial, tiene una gran importancia. Su diseño es bastante sencillo: un triángulo rojo con un radar en su interior y la palabra "Tramo de Control de Velocidad".

Indica que en ese tramo específico de la carretera hay un control de velocidad promedio. Esto significa que se mide la velocidad media a la que se circula entre dos puntos, y no solo en un punto específico como en los radares tradicionales.

Así funciona esta señal de radar en carreteras peligrosas

La señal de tramo de control de velocidad se coloca al inicio y al final de un segmento de carretera peligrosa. El sistema mide el tiempo que tarda un vehículo en recorrer este tramo.

Si el tiempo es menor al esperado, basado en la velocidad máxima permitida, se deduce que el vehículo ha superado el límite de velocidad. La consecuencia inmediata es una multa.

Este método es más efectivo que los radares fijos tradicionales. Evita que los conductores reduzcan la velocidad solo al pasar frente al radar y luego vuelvan a acelerarse. La presencia de la señal obliga a mantener una velocidad constante y adecuada a lo largo de todo el tramo, incrementando así la seguridad en las carreteras.

¿Por qué esta señal de la DGT genera tantas multas?

El problema principal radica en el desconocimiento de muchos conductores sobre el funcionamiento de esta señal. A menudo, los conductores no son conscientes de que se está midiendo su velocidad promedio y, confiando en que no hay radares fijos visibles, aceleran después de pasar la primera señal. Este error resulta en una multa cuando se supera la velocidad media permitida.

Además, la señal de radar en carretera peligrosa puede pasar desapercibida entre otras señales de tráfico, especialmente en rutas que los conductores frecuentan y donde ya están habituados al entorno. Este despiste se traduce en un aumento de sanciones que, según datos de la DGT, han incrementado significativamente desde la implementación de estas señales.

Es fundamental que todos los conductores se familiaricen con estas señales y entiendan su funcionamiento para evitar sanciones y contribuir a la seguridad vial. Prestar atención a las señales y mantener una velocidad adecuada en todo momento no solo evitará multas, sino que también hará las carreteras más seguras para todos.