
Adiós bombona de butano: avisan de un giro de 180 grados en España muy pronto
Las tradicionales bombonas de butano no son ajenas a los cambios en las rutinas de consumo de los clientes españoles
La bombona de butano lleva años presente en miles de hogares en nuestro país. Ya sea para cocinar, en calentadores o estufas, ha sido parte habitual de la vida diaria para miles de familias. Pero, a pesar de su resistencia al paso del tiempo, pronto podría verse afectada por cambios muy significativos en un futuro próximo.
En los últimos tiempos, las tendencias energéticas han empezado a señalar una transformación importante. Esta evolución no solo afecta a las fuentes de energía, sino también a los formatos y productos tradicionales. Será en los próximos años cuando este cambio empiece a hacerse visible para todos.

Un nuevo modelo de bombona empieza a ganar terreno
Empresas líderes como Repsol y Moeve han apostado por modernizar el concepto tradicional de la bombona de butano. El objetivo ha sido crear versiones más ligeras, manejables y acordes con las necesidades actuales. Repsol ya comercializa una bombona de 12 kg fabricada con acero más liviano, reduciendo su peso total a unos 17 kg.
Este nuevo envase no solo destaca por su menor peso, sino también por incorporar tecnología NFC para el control del producto. Gracias a esta innovación, los usuarios pueden gestionar de forma más eficiente el uso y el seguimiento de sus bombonas. Su precio, dentro del mercado libre, oscila entre los 20 y los 24 euros, dependiendo del establecimiento.
Moeve, por su parte, también ha lanzado sus propias versiones de bombonas más ligeras y ergonómicas. Estas unidades, de 12,5 kg, se venden a precios que van desde los 17,67 hasta los 20,94 euros, según informa La Razón. Ambas compañías buscan ofrecer productos que mantengan la funcionalidad de siempre, pero adaptados a los tiempos modernos.

Más alternativas energéticas llegan a los hogares
Además de la renovación de las bombonas clásicas, otras fuentes de energía están ganando terreno en España. El propano se presenta como una opción eficaz en regiones frías, ya que conserva mejor sus propiedades a bajas temperaturas. Actualmente, el formato de 11 kg tiene un precio regulado de 17,67 euros, lo que lo convierte en una solución competitiva.
Paralelamente, en las ciudades se promueve cada vez más el uso del gas natural canalizado y de tecnologías eléctricas como las cocinas de inducción. Estas alternativas reducen la dependencia de combustibles fósiles y ofrecen una mayor eficiencia energética en el día a día. También las bombas de calor están viviendo un auge, gracias a sus mejoras constantes en rendimiento y ahorro.
La transformación energética no es solo un cambio en los productos, sino en la forma en que las personas consumen energía. Empresas y administraciones están impulsando la transición hacia opciones más sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. El adiós a la clásica bombona naranja es un símbolo de esta nueva etapa que se abre paso en España.
Más noticias: