16 de junio de 2024
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FIN DE SEMANA

La interiorista neoyorquina que combinaba prendas de vestir de mercadillo con piezas de Versace colaboró con rostros como la actriz Greta Garbo

La historia de Iris Apfel, la influencer más longeva que a los 97 años se hizo modelo

Iris Apfel.
Iris Apfel.
Iris Apfel, un ícono de la moda conocido por su originalidad, falleció a los 102 años el 1 de marzo. Desde sus modestos inicios en Queens, Nueva York, hasta su impacto en la moda y el diseño de interiores, Apfel dejó una huella imborrable. Reconocida por su extravagante estilo y su mantra "más es más, y menos es aburrido", su legado perdurará con hitos como combinar prendas de mercadillo con piezas de reconocidas firmas de moda o por colaborar con personalidades como la actriz Greta Garbo.

Un verdadero símbolo de originalidad. Eso representaba para el mundo de la moda la icónica Iris Apfel, tristemente fallecida este primero de marzo a los 102 años. Pero no sin antes dejar una huella imborrable para toda la sociedad.

La exitosa empresaria era originaria de Queens (Nueva York) y  fue más que una empresaria o diseñadora de interiores. Así ha quedado patente en su estilo audaz, su pasión por la individualidad y su amor por la moda, los pilares que la convirtieron en un icono que trascendió y seguirá trascendiendo durante generaciones.

Porque lo cierto es que la fama no tiene edad, al igual que la moda. Ella misma lo demostró: conocida por las élites, vista en los mejores desfiles, pero sin que su nombre resonara demasiado en el panorama mundial. Porque fue ni más ni menos que a los 97 años cuando firmó su primer contrato como modelo, un contrato con la agencia de grandes rostros como los de Kate Moss, Hailey Bieber o, en nuestro país, Ester Expósito.

De la pobreza en Queens a las grandes esferas mundiales

Nacida en plena Gran Depresión en el “país de las oportunidades”, la carrera de Iris comenzó en el mundo de los textiles. Influida por sus padres empresarios (su madre tenía una boutique), desde pequeñita mostró interés por la moda y en la década de 1950, junto con su gran amor, Carl Apfel, fundó Old World Weavers. Una firma que adquiriría mucha relevancia en la reproducción de tejidos antiguos y que contaba con su propio showroom en la icónica Manhattan. Ambos eran unos apasionados de los viajes y recorrían Europa dos veces al año en busca de esos textiles únicos que no se encontraban en Estados Unidos.

Iris Apfel and Carl Apfel's Marriage: All About Their Decades-Long Romance

Iris y Carl Apfel.

Pero la influencia de la ya emblemática diseñadora se extendió más allá de la moda. Participó en grandes proyectos de restauración y diseño, y no sólo colaboró con personalidades como Greta Garbo, sino que su presencia llegó incluso a la Casa Blanca, donde diseñó para nueve presidencias, las más importantes del país. Su profundo conocimiento de los textiles y su talento para el diseño dejaron una marca indeleble en el mundo del interiorismo.

Convertirse en un icono mundial siendo fiel a una misma

Apfel no solo era una diseñadora de interiores talentosa, sino también una verdadera visionaria en el ámbito de la moda. Con un estilo sumamente extravagante, ella misma reconocía que sus diseños eran “clásicos pero exagerados”, caracterizados por las mezclas de texturas y los colores vivos y llamativos.

Contaba con una capacidad excepcional para combinar piezas únicas, y habitualmente lo hacía con ropa de reconocidas firmas de moda y de mercadillo, resultando ampliamente aclamada y ensalzada por ello. Porque lo cierto es que ella misma reconocía detestar las modas y apostar por la personalidad propia.

Sus enormes gafas redondas, un sello muy personal, eran un ejemplo visible de la audacia y originalidad de su carácter. Gracias a su estilo y trabajo, es considerada por muchos como la “influencer más antigua”, ya que hasta sus últimos días ha seguido siendo un referente de masas, ha sabido adaptarse a la perfección a la era de la digitalización y, con su debut en Instagram, la diseñadora fue toda una inspiración para las audiencias, cautivadas por su peculiar estilo, consiguiendo más de 3 millones de seguidores en dicha plataforma.

Iris Apfel: la rara avis que se convirtió en la interiorista favorita del  presidente y de los famosos | Architectural Digest

Iris Apfel.

Tal era el interés por esta transgresora mujer que en 2005 su propia colección de accesorios y ropa vintage se convirtió en el foco de una exposición en el emblemático Metropolitan Museum of Art de Nueva York. “Rara Avis (Rare Bird): the Irreverent Iris Apfel", fue la primera vez que el MET se centró en una mujer viva que no era diseñadora. Exposición para la que Iris no solo prestó su colección de joyas, sino que también vistió a los maniquíes con su estilo único y extravagante.

Su figura ha sido tan inspiradora que incluso ha dado lugar a colecciones de muñecas con su imagen, documentales sobre su vida, o sus colaboraciones con los gigantes textiles como Zara y H&M.

No solo dejó una huella enorme en la industria de la moda, sino que también inspiró a muchas personalidades a abrazar su individualidad y expresarse auténticamente, con su mantra, "Más es más, y menos es aburrido", lema que sigue resonando como un recordatorio de que la verdadera elegancia radica en la autenticidad y la pasión por la creatividad. Su legado perdurará como una referencia en estilo, originalidad y valor a la hora de expresarse, en un mundo que a menudo es muy conformista.

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