
Qué hay tras la 'negativa' de asilo político a disidentes rusos en España: Las claves
Varias asociaciones denuncian procesos lentos que acaban con el regreso de los refugiados a Rusia, donde son condenados
Existen casos de denegación de asilo a ciudadanos rusos en España. Estos están avalados por bases de datos y boletines de jurisprudencia de organizaciones como CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado).
Organismos como CEAR muestran cómo se han denegado solicitudes de protección internacional a personas rusas. Algunas de ellas, con órdenes de extradición.
En la misma línea, organizaciones de derechos humanos y algunos medios de comunicación han expresado preocupación y críticas sobre la gestión del asilo en España. Especialmente, en relación con "la lentitud de los procesos y la alta tasa de denegación general", según denuncian varias asociaciones ante elcierredigital.com. Estas señalan un colapso en las solicitudes de asilo en España, lo que puede demorar años la respuesta.
¿Está España vulnerando el principio de no devolución?
Consultados expertos jurídicos exponen que la normativa internacional (Carta de la UE, Convenio Europeo de Derechos Humanos) prohíbe la devolución de una persona a un país donde exista un riesgo real de ser sometida a la pena de muerte, tortura u otros tratos inhumanos o degradantes.
Se trata del conocido como principio de no devolución o 'non-refoulement'. Por lo que, si queda demostrado este riesgo en el país de origen, el asilo o alguna forma de protección subsidiaria debería ser concedida.

Sin embargo, España tramita estas solicitudes por la vía ordinaria. Esto dilata los plazos y convierte en un 'coladero' las solicitudes de extradición.
Presos políticos en cárceles infrahumanas
Este es el caso del disidente político ruso Valery Alexandrovich Postingran, responsable de la Asociación de Refugiados Políticos de Rusia. Es hijo del antiguo jefe del distrito de Klin –cerca de Moscú– Alexander Postrigan, quien, con más de 70 años, cumple una condena de 15 años de prisión en Volokolamsk.
Su condena fue efectiva en uno de los juicios sin garantías contra opositores políticos, padeciendo calamidades desde su cautividad. Postrigan ha sufrido desde su encarcelamiento un ataque al corazón, perdió la vista debido a la diabetes y está casi completamente sordo. Tiene unos 10 stents en el corazón, pero el gobierno ruso lo mantiene en prisión.
Este mismo futuro puede ser el que le espera a su hijo, contra quien el Gobierno de Putin ha pedido una orden de extradición.
Cambios de criterio con los disidentes
El Gobierno español manifiesta que existe una preocupación real y documentada sobre las concesiones de asilo a ciudadanos rusos en España. Sin embargo, la lentitud del sistema y las críticas a un supuesto "cambio de criterio" con algunos disidentes hacen que los solicitantes corran grave peligro.
Si una persona es devuelta a Rusia tras la denegación de asilo, se enfrenta allí a la pena de muerte o tortura. De ser así, se trataría de una grave violación del principio de no devolución. Contravendría la legislación española de asilo (Ley 12/2009) y los convenios internacionales. Estos protegen explícitamente contra la devolución en situaciones de riesgo para la vida o la integridad física.
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