Pablo Iglesias: Cambio pañales a diario y prefiero estar con mi familia y perros.
El exlíder de Unidas Podemos explicó a El Cierre Digital cómo su paso por el gobierno afectó su vida con Irene Montero.
Pablo Iglesias entra en la sala apresurado. En campaña electoral hay poco tiempo, hay que volar de entrevista en entrevista, de acto en acto, de debate en frustrado debate… El líder de Unidas Podemos proyecta la misma energía de siempre aunque mantiene un tono mucho más contenido y pausado a lo largo de toda la entrevista. Nada que ver con otros tiempos y citas electorales. De hecho, para Pablo Iglesias se ha abierto una nueva etapa. Forzada, eso sí, por la convocatoria electoral de la presidenta de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, en una cita electoral que se ha radicalizado. Tras los malos resultados de Unidas Podemos, Pablo Iglesias decidió abandonar la política activa.
Quién iba a pensar que el vicepresidente Iglesias se bajaría de un tren en marcha y de un confortable y criticado sillón ministerial para probar suerte batiéndose de nuevo cuerpo a cuerpo esta vez en una contienda electoral autonómica… Más aún si se tienen en cuenta las malas expectativas que arrojan las encuestas para Unidas Podemos en Madrid, en cuya Asamblea ocupa siete escaños. “Hay gente que dice que eso no es normal. Bueno, pues yo estoy cumpliendo con mi obligación, yo soy ante todo un militante”, explica el candidato de Unidas Podemos a la Comunidad de Madrid.
- ¿Siente alguna frustración de su paso por el Gobierno de España?
- Ha habido momentos durísimos, por ejemplo, cuando había que declarar el Estado de Alarma. Yo era partidario de haberlo hecho antes, porque había que hacerlo para salvar vidas. Finalmente nos entendimos y lo hicimos en su momento. Eran momentos muy duros y más cuando estás en el Consejo de Ministros.
- ¿Qué se lleva de Pedro Sánchez?
- Hemos tejido una relación de confianza y se mantiene una línea abierta que sirve para solucionar muchas cosas. Somos muy diferentes políticamente, pensamos diferente en cuestiones económicas, sociales, de memoria, pero yo tengo mucho respeto a Sánchez porque logró ser el secretario general de su formación teniendo a toda la estructura de su partido en contra y a prácticamente todos los medios de comunicación en contra. No es el jefe del PSOE porque le hayan puesto ahí, sino porque se lo ganó gracias a la militancia y yo eso lo respeto.
- ¿Estar en el Gobierno no siempre da todo el poder que uno pretende?
- De hecho, nunca. Estar en el Gobierno no es tener el poder. El Gobierno tiene un poder muy pequeñito. El Gobierno está sometido a enormes presiones, de hecho, hasta que nosotros no hemos entrado al Gobierno no se notaban las presiones de los movimientos sociales. Con nosotros dentro, se notaba la presión del Sindicato de Inquilinos o de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca o de los sindicatos, pero un gobierno está sometido a presiones enormes de los poderes económicos y de sus brazos mediáticos que para eso están. Es muy difícil. Eso yo lo sabía como profesor de Ciencia Política, pero cuando lo vives desde dentro es muy difícil. Si algún ministro o presidente dice que a él no le presiona nadie, está mintiendo de la cabeza a los pies.
- ¿En qué beneficia señalar a ciertos periodistas como ha hecho recientemente?
- Es que estamos diciendo la verdad. En qué beneficia a la democracia que prácticamente todo lo que se oye, se lee y se escribe esté en manos de dos grandes duopolios con intereses económicos y políticos propios. En qué beneficia a la democracia que determinadas empresas de comunicación digan que si quieres trabajar aquí tienes que defender esta línea, si no, vete a tu casa. Creo que estamos diciendo algo que alguien tenía que decir. Y es que los periódicos, las radios, las televisiones tienen dueños que hacen valer su dinero y su poder para que esos medios defiendan sus intereses. Esto es simplemente describir la realidad y al mismo tiempo defender a todos esos periodistas que son perseguidos.
- ¿Atribuye usted en el siglo XXI un poder a la TV como tenía en los años ochenta?
- No tiene el mismo poder que en los ochenta. Pero si no fueran tan importantes, los poderes económicos no comprarían medios de comunicación que no son rentables. Hay pocas cosas menos rentables que un periódico, los únicos periódicos que son rentables son los deportivos. Entonces, si un diario es poco rentable, ¿por qué hay grandes empresarios que sí los compran? Lo mismo cabe decir con las televisiones, aunque es verdad que las redes sociales han equilibrado un poco más, como también los diarios digitales.
El candidato de Unidas Podemos a presidir la Comunidad de Madrid, insiste en que “la gente no milita en los partidos, la gente milita en los medios de comunicación”. Considera que es porque “quien tenga las televisiones tiene el 80 por ciento del trabajo hecho. Y ahí partimos de una debilidad evidente. Podemos ser hábiles en la comunicación directa, potentes en las redes sociales, pero en los grandes espacios hegemónicos nos cuesta mucho explicar y que se haga hueco”.
Iglesias asegura que recientemente dijo en un mitin que “de las dos únicas leyes que ha hecho el PP en dos años de Gobierno en Madrid, una ha sido para dar 15 millones de euros al Grupo Planeta, que es el propietario de La Sexta, Antena 3TV, de Onda Cero y de La Razón. ¿Esto no va a influir en las líneas editoriales de estos medios? A lo mejor sí, a lo mejor no, debatámoslo. Pero este corte no salió en ningún medio”.
- ¿Cómo ha vivido estar en una posición de poder en el Gobierno de España?
- El nivel de presión ha sido tal que todos los días había gente rodeando mi vivienda, sin poder salir a dar un paseo a la calle o al monte con mi familia y sin guardaespaldas. No lo he podido disfrutar, entiendo que puede ser algo muy atractivo para quien lo pueda aprovechar. Yo no he podido desgraciadamente hacerlo .
“SI ALGÚN MINISTRO O PRESIDENTE DICE QUE A ÉL NO LE PRESIONA NADIE, ESTÁ MINTIENDO DE LA CABEZA A LOS PIES”
Iglesias asegura que “para mí, la familia es lo más importante. Y yo no puedo salir con mis hijos al parque sin ir con policías, y sin la preocupación de que les estén haciendo fotos. Tuvimos que llevarlos a la Escuela Infantil del Congreso. Para mí, lo primero es mi familia y mis hijos y poder jugar con ellos y vivir cosas que no puedo sentir fuera de casa. Y con mi dinero ganado honradamente me compro lo que considero porque nadie me ha regalado nada y he firmado con mi pareja [Irene Montero] una hipoteca a treinta años. Lo que le molesta a la derecha es que el hijo de una abogada de CCOO de Vallecas tenga más títulos universitarios que prácticamente todos los dirigentes de la derecha sin que se los hayan regalado, y que se pueda comprar una casa con jardín con una hipoteca sin robar y sin que se la haya regalado ningún millonario. No lo soportan porque entienden que lo bueno es sólo para ellos. Hay un enorme clasismo y tenemos que asumir que de nosotros van a decir cualquier cosa”.
- ¿Cuánto tiempo dedica a su familia?
- Mucho más que cualquier político del pasado. Mi antiguo Jefe de Gabinete se desesperaba cuando yo le decía que cuatro horas por la tarde eran para estar con mis hijos, esto era inconcebible para muchos políticos. O que yo pidiera el permiso de paternidad dividido al 50 por ciento con Irene. Quizá soy distinto a los anteriores, pero para mí, mis hijos son lo más importante y no me pienso perder su infancia, lo que están viviendo ahora no se va a repetir nunca, cuando ves que ya empiezan a hablar, a conversar, es demasiado precioso y no voy a renunciar a ello. Ahora, como a toda velocidad y apenas tengo cenas de trabajo. Prefiero estar con mis hijos, mi pareja y mis perros. Cambio pañales todos los días, son tres y se tarda bastante, después de darles el desayuno hay que lavarles las manos, hay que vestirles, tienen una edad en la que discuten, a veces quieren unas cosas u otras… como cualquier padre.
En cuanto a Irene Montero, Iglesias se refiere a ella como “la mujer a la que más admiro y de la que he aprendido una barbaridad. Hay muchas cosas que yo hago bien porque me las ha enseñado a hacer ella. Es una mujer con una enorme capacidad política y de sacrificio y un rechazo visceral y emocional a la injusticia”.
Sobre “la violencia machista”, el candidato de UP recuerda que “lo que se pone en cuestión es la libertad sexual de las mujeres, que no son objetos ni, por supuesto, el objeto del deseo de la mirada masculina, por eso hay la tensión que hay. Se están cuestionando cosas que antes no se cuestionaban. Es una revolución de la sexualidad que nos tiene que enseñar mucho a todos, la mujeres no están aquí para complacer, sino para pasárselo bien también. Yo he aprendido con las compañeras del Ministerio de Igualdad”. Iglesias subraya que “las mujeres lo han tenido todo más difícil siempre, por eso están más preparadas”.
- Si pudiera volver su vista atrás ¿Qué haría diferente?
- Muchas cosas. Intentaría tener un tono más sosegado y tranquilo. Intentaría que nuestra fuerza política hubiera sido siempre capaz de lavar los trapos sucios en casa. Y luego, daría mucha más importancia a algo que me ha enseñado el tiempo, que es la lealtad. Yo siempre he admirado mucho la inteligencia, que es muy importante. Pero en política, yo aconsejaría a cualquiera que asumiera posiciones de responsabilidad que se rodearse ante todo de leales.
"IRENE ES LA MUJER A LA QUE MÁS ADMIRO Y DE LA QUE HE APRENDIDO UNA BARBARIDAD. HAY MUCHAS COSAS QUE YO HAGO BIEN PORQUE ME LAS HA ENSEÑADO A HACER ELLA".
- ¿Hay riesgo de desaparecer para Unidas Podemos en Madrid?
- Había riesgos porque es muy probable que inhabiliten a la que era nuestra candidata, Isabel Serra, han montado un proceso, un montaje, acusándola falsamente de haber insultado a un policía, digo falsamente porque los vídeos del juicio están en internet para que los vea todo el mundo. Nos la podían inhabilitar, claro, en ese contexto había un enorme riesgo para nuestra candidatura. En las elecciones es muy importante tener candidatos que sean conocidos, y también esa fue una de las razones por las que tenía claro que tocaba arremangarme y decir donde más útil soy es aquí. Yo tenía trabajada la transición en Unidas Podemos con Yolanda[Díaz, ministra de Trabajo], pero en política no elige siempre uno los tiempos y tocaba hacer algo que era imprescindible para frenar a la ultraderecha. Porque si Podemos no está fuerte, es imposible que no gobierne el PP con el apoyo Vox. Y detener a la ultraderecha y al fascismo en Madrid era una tarea lo suficientemente importante como para que yo me pusiera ahí. Creo que es ahí donde se puede poner en valor lo que yo represento y mi experiencia como vicepresidente, en una batalla crucial en Madrid, que nos tiene que permitir frenar la entrada en las instituciones de un partido de ultraderecha con una estética y un estilo de hacer política fascista que creo que es inaceptable en las democracias occidentales”.
Iglesias reivindica su formación política como “una realidad, no como una opción, cumplimos cuando estamos en el Gobierno”, y apoya la mayor parte de ese éxito en la labor desarrollada por la vicepresidenta tercera y ministra de trabajo, Yolanda Díaz, “es la que ha gestionado los recursos públicos para salvar a medio millón de empresas españolas, los rojos en el Gobierno han salvado a medio millón de empresas españolas y han protegido tres millones y medio de puestos de trabajo a través de los ERTES. También hemos construido un escudo social que prohibiera los desahucios sin alternativa habitacional e impidiera los cortes de suministro. La primera reglamentación del teletrabajo la ha hecho nuestro Gobierno y ahora es referente en Europa”.
Pablo Iglesias asume que ahora es ya el turno de Yolanda Díaz y que él debe dar un paso al lado, “todo se ha precipitado”, indica. El candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid alaba repetidamente la labor, estilo político y profesionalidad de la ministra de Trabajo. El candidato de UP insiste en que el feminismo es presente y futuro, y puede llevar a cabo grandes transformaciones económicas. “La política ha estado tradicionalmente muy masculinizada. Ellas aportan en los órganos de poder una sensibilidad diferente.
- ¿Qué resultado no sería aceptable para Pablo Iglesias este 4 de mayo?
- Tenemos que ganar, y a partir de que ganemos y que sumemos las tres izquierdas, pues habrá que negociar. Pero ahora tenemos que estar centrados en ganar y no pensar tanto en lo que venga después. Si gobernamos en Madrid, hay que asumir ese reto y son años. No obstante, yo soy profesor universitario y además, el tiempo de mi vida que dediqué al periodismo me entusiasmó. En cuanto toque, lo querré recuperar. No creo en la política como una profesión de carrera que tenga que durar eternamente.
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