Marlaska se protege de sus derrotas: Elimina finalmente al coronel Pérez de los Cobos

El coronel Diego Pérez de los Cobos ha sido una de las figuras más destacadas de la Guardia Civil en los últimos años. También ha sido protagonista de un largo enfrentamiento con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Un enfrentamiento que finalmente ha culminado en su retirada. 

Esta retirada era  esperada, ya que la normativa dicta su paso a la reserva al cumplir 61 años el 13 de diciembre de este año. Sin embargo, está envuelta en un contexto de controversia y tensiones con el Gobierno de Pedro Sánchez, en especial con su ministro de Interior Marlaska.

De esta manera, Diego Pérez de los Cobos se retirará en breve de su cargo como jefe de la Comandancia de Madrid de la Guardia Civil. Posición que ocupó desde abril de 2018. Y aunque aspiraba a ascender a general y continuar en servicio hasta los 65 años, su carrera fue obstaculizada por el Ministerio del Interior.

Pérez de los Cobos ha sido una figura central en varios episodios de relevancia nacional. Incluyendo su papel en la  coordinación de la respuesta policial al referéndum independentista ilegal del 1 de octubre de 2017 en Cataluña. 

Su carrera se ha caracterizado por una  férrea defensa de la legalidad y el orden constitucional. Principios que han guiado su actuación en todo momento, pero que también le han colocado en el centro de diversas tormentas políticas.

El momento clave que marcó el declive de su relación con el gobierno actual fue su cese obligado como jefe de la Comandancia de Madrid de la Guardia Civil en mayo de 2020. Pérez de los Cobos fue relevado tras negarse a proporcionar detalles sobre una investigación judicial relacionada con el entonces delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco.

Todo ello en el contexto de las manifestaciones del 8 de marzo de 2020, justo antes de la declaración de la pandemia por COVID-19. El ministro Marlaska justificó su despido por "pérdida de confianza". Aunque las razones detrás de esta decisión han sido duramente cuestionadas, tanto a nivel político como judicial.

El Tribunal Supremo ha dado la razón en varias ocasiones a Pérez de los Cobos. De hecho, acabó anulando su cese y ordenando su restitución al frente de la Comandancia de Madrid en septiembre de 2023. Una decisión que el Ministerio del Interior ha intentado revertir sin éxito. Pero que finalmente ha conseguido por otra línea, al impedir su ascenso.

Pero este apoyo judicial a su carrera en la Guardia Civil ha sido interpretado por muchos como una reivindicación de la integridad profesional del coronel Pérez de los Cobos. Como también como un golpe a la gestión de Marlaska en el Ministerio del Interior. 

Sin embargo, a pesar de estas victorias legales,  las trabas puestas por el Gobierno han impedido su ascenso a general. Lo que le hubiera permitido prolongar su carrera activa hasta los 65 años.

Una despedida con ‘recado’ a Marlaska

El coronel pronunció su discurso público de despedida el pasado 12 de octubre, durante la celebración del Día del Pilar, patrona de la Guardia Civil. En el día de la patrona de la Benemérita, Pérez de los Cobos fue claro en sus palabras. 

Afirmó marcharse "con la cabeza alta y la conciencia tranquila". Lo que se ha considerado como un recado directo a Marlaska, a quien de verdad responsabiliza de su salida forzada. 

El coronel también subrayó su compromiso con los valores fundamentales de la Guardia Civil. Como el honor, la disciplina y la lealtad, valores que, según él, han guiado su carrera desde el primer día.

Pero este enfrentamiento con Marlaska ha tenido múltiples aristas. Para muchos, el cese de Pérez de los Cobos fue una decisión motivada por razones políticas. Un intento del gobierno de Pedro Sánchez de controlar a un importante mando de la Benemérita que, en su momento, desafió al Ejecutivo al no proporcionar información sensible sobre una investigación judicial. 

El hecho de que el Tribunal Supremo haya fallado a favor de Pérez de los Cobos varias veces solo ha acrecentado la percepción de que su despido fue, en palabras de algunos analistas, una "purga" injustificada de un oficial que ha servido con lealtad y rectitud durante décadas.

Pérez de los Cobos fue cesado por negarse a romper la confidencialidad de una investigación judicial. Un principio básico del derecho y una obligación para cualquier miembro de la policía judicial. 

Esta decisión, aunque legalmente respaldada, fue interpretada por Marlaska como una falta de lealtad hacia su equipo. Lo que desencadenó una serie de enfrentamientos que culminaron en su destitución. 

Con su ya salida del Cuerpo, Pérez de los Cobos deja atrás una carrera marcada por el servicio a la nación. Pero también por una lucha continua para mantener su reputación intacta frente a lo que él considera una campaña política en su contra. 

También en su último discurso dirigido a sus subordinados agradeció el apoyo recibido y expresó su pesar por tener que marcharse por "causas ajenas a su voluntad". Su legado, sin embargo, parece estar asegurado, al menos en la memoria de quienes valoran su compromiso con la legalidad y el orden constitucional.

Su retiro marca el fin de una etapa. Pero también deja abierta una pregunta sobre el futuro de la Guardia Civil bajo el mando de una administración que ha sido criticada por su manejo parcial de las Fuerzas de Seguridad. 

Pérez de los Cobos se retira con "la conciencia tranquila". Pero la sombra de su 'eliminación' por Marlaska y las tensiones internas dentro del Ministerio del Interior seguirán siendo, sin duda, temas de debate en los próximos meses.