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Un hombre mayor sentado en una mesa con copas y platos, usando un chaleco negro y una camisa blanca, con una persona de pie detrás de él sosteniendo una botella azul.
INVESTIGACIÓN

Los secretos políticos que guarda el rey Emérito y que podría sacar

Fuentes consultadas por el cierredigital.com, aseguran que al monarca la preocupa la situación política del país.

Este pasado fin de semana la casa real española ha sido objetivo de los medios de comunicación nacionales e internacionales. La nueva visita del  rey Juan Carlos I, quien regresó al municipio gallego de Sanxenxo para participar en la competición de vela que lleva su nombre "Regata Rey Juan Carlos I". Este evento deportivo que ha tenido lugar los días 29 y 30 de septiembre así como el 1 de octubre, ha vuelto a generar cierto revuelo mediático pese a las recomendaciones de mantener un perfil bajo frente a los medios de comunicación.

El rey Emérito se ha dejado ver por las mediaciones del Real Club Náutico del municipio gallego con asiduidad e, incluso, ha disfrutado de salidas nocturnas al restaurante 'La Taberna del Puerto', uno de sus favoritos en la localidad pontevedresa. 

Durante su estancia en Sanxenxo, Juan Carlos I ha recibido visitas muy sonadas, como la de su primogénita, la  infanta Elena; o la de su hermana, la infanta Margarita de Borbón; así como su sobrina Maria Zurita y su hijo, el pequeño Carlos, quien además es su ahijado. Pero mientras la infanta Elena viajaba a suelo gallego, su segunda hija, la  infanta Cristina se daba un auténtico 'baño de masas' este pasado sábado en un evento social de la jet set.

Lo hacía como una de las invitadas a la boda de Javier Prado, hijo de Borja Prado,  quien actualmente ostenta el cargo de presidente de Mediaset España. Y  a su vez hijo de Manuel Prado de Colón y Carvajal,  el que fuera administrador privado de Juan Carlos I de Borbón durante gran parte de su reinado.

Dos hombres de traje posando juntos en un evento formal.
Felipe VI y don Juan Carlos I. | El Cierre Digital

Pero además de la presencia de algunos de sus allegados, la cuarta visita del rey Emérito a España ha estado marcada por una posible reunión con su hijo Felipe VI, que se encontraba este pasado 25 de septiembre en la localidad pontevedresa de O Grove con motivo de la inauguración del ‘Foro La Toja'. Este foro se celebra desde hace cinco años en el Centro de Convenciones Eurostars Gran Hotel La Toja. La localidad se encuentra a tan solo 15 kilómetros del municipio de Sanxenxo.

No obstante, y aunque el exmonarca declaró ante los medios que “seguramente” se encontraría con su hijo en esta visita, finalmente no tuvo lugar el encuentro. Al menos, no se ha sabido públicamente. Como informó el periodista y director de elcierredigital.comJuan Luis Galiacho en el programa ‘Cuatro Al Día’, “el rey Felipe VI regresó inmediatemente a Madrid después del acto de La Toja.

Mientras Juan Carlos I salía ese día sobre las 17:00 del Club Náutico de una comida familiar, su hijo Felipe VI regresa a la capital de España minutos después,  "lo que por horas es imposible que ese encuentro se haya producido, aunque si han mantenido contacto telefónico”,  según afirman fuentes solventes.

Como informaba elcierredigital.com la pasada semana, el rey Emérito ha aumentado su presencia en España, una decisión que, según personas cercanas a su entorno, se ha visto motivada por "su preocupación y descontento con la situación política actual en España". 

Los secretos políticos del Emérito 

Según afirman fuentes monárquicas a elcierredigital.com, esta última 'visita privada' del Emérito tiene además de las regatas otro concepto. “Está muy molesto por la situación política de España y el tema del independentismo y quería hablar con su hijo, Felipe VI. Quiere volver a España para salvar la unidad de la Constitución española, porque cree que la monarquía y España y también la Constitución están en peligro”.

Será, precisamente, este lunes 2 de octubre cuando el rey Felipe VI inicie una nueva ronda de consultas con el fin de designar candidato a la investidura después de que el líder de los populares, Alberto Núñez Feijoó, no lograra los votos suficientes. En su defecto, es el líder socialista, Pedro Sánchez, quien se postula como favorito. No obstante, el soberano español no podrá sondear a los aliados parlamentarios nacionalistas del presidente del Gobierno en funciones si estos se niegan, de nuevo, a acudir a las reuniones a celebrar en el Palacio de la Zarzuela.

Un hecho que ya ha provocado el descontento del Emérito. Según han revelado fuentes constitucionalistas a elcierredigital.com, "Juan Carlos I de Borbón podría lanzar una batería de bombas si se produce un intento de apartar a la monarquía española y liquidarla. Es capaz de todo y su único deseo es que su nieta, la princesa Leonor, sea reina de España. Él no quiere que se vuelva a repetir el caso de su padre, don Juan de Borbón".

No hay duda, para ningún experto, que desde hace décadas don Juan Carlos I conoce a la perfección en entramado de las distintas formaciones políticas así como su financiación y, como consecuencia, los secretos internos que se han escondido a lo largo de la historia. "Es evidente que conoce a la perfección cómo se forjó el Partido Socialista Obrero Español durante la Transición, las entrañas de PNV o la financiación de la extinguida formación Convergència i Unió, hoy reconvertido en Junts per Catalunya. El rey Emérito ha estado con ellos en muchos y sonados casos y conoce su estructura a la perfección. No hay duda alguna que mejor que nadie", sostienen a elcierredigital.com estas mismas fuentes. 

La jura de la princesa Leonor

Será a finales de este mes de octubre cuando el rey Emérito volverá a protagonizar la que será su quinta visita a España. Lo hará el próximo 31 de octubre para asistir a la jura de la Constitución, ante las Cortes Generales, de la princesa Leonor, que ese día cumple la mayoría de edad. Pese a que el Emérito no asistirá a los actos de carácter constitucional que tendrán lugar en el Congreso y en el Senado, sí que estará presente en la celebración de carácter familiar que se realizará posteriormente a la jura de la Carta Magna de la heredera al trono español.

Ceremonia militar con soldados en uniforme beige y boinas rojas, uno de ellos entrega una espada a otro mientras más soldados están formados en el fondo.
La princesa Leonor recibe el sable en el patio de Armas de la Academia de Zaragoza. | El Cierre Digital

Para este evento, la princesa Leonor saldrá excepcionalmente de la Academia militar de Zaragoza, donde ha comenzado su formación militar. Una formación que no ha estado exenta de polémica puesto que, según revelaron fuentes del Ejército de Tierra a elcierredigtial.com, en la Academia habían acondicionado "una zona exclusivamente para ella". Un hecho que no se dio durante la carrera militar de su padre ni de su abuelo y que, tal y como han recalcado estas mismas fuentes, "no sentó muy bien". 

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