Lo que esconde el registro de marcas y empresas de Begoña Gómez: Su listado

La reciente imputación de Begoña Gómez, mujer del presidente del Gobierno Pedro Sánchez, ha suscitado un intenso debate en torno a las actividades empresariales y académicas que ha desarrollado en los últimos años. 

Las acusaciones se centran en la presunta apropiación indebida de un software desarrollado en el marco de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y en posibles delitos de intrusismo profesional. 

Uno de los aspectos más controvertidos es el registro, por parte de Gómez, de las marcas "Transforma" y "TSC (Transformación Social Competitiva)". El registro de estas marcas se realizó años antes antes de la creación de una sociedad con el mismo nombre. 

En marzo de 2020, Begoña Gómez registró a su nombre la marca "TSC-Transformación Social Competitiva" en la Oficina Española de Patentes y Marcas (OEPM). 

Este registro se realizó ocho meses antes de la presentación oficial de la Cátedra Extraordinaria de Transformación Social Competitiva en la UCM. Cátedra de la cual Gómez fue nombrada directora. 

La cátedra tenía como objetivo integrar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) en las estrategias empresariales. Promoviendo una transformación social y medioambiental en el tejido empresarial español.

La creación de esta cátedra contó con el apoyo de diversas instituciones y empresas, entre ellas Telefónica, Indra y Google. Estas colaboraron en el desarrollo de un software destinado a medir el impacto social y medioambiental de las pequeñas y medianas empresas (pymes). 

Estas empresas aportaron recursos y conocimientos para la creación de la plataforma, con un coste estimado de al menos 150.000 euros. 

Los polémicos registros de marcas y empresas de Begoña Gómez

El 10 de octubre de 2022, Gómez registró una segunda marca a su nombre: "TSC Transforma Plataforma de Medición de Impacto Social y Medioambiental". Incluyendo el dominio web www.transformatsc.org. 

Este registro se realizó pocos días después de que la UCM le solicitara que cediera los derechos de la plataforma. Todo para que la titularidad fuera "100% UCM". Sin embargo, no consta que Gómez haya realizado dicha cesión. 

Posteriormente, el 21 de noviembre de 2023, Begoña Gómez constituyó la sociedad Transforma TSC SL. De la cual es administradora única y posee el 100% del capital social, establecido en 3.000 euros. 

El objeto social de la empresa es "impulsar y promover la estrategia de Transformación Social Competitiva integrando los objetivos de desarrollo sostenible". Esta descripción coincide plenamente con las actividades desarrolladas en la cátedra de la UCM que dirigía Gómez. 

“Curiosamente, el aviso legal de la página web de Transformación Social Competitiva, donde se promovían los objetivos y servicios de la plataforma, está registrado a nombre de la Universidad Complutense de Madrid (UCM)”, sostienen fuentes expertas. “Esto indica que el dominio de transformacionsocialcompetitiva.com sí pertenecía a la UCM”.

Este detalle llama la atención, ya que “toda la estructura empresarial, incluyendo la titularidad de las marcas "Transforma" y "TSC-Transformación Social Competitiva", así como el otro dominio web asociado, se encontraba bajo el control personal de Begoña Gómez”.

Este hecho plantea interrogantes sobre la relación entre la cátedra universitaria y la empresa privada creada posteriormente. “Es un hecho que podría evidenciar un solapamiento de intereses entre lo público y lo privado”, sostienen fuentes expertas.

Este detalle pone en el foco la gestión del proyecto y la posible utilización de recursos y derechos institucionales de la UCM para fines personales.

Controversias y acusaciones

La coincidencia en las denominaciones y objetivos entre las marcas registradas por Gómez, la cátedra de la UCM y la sociedad Transforma TSC SL ha generado sospechas sobre un posible conflicto de intereses y una apropiación indebida de recursos públicos para beneficio privado. 

Las acusaciones señalan que Gómez podría haber utilizado su posición en la UCM para desarrollar una plataforma que posteriormente registró a su nombre y explotó a través de su empresa.

Además, se le imputa un posible delito de intrusismo profesional. Ya que habría redactado y firmado pliegos técnicos para la contratación de servicios relacionados con el desarrollo del software. Todo sin poseer la cualificación necesaria para ello. 

Estos pliegos dieron lugar a la adjudicación de un contrato de 60.500 euros a la consultora Deloitte para finalizar la plataforma. Después de que las empresas inicialmente involucradas desistieran del proyecto. 

Defensa de Begoña Gómez

Ante estas acusaciones, Begoña Gómez ha negado cualquier intento de apropiación indebida de las marcas o del software desarrollado en el marco de la UCM.

Ha declarado que el registro de las marcas y del dominio web se realizó con el objetivo de proteger el proyecto en desarrollo. También señaló que todas sus actuaciones se llevaron a cabo siguiendo las indicaciones de la universidad. Asimismo, aportó correos electrónicos y documentación para respaldar su versión de los hechos. 

En relación con el intrusismo profesional, Gómez ha manifestado que su participación en los pliegos técnicos se realizó bajo la supervisión de profesionales cualificados. También que su rol se limitó a coordinar y facilitar el desarrollo del proyecto en su calidad de directora de la cátedra.

Investigación judicial y situación actual

El juez Juan Carlos Peinado, encargado de la investigación, ha imputado a Begoña Gómez por los delitos de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, apropiación indebida e intrusismo profesional. 

En sus comparecencias ante el juzgado, Gómez ha respondido únicamente a las preguntas de su abogado. Negando todas las acusaciones y defendiendo la legalidad de sus actuaciones. 

La UCM, por su parte, ha llevado a cabo una auditoría interna para esclarecer los hechos y determinar si ha habido un perjuicio para la institución. Sin embargo, la falta de colaboración de algunos implicados y la complejidad del caso han dificultado la obtención de conclusiones definitivas. 

Mientras tanto, la cátedra de Transformación Social Competitiva y los másteres asociados han sido cancelados. Alegando falta de alumnos y fallos administrativos.