
El imperio inmobiliario de Sandra Ortega: Resorts de lujo y una sede de Telefónica
La segunda accionisa de Inditex cierra su mayor compra del año en Alemania tras ajustes en su grupo inmobiliario Ferrado
Sandra Ortega ha protagonizado uno de los movimientos inmobiliarios más relevantes de este 2025 con la adquisición de dos activos prime en Alemania por 150 millones de euros. La operación, realizada a través de su sociedad Ferrado, supone su desembarco en el mercado germano. También marca un cambio de ritmo tras un periodo marcado por ajustes contables y pérdidas en su grupo patrimonial.
En Hamburgo, Ortega se ha hecho con el Tichelhaus, un edificio histórico y recientemente renovado. El inmueble, que combina oficinas y apartamentos, alberga desde 2024 la sede corporativa de Telefónica Alemania, bajo la marca O2.
La adquisición se ha cerrado por 77 millones de euros, en una operación fuera del mercado que refuerza su modelo de inversión. Preferiblemente, Ferrado se decanta por activos urbanos bien ubicados y contratos de arrendamiento estables.

El segundo activo adquirido se encuentra en Múnich, en una de las principales arterias del distrito de Schwabing. Se trata del edificio Novella 7, con una superficie de 4.000 metros cuadrados. El edificio está alquilado casi en su totalidad al prestigioso bufete internacional Allen & Overy.
La operación, también gestionada de forma discreta, se ha valorado en torno a los 73 millones de euros. En ambos casos, la transacción ha contado con la intermediación de Conren Land, gestora inmobiliaria alemana participada por Ortega.
De las pérdidas contables a la consolidación de activos
Las compras en Alemania llegan después de varios ejercicios en los que Ferrado, su vehículo de inversión inmobiliaria, ha tenido que hacer frente a un entorno macroeconómico desfavorable.
En 2023, la sociedad registró unas pérdidas netas de 43,3 millones de euros, provocadas en gran parte por un deterioro contable de 52,4 millones asociado a la subida de los tipos de interés y a la depreciación de activos internacionales.
No era el primer revés: durante la pandemia, Ferrado también cerró ejercicios en negativo. Afectada principalmente por la exposición a sectores como el hotelero en Estados Unidos.
A pesar de estos tropiezos, el grupo nunca perdió capacidad de inversión. La clave ha sido su sólida posición de tesorería, alimentada principalmente por los dividendos que Ortega recibe de Inditex.

Su participación del 5,053 % en la compañía le reportó 178,8 millones de euros en 2023. De los cuales buena parte se destinaron a nuevas adquisiciones. Esta fórmula, sin apalancamiento ni dependencia de financiación externa, ha permitido a Ferrado moverse con libertad.
El paso por Alemania supone, además, un salto cualitativo en la diversificación geográfica de su cartera. Recordemos que ya incluía activos en España, Francia, Reino Unido, Austria, Estados Unidos y Portugal.
En junio del año pasado, Ortega adquirió un resort de lujo en territorio luso por unos 250 millones de euros, lo que reafirma su interés por el sector turístico de alta gama en Europa. En paralelo, desinvirtió en Estados Unidos, vendiendo un hotel en Miami por 55 millones.
Room Mate: una batalla judicial de fondo
Más allá de sus inversiones, 2025 está siendo también un año judicialmente agitado para Ortega. En marzo,logró una victoria importante frente a EBN Banco, que le reclamaba 1,5 millones de euros en concepto de garantías otorgadas a Room Mate, la cadena hotelera participada al 30 % por Rosp Corunna.
La entidad alegaba que Ortega había suscrito varias “comfort letters” durante la crisis del COVID-19 para avalar a la empresa. Pero el juzgado número 46 de Madrid desestimó la demanda, considerando probado que dichas cartas no fueron firmadas por ella ni contaban con su autorización.

El fallo supone un precedente favorable en un caso más amplio, en el que la banca reclama cerca de 150 millones de euros por este tipo de documentos. Aunque EBN ha anunciado su intención de recurrir, la sentencia refuerza la posición de Ortega.
Un año de relevo generacional
Otro de los movimientos clave del año ha sido la reorganización de Rosp Corunna. Ha pasado de ser gestionada bajo una figura de administración única a un consejo formal.
En febrero, Ortega incorporó a sus tres hijos -Martín, Antía y Uxía- al máximo órgano de gobierno de la sociedad. También a su consejero delegado, José Antonio Fresnedo, figura clave en el día a día del grupo.
El nuevo consejo permitirá una gestión más distribuida, manteniendo el control familiar y abriendo espacio para futuras decisiones estratégicas compartidas.
Una agenda 2025 marcada por la consolidación
El 2025 de Sandra Ortega está siendo un año de consolidación y de cierta reparación. Tras un trienio marcado por el impacto de la pandemia, las tensiones en los mercados inmobiliarios internacionales y varios frentes judiciales abiertos, el grupo parece haber entrado en una fase más estable.

Las operaciones en Alemania han elevado el perfil internacional de su cartera y le han permitido reposicionar a Ferrado como un actor con ambición europea. Al mismo tiempo, el fallo favorable en el caso Room Mate ha supuesto un alivio jurídico y reputacional, mientras que la reorganización de Rosp Corunna apunta a una estructura de mayor continuidad.
A diferencia de su padre, cuya figura ha sido omnipresente en la prensa económica, Sandra Ortega mantiene un perfil extremadamente reservado. No participa en eventos públicos ni concede entrevistas, y sus movimientos solo trascienden cuando ya están firmados. Su estilo es silencioso, pero no pasivo. La compra de la sede de Telefónica en Alemania, una de las joyas inmobiliarias del país, lo demuestra.
Más noticias: