Hallan el cadáver del desaparecido Rafael Ruiz Martos en su caravana en Sanlúcar

Hace casi un mes desaparecía Rafael Ruiz Martos en el Puerto de Santa María en Cádiz mientras hacía una ruta en caravana. Familiares y amigos destacaban la rareza de que Rafa –un barcelonés de 53 años– no contactase con ellos, ya que cada día hablaba con Sofía, su pareja, y semanalmente se llamaba con sus amigos y familiares. Además, su círculo cercano había descartado por completo la posibilidad de una desaparición voluntaria. En la madrugada del 13 de febrero la Policía Nacional halló el cadáver en un avanzado estado de descomposición dentro de la caravana de Rafa.

Sobre las 14:30 de la tarde del 12 de febrero una de las personas que está en el grupo de SOSDesaparecidos Andalucía fue a pasear por una zona cercana a las bodegas Barbadillo, en Sanlúcar de Barrameda, donde a veces aparcan caravanas aunque no es un aparcamiento oficial. Casualmente, paseando por allí el joven descubrió la matrícula de la caravana de Rafa y lo publicó en sus redes sociales. 

La policía "no quiso" forzar la cerradura de su caravana"

Elcierredigital.com ha contactado en exclusiva con Manuel Ortiz, amigo íntimo y portavoz para los medios de comunicación, que explica que “tras localizar el mensaje nos movilizamos, aunque desde SOSDesaparecidos ya habían llamado a la policía local de Sanlúcar de Barrameda y nosotros también tratamos de solicitar a la policía que abrieran la caravana”.

“Tanto la policía como la jueza de guardia no han estado a la altura de las circunstancias porque sabiendo que constaba una denuncia por desaparición, que llevaba un mes desaparecido y que habíamos localizado la caravana, el sentido común debería haber indicado la necesidad de haber roto la puerta y haber entrado en la caravana. La realidad fue que no lo hicieron, algo incomprensible para nosotros. La Guardia Civil y la Policía Nacional se marcharon de la zona sin abrir la caravana”, indica Manuel.

Manuel explica que no forzar la cerradura de la caravana fue algo sorprendente para sus amigos y familiares, por lo que “automáticamente su hermano decidió coger el coche a las 19:30 de la tarde y puso rumbo a Cádiz. Llegó a las 4:30 de la madrugada y recibió una llamada de la Policía Nacional. La caravana tenía puesto el protector del parabrisas y casualmente sobre las 1:00 de la madrugada el protector se cayó, pasó la Policía y enfocaron con una linterna desde fuera. En ese momento vieron que había un cuerpo tirado en la caravana y decidieron romper la puerta. Una vez dentro vieron que había un cadáver en avanzado estado de descomposición y procedieron a su levantamiento”, indica.

El amigo íntimo de Rafa aclara que “el cadáver se lo han llevado al Instituto Anatómico Forense de Cádiz para realizar la autopsia y conocer las circunstancias, con la intención de conocer si es una muerte natural o no. Es duro saber que está muerto, pero el miedo que teníamos todos era que no lo encontrásemos. Al menos ya hemos encontrado a Rafa y podremos hacer el duelo correspondiente. Si no lo hubiésemos encontrado hubiese sido un drama, ahora ya sabemos que está ahí”. 

“El último sitio donde nosotros tenemos contacto con Rafa es justo en Sanlúcar de Barrameda y el parking está muy cerca de las bodegas que había visitado. Todo apunta a que fue una muerte natural, pero hay cosas que nos descuadran. Parece ser que el pasado jueves esa caravana fue fotografiada por un radar de tramo en la provincia de León. No sabemos si es un error de radar, porque entendemos que sí fue un error de lectura, pero es bastante difícil que ocurra un error así. Esperamos que fuera una muerte natural. Queremos dar las gracias a SOSDesaparecidos porque han hecho un trabajo espectacular. También queremos agradecer al presidente, Joaquín Amills, su gran gestión, trabajo y amabilidad”, concluye Manuel Ortiz.

Rafael envió una foto a un amigo desde Sanlúcar de Barrameda

Rafael Ruiz Martos, de 53 años, desapareció el 14 de enero de 2023 en el Puerto de Santa María en Cádiz. Desde el año 2010 decidió dar un cambio vital y se compró una caravana para viajar por diferentes sitios, estuvo en Italia y Francia y escribió un libro sobre caravanas, catedrales e iglesias. Según sus amigos y familiares, Rafael es ”una persona bastante formada, culta y con inquietudes históricas”.

A partir de 2014 se establece en una localidad de la provincia de Madrid, en Mejorada del Campo, donde convive con Sofía, su pareja. Rafael trabajaba en Madrid capital y de vez en cuando se iba unos días con la caravana, aunque no tanto como lo hacía antes de establecerse en Madrid. 

Manuel Ortiz contaba a este medio que “en las navidades de este año pasamos las vacaciones juntos, Rafael viene a ver a su familia a Barcelona, concretamente a Hospital de Llobregat que es donde nació y donde hicimos amistad la mayoría de amigos. Tras las navidades, estableció con su pareja que al no tener trabajo se iba a pasar unos días a Andalucía con la caravana. Decide irse él solo a Cádiz bajo el código de pareja de llamar, enviar mensajes, decirle dónde se encontraba y dónde dormía cada día a Sofía". 

El día 14 por la mañana Rafa se intercambió mensajes de WhatsApp con Sofía y le contó que tenía intención de coger un transporte para ir por mar del Puerto de Santa María a Cádiz. De hecho esa misma mañana a otro amigo suyo le envió una foto desde las bodegas Barbadillo, en Sanlúcar de Barrameda. Posteriormente contactó con Sofía a las 13:00 del día 14 y desde entonces no hubo más comunicación.