Esperanza Aguirre en el juicio del 'caso Espías'
Sobre su consejero Alfredo Prada, uno de los supuestos espiados, ha afirmado que era “el aguirrista más aguirrista”
La sexta jornada del juicio por el caso de los espías en la Comunidad de Madrid ha dejado una sesión accidentada. La que se presumía como una vista sencilla en la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Madrid, con las declaraciones en calidad de testigos de Esperanza Aguirre e Ignacio González entre otros, no ha dejado a nadie indiferente.
Aguirre ha llegado a esta sede judicial a las 8:40 horas para evitar a la prensa. El edificio abría sus puertas a las 9:00 por lo que ha estado esperando en la puerta de la Audiencia madrileña consultando su Ipad hasta su apertura. Al concluir la testifical, ha asegurado que venía al juicio a decir "la verdad". El primer imprevisto ha sido la ausencia inesperada de Ignacio González por un error de citación, ante la cual Esperanza Aguirre ha tenido que ser la primera en hablar. La que fuera presidenta de la Comunidad de Madrid hasta el año 2012 declaraba este lunes por la malversación derivada de un presunto espionaje a políticos del PP de Madrid en 2008. A las cuestiones planteadas por los magistrados de la acusación y de la defensa, ha negado conocer que funcionarios del Gobierno regional espiaran a miembros de su partido.
También ha declarado que “a una presidenta no se le impone nada” al ser preguntada por si alguien le impuso a Sergio Gamón y Miguel Castaño en los puestos de la dirección de la Secretaría de Seguridad de la Comunidad de Madrid.
José Oreja, uno de los guardias civiles acusados, aseguró la semana pasada en el juicio que desde la dirección de Seguridad de la Comunidad de Madrid les dieron ‘órdenes ilegales’ de seguimiento a políticos como Cristina Cifuentes, Manuel Cobo y Alfredo Prada por ‘especial interés’ de Ignacio González, la mano derecha de Aguirre por aquel entonces.
Ante estas afirmaciones, Aguirre ha asegurado que no tiene constancia de estas supuestas actividades, así como que los acusados en el caso se beneficiaran de medios públicos para realizar estas tareas ajenas a los trabajos de seguridad para las que fueron contratados.
En alusión a Prada, quien fuera su consejero y uno de los presuntos espiados, Aguirre ha asegurado que "en esa época Prada era el aguirrista más aguirrista de los aguirristas". De esta manera, la exlíder popular siempre ha defendido que no tuvo conocimiento de estos hechos. A la pregunta de uno de los abogados "¿A usted, este compañero aguirrista, le manifestó su queja?, la ex presidenta de la CAM ha respondido que “en absoluto" y ha añadido que ¨Manuel Cobo, exvicealcalde de Madrid, tampoco¨.
Tras la declaración de Aguirre, la presidenta del tribunal, María Paz Redondo Gil, ha mandado a declarar a Mar Pérez Merino, secretaria General Técnica de la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior y que también fue a la comisión de investigación realizada en la Asamblea de Madrid. Merino ha declarado que todas las cuentas eran correctas y “no encontró nada raro que hubiera que investigar¨, así co,mo que lo reflejado en ellas tenía que ver con el “gasto corriente”.
Ignacio González evita verse con Aguirre
Ignacio González no se ha reencontrado en los pasillos de la Audiencia con su antecesora en el cargo, Esperanza Aguirre, como estaba previsto y la razón ha sido un error en la citación. Al pasar el tiempo y no aparecer para testificar en la vista oral, el también expresidente de la Comunidad de Madrid, la magistrada llegó incluso a decir que si no aparecía mandarían a la Policía a buscarle a su casa.
González estaba citado a primera hora y después de que la magistrada ordenara declarar al resto de testigos, dio unos minutos para que apareciera y manifestó que, si finalmente no aparecía, se oficiaría a la Policía para que González acudiera a la próxima sesión.
El problema de su ausencia fue un “trasvase de datos” en la Secretaría Judicial que produjo una doble citación con dos fechas distintas para que González acudiera a declarar. La que le llegó a Ignacio González y a su abogado recogía la declaración del expresidente para el día 12 de este mes a las 10:30 horas, pero en una citación previa estaba citado para el lunes 11 a la misma hora. Este hecho ha sido utilizado por González para no coincidir en los pasillos de los juzgados con su ex compañera y ex amiga Esperanza Agurire.
La polémica terminó cuando el letrado del exdirigente del PP comunicó a la Sala que la citación de su cliente era para este lunes, pero que se había cambiado el pasado 7 de enero por la del martes.
La declaración del a su vez ex presidente de la CAM también había levantado expectación. Ya en la comisión de investigación en la Asamblea de Madrid, González afirmó que las presuntas vigilancias a rivales políticos de su mismo partido eran "absolutamente falsas", retando al exvicealcalde de Madrid Manuel Cobo a presentar pruebas contra él.
Pero este no ha sido el único incidente. Este lunes también estaba llamada a testificar Yolanda Laviana, exmujer del director de Seguridad Sergio Gamón, que lo iba a hacer por videoconferencia. Al realizar la videollamada desde la Sala, el Tribunal se dio cuenta de que la citación la habían mandado a otra persona que respondía al mismo nombre. Tras el error, las partes han renunciado al testimonio de Laviana.
Está previsto que finalmente Ignacio González acuda a declarar como testigo en este juicio sobre espionaje este martes, 12 de febrero.
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