El divorcio de Cristina e Iñaki está casi firmado; Urdangarin ya cobró la mitad
El Emérito considera aumentar sus visitas a España hasta 183 días al año.
Irene Urdangarin cumplía el pasado 5 de junio 18 años y con su mayoría de edad abría la veda para que sus padres, la infanta Cristina de Borbón e Iñaki Urdangarin, pudieran firmar el divorcio sin tener que acudir al juzgado. Han pasado más de tres meses desde entonces y en todo este tiempo el rey Emérito, encargado de sufragar las cantidades que percibirá Urdangarin tras la separación, ha hecho las debidas gestiones para que el divorcio se firme cuanto antes.
Tal y como informó este jueves el director de elcierredigital.com, Juan Luis Galiacho, en el programa Cuatro al Día, “el divorcio está ya a punto de firmarse”. “Se han logrado finalizar todos los flecos que hay y en los próximos días se firmará el divorcio, aunque no sabremos la fecha exacta porque se va a firmar fuera de España, en Suiza. El dinero no va a ser dinero español ni va a entrar en España, así que no vamos a enterarnos”, informaba el periodista.
Pablo Urdangarin, clave para el cese de las hostilidades
El divorcio podrá tener lugar, según ha podido conocer elcierredigital.com, porque “ya se ha sedimentado el acuerdo” entre Cristina e Iñaki. Las fuentes consultadas por este diario sostienen que Urdangarin “ya ha cobrado aproximadamente la mitad de la cantidad que le corresponde como parte del inventariado que suele hacerse en las separaciones matrimoniales”. La cantidad, como ya informamos desde elcierredigital.com, ascendería a 2.000.000 de euros, de los que habría cobrado aproximadamente 1.000.000. A esto se le sumarían 25.000 euros mensuales que Urdangarin percibirá tras el divorcio. Una cantidad sufragada por el Emérito que aún está por ver cuánto tiempo se mantendrá en el futuro. Cabe recordar que, desde junio “Urdangarin ha cobrado 6.000 euros mensuales que cuando se formalice el divorcio aumentarán”.
Además del propio padre de Cristina, nuestras fuentes cuentan que para cerrar el acuerdo ha sido fundamental la intervención del hijo de Cristina e Iñaki, Pablo, que “ha servido de intermediario para que se cierren las hostilidades entre ambos”. Según las citadas fuentes, “Pablo habría intentado que sus padres volviesen a estar juntos, pero no pudo. Lo que ha conseguido en su lugar es que se acerquen más y que Ainhoa Armentia quede en un segundo plano y no aparezca cerca de los Borbones”.
EXCLUSIVA. Cristina e Iñaki Urdangarin, el inesperado beso de la paz: las imágenes de su cariñoso reencuentro con sus hijos (Contenido para registrados y suscriptores) https://t.co/kOPxCN7qmtpic.twitter.com/3f4LfzIe4B
— Revista ¡HOLA! (@hola) September 6, 2023
Prueba de los esfuerzos de Pablo por unir a sus padres está en que, después de la reunión clave de los Borbones el Suiza por la graduación de la pequeña Irene Urdangarin, la revista ¡Hola! daba a conocer unas instantáneas este mismo mes de septiembre en la que se veía a Cristina e Iñaki sellando “la paz” con un beso en la mejilla durante un reencuentro con sus hijos.
El rey Emérito, clave en el divorcio de Cristina e Iñaki
Además de Pablo, una figura clave para que el pacto y el divorcio tengan lugar es la de Juan Carlos I. El rey Emérito no solo financiará las cantidades que recibirá Urdangarin, sino que ha sido el encargado de hacer que Urdangarin empiece a ingresar este dinero. “El Emérito se ha cansado de la situación y ha intentado agilizar el proceso”, comentan nuestras fuentes.
De hecho, el pacto ya se cerró, según nuestras fuentes y tal y como informamos en elcierredigital.com, en la visita de abril del Emérito en Vitoria. Además de hacerse un chequeo médico en la capital vasca, al Emérito se le vio “con mediadores y abogados de Iñaki Urdangarin para ultimar los detalles económicos del divorcio”, concretamente, habría mantenido reuniones con “representantes de un conocido despacho de abogados de España, vinculado en ocasiones a la Casa Real, que sería el encargado de llevar los intereses de Urdangarin en el pleito del divorcio con Cristina de Borbón".
Juan Carlos I “quiere volver a España más asiduamente”
Tras varias visitas a España de las que informamos en elcierredigital.com, el Emérito se encuentra estos días en Reino Unido, concretamente en la isla de Wight, donde ha acudido, como suele ser costumbre en el exmonarca, para competir en las regatas de la Clase 6 Metros con su barco, ‘el Bribón’, que este jueves se ha alzado con su tercer título Mundial.
El Emérito había llegado esta misma semana a Cowes —donde se realiza la competición— afirmando que si ha ido hasta allí “es para ganar”. Y sucedió, aunque no pudo subirse a bordo debido a las complicadas condiciones meteorológicas. Sí que pudo posar junto a la tripulación —entre la que se encuentra su amigo Pedro Campos como jefe de equipo— tras obtener la victoria.
Antes de su visita a Reino Unido, el Emérito había acudido en tres ocasiones a España, todas ellas para participar en las regatas. La última de ellas tuvo lugar a finales de julio, tras las elecciones generales del 23 de julio y se alargó hasta mediados de agosto cuando, tal y como informamos desde elcierredigital.com, fue de “visita privada a casa de su amigo Pedro Campos”.
"Él tenía claro que si se quedaba en España iba a ser en Galicia y en este caso, es en Sanxenxo donde ha querido alargar su estancia en el país. Además, en la casa de su amigo Pedro Campos ya le han construido un departamento exclusivamente para él donde tiene incluso despacho", revelaban fuentes cercanas al entorno del rey Emérito a elcierredigital.com.
Según ha podido conocer elcierredigital.com, esta última “visita privada” tuvo lugar porque el Emérito “está muy molesto por la situación política de España y el tema del independentismo y quería hablar con su hijo, Felipe VI. Quiere volver a España para salvar la unidad de la Constitución española, porque cree que la monarquía, España y la constitución están en peligro”.
Debido a esto, nuestras fuentes también informan que “quiere incrementar sus visitas a España con más periodicidad y más duración. Ya se lo ha dicho a su gente en Reino Unido, que enseguida vuelve a España”.
Aunque su intención es pasar más tiempo en España, como ya informamos desde elcierredigital.com, al tener su residencia fiscal en Abu Dabi —la cual no tiene intención de trasladar a España—, tan solo podrá pasar un máximo de 183 días en el país en el que reinó, tal y como estipula la legislación española.
Estos 183 días vienen marcados por el artículo 9 de la Ley 35/2006 del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, que establece que una persona que pase más de 183 días al año en España se considera que tiene residencia fiscal en este territorio. Por lo tanto, el rey Emérito tendría que pasar menos de 183 días para seguir manteniendo la residencia fiscal en Abu Dabi. Estos días no son continuos, sino que se suman todos los periodos en los que haya visitado el país en cuestión.
Más noticias: