Así sobrevive Adolfo Domínguez a sus pérdidas: El modisto lleva 'en rojo' desde 2011

El diseñador Adolfo Domínguez estrenará en 2025 una película documental sobre su vida, 'El eco de otras voces'. La dirige su hija Adriana y versa sobre su infancia en Trives (Ourense), su paso por la cárcel franquista o sus años universitarios en París. 

Y en 2026 quiere celebrar el medio siglo que cumplirá su firma textil a la que da nombre pese a los problemas económicos que arrastra. Desde 2011, la empresa va camino de sufrir 11 de los 14 ejercicios en números rojos. 

Los beneficios surgieron en 2015 a cuenta de la venta de una emblemática tienda en el Paseo de Gràcia barcelonés. En 2022, que fue cuando obtuvieron 'apenas' 200.000 euros de ganancias.  Y en 2023, en el que lograron 730.000 euros en positivo. 

Entre marzo y noviembre de 2024 la empresa gallega elevó su facturación un notable 8,7% hasta los 91 millones de euros. Y redujo casi a la mitad sus pérdidas. Aunque alcanzaron los 1,6 millones de euros. Fuentes del sector señalan que en 2024 la empresa seguirá en números rojos. 

Pese a ello, el CEO de la empresa, Antonio Puente, afirma que, excluyendo el paréntesis generado por el Covid, encadena siete años de aumento continuado de ventas.  "Igualamos la facturación de nuestra marca en 2013, cuando contábamos con 306 puntos de venta más. Y nuestro resultado supera en 7,9 millones el de entonces. Y todo con una marca renovada y más conectada con su tiempo". 

La deuda de la compañía ronda los 45 millones de euros. Parte está relacionada con los dramáticos números del pandémico 2020. Ese año se declararon más de 19 millones de euros en pérdidas. 

El desempeño de la textil en Bolsa es preocupante. Su acción no alcanza los 5 euros. En noviembre de 2008, la misma superaba los 52. 

Aperturas

Adolfo Domínguez pone buena cara al mal tiempo. En 2024 abrió 14 nuevos puntos de venta. Dos en Francia, ocho en México, uno en Ecuador, otro en Chipre y tres en Uruguay. La compañía cuenta con 376 tiendas en 27 países. 

La marca acaba de lanzar su décima colección conceptual desde su Laboratorio Creativo Ágora. Se trata de Renacer, "una colección que desafía los cánones de la moda y reinventa la ropa desde una nueva perspectiva", aseguran.  Renacer se suma a Galicia, Gender Fluid, A Morte, El Sexo, Zeitgeist, El vacío, Inspira, Exhala e Ikigai. 

El grupo gallego sigue controlado por el fundador Adolfo Domínguez. El modisto de 74 años posee algo más del 31% del capital. En la actualidad, ejerce de consejero dominical tras ceder hace más de cuatro años la presidencia a su hija Adriana. 

La compañía sigue una dinámica que contrasta con el esplendor de las empresas de un hermano de Adolfo, Jesús Domínguez. Este empresario se marchó del negocio a principios de los noventa, tras un incendio que destruyó su principal fábrica. 

Jesús Domínguez, enfrentado a su hermano, ha conseguido triplicar la facturación de Adolfo Domínguez con Lonia. Este grupo posee Purificación García y la línea lifestyle de Carolina Herrera. Sus hijas Uxía y María, además, rompieron moldes con la marca viguesa del sector de la moda y los complementos, Bimba y Lola. 

El diseñador industrial

Tal y como contó Alejandra de la Llave en Elcierredigital.com, la moda es uno de los pilares fundamentales en la saga de los Domínguez. El modisto, nacido en 1950 en el seno de una familia de sastres, originaria del municipio gallego de Puebla de Trives, creció bajo el influjo de los bocetos, las agujas y los retales. 

En la década de los sesenta y tras formarse en la provincia de Ourense, se traslada hasta Santiago de Compostela donde estudia Filosofía y Letras. Pero lo suyo era la moda y viaja hasta París y Londres, donde queda fascinado por la industrialización del país. De hecho, en una entrevista para Televisión Española se declara 'diseñador industrial'. 

Durante su estancia en dichas urbes entra en contacto con el movimiento ecologista, que ha estado presente en sus colecciones. El diseñador es un gran defensor del cuidado del medio ambiente. A  su regreso monta su primera tienda en la que fuera la sastrería de sus padres, ubicada en la provincia de Ourense.

En lo personal, pasó por el altar junto a Elena González Álvarez, su esposa. González Álvarez es consejera de la firma y madre de sus tres hijas, Tiziana, Adriana y Valeria. 

En su día todas quisieron aportar en la empresa de su padre. Adriana se puso al frente del sector de los perfumes, Valeria asumió la dirección de e-Commerce y Tiziana de la Línea U. Ahora, las responsabilidades de estas tres empresarias se han incrementado.

La saga se considera una "familia muy pintoresca con una mentalidad ecofriendly", en la que "es inevitable no hablar del trabajo". Su ropa se caracteriza, entre otras cosas, por el uso de tejidos sostenibles. Esto y lo alejada que está de la ostentación que marcaba la línea de confección de los looks de los ochenta, cautiva a clientes.

La compañía se acerca al medio siglo de vida tras poner de moda en 1982 el lema "La arruga es bella". Según la diseñadora Agatha Ruiz de la Prada, este es "el lema de toda una generación".