María Chivite colocará como vicepresidente de Navarra al histórico líder autonómico de IU Félix Taberna

María Chivite fue reelegida ayer como presidenta del Gobierno de Navarra gracias al apoyo de su grupo, el PSN-PSOE, y de los dos socios de su Ejecutivo, Geroa Bai (Socialverdes y PNV) y Contigo Navarra-Zurekin Nafarroa (Podemos, IU, Batzarre e Independientes). 

Euskal Herria Bildu facilitó la investidura al abstenerse y en contra votó la derecha navarra (UPN, PP y Vox), que apenas suma 20 de 50 parlamentarios en la Comunidad Foral. 

Retos

La reforma del Estatuto Navarra, el futuro e Volkswagen en la Comunidad Foral y mejorar la situación de la Sanidad son tres de los retos que afronta Chivite, que tendrá que superar las tensiones que sufre con Geroa Bai. 

Esta formación asume Salud y seguirá criticando a los socialistas por su negativa a realizar avance alguno en favor del euskera. Lo intentarán sin Uxue Barkos, que se marcha al Senado al igual que el que ha ejercido como vicepresidente primero de Chivite, el socialista Javier Remírez. 

Este último deja paso a Félix Taberna, que entre 1991 y 2007 ejerció como parlamentario de Izquierda Unida en Navarra. A esta formación estuvo afiliado entre 1986 y 2010, siendo su coordinador general a nivel regional entre 1992 y 2004.

Durante este tiempo, Taberna se negó a facilitar gobiernos socialistas porque compartía la teoría de las dos orillas de Julio Anguita, que sostenía que PSOE y PP eran casi idénticos. 

Este marcillés licenciado en Ciencias Políticas y Sociología por la Universidad Complutense de Madrid formó parte entre 2004 y 2008 de la Comisión Permanente Federal de Izquierda Unida (IU), donde ejerció de coordinador ejecutivo de Política Institucional y Modelo de Estado.

Fuentes de IU reconocen a Elcierredigital.com que "Taberna volvió desencantado de lo que vio en Madrid" tras la caída de Gaspar Llamazares, al que apoyó, y en 2007 se incorporó al Gabinete de Estudios de CCOO en Navarra.

Cambio de barco

En 2010 algo cambió: Taberna puso en marcha un foro, No digas que no se puede, que tenía como intención que la ciudadanía volviese a confiar en los socialistas tras varios años de desencanto por su negativa a articular gobiernos alternativos a UPN. 

Pero en 2011 el PSN-PSOE volvió a pactar con UPN, hecho que no impidió que Taberna se convirtiera en director gerente del Instituto Navarro de Administración Pública. Al año siguiente cesó del cargo por la ruptura del Ejecutivo y poco después se incorporó a una consultora de cabecera de los socialistas navarros, Inpactos. 

En 2013 Taberna participó en la Conferencia Política estatal del PSOE, al que se afilió, y en 2019 se convirtió en el principal asesor de la presidenta Chivite, cobrando más de 60.000 euros anuales por ello. 

En la actualidad, tal y como reza la declaración de bienes públicos, cuenta con saldos bancarios por valor de 475.000 euros, una vivienda adquirida en 1992, fondos inversión con más de 40.000 euros, acciones valoradas en más de 7.000 euros y obligaciones de 142.000. 

Javier Remírez, a Madrid

El secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, colocó como número 1 al Senado por Navarra al vicepresidente autonómico Javier Remírez, que podría tener un puesto de relevancia en el grupo socialista. 

Félix Taberna.

Cabe recordar que Remírez saltó a la primera plana en 2019 porque fue acusado de enchufar a su mujer, Erika Pérez, unos meses después de asumir la vicepresidencia navarra. Remírez afirmó que su mujer "tiene el derecho de cualquier ciudadano" a ser contratada por la empresa pública Nasuvinsa tras superar un proceso de selección.

Remírez aseguró que había sido "un proceso selectivo ordinario, el competente que se destina a las empresas públicas, en el cual una persona ha participado, ha sido valorada y ha sido seleccionada". "No se ha puesto en cuestión ese proceso, por tanto, no hay nada más que añadir", añadió. 

El socialismo navarro, al alza en el PSOE

La confianza de Pedro Sánchez en Santos Cerdán ha dado aire al socialismo navarro, que de la mano de María Chivite recuperó el poder en Navarra 23 años después de perderlo entre escándalos por corrupción y los GAL.