26 de junio de 2024
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FIN DE SEMANA

TRAS SEPARASE SUS PADRES, LA NIÑA VIVIÓ CON SU PROGENITOR Y SUS ABUELOS EN LORCA HASTA QUE EN EL MES DE DICIEMBRE LA MUJER SE LA LLEVÓ SIN DAR SEÑALES

Otro caso de sustracción de menores: En busca y captura la madre de la pequeña Lucía García

El Cierre Digital en Patricia Freije Luengo y su hija Lucía García Freije.
Patricia Freije Luengo y su hija Lucía García Freije.
Desde que nació, Lucía García Freije ha vivido con su padre y sus abuelos paternos hasta que el pasado 26 de diciembre su madre se la llevó. Desde entonces, hace ya seis meses, Juan Miguel García, padre de la pequeña, no sabe nada de su hija y afirma estar viviendo "un infierno". Tras medio año sin noticias del paradero de la madre y de Lucía, el juzgado de Lorca ha ordenado la busca y captura de la madre, ya que se trata de un caso de sustracción parental.

Lucía García Freije desapareció el pasado 26 de diciembre de 2022 en Lorca, Murcia. La pequeña de un año se encontraba con su abuela en el domicilio familiar en el que residía con su padre y sus abuelos paternos, cuando se presentó la madre de Lucía, Patricia Freije Luengo, tras quedar con la abuela paterna de la pequeña. A esa cita acudió con una chica más y dos hombres, y entre los cuatro se llevaron a la niña tras el encuentro sin el permiso de la abuela.

La pequeña Lucía García Freije.

Antes de tener a Lucía, sus padres ya no estaban juntos y fue Juan Miguel García, padre de la pequeña, quien se hizo cargo de cuidar a la pequeña con el consentimiento de la madre. Lucía vivía con su padre y con sus abuelos paternos. Después de seis meses sin saber nada sobre el paradero de la madre y su hija, el juzgado de Lorca ha ordenado la busca y captura de Patricia Freije ya que se trata de una sustracción parental. Sin embargo, no hay pistas de dónde está ni dónde ha podido ir.

Desde que nació el padre de Lucía cuidó de ella


Elcierredigital.com ha contactado con Juan Miguel García, padre de Lucía, que ha explicado a este diario que “desde que nació [Lucía] mis padres y yo hemos criado y cuidado a la niña. Yo cuidaba a mi hija porque la madre tiene problemas de espalda y no se podía hacer cargo de la niña, pero tampoco quería a mi hija. Esto no es justo, porque la madre aceptó estas condiciones y ahora se la ha llevado sin que sepamos nada y podamos verla, es una sensación terrible. No hay custodia, pero desde que la pequeña nació ha vivido con su padre con consentimiento de la madre. Está empadronada en mi casa y siempre ha estado conmigo”. 

Ficha de la desaparición de Lucía y de su madre.

“A día de hoy, tras seis meses, sigo sin saber nada de mi hija y no he podido hablar con ella. No sé ni dónde está ni si está bien, esto es un infierno. Quiero encontrarla por todos los medios, verla, que vea a sus abuelos, poder tocarla, acariciarla y darle un beso. Me estoy perdiendo la vida de mi hija, necesito encontrarla y poder cuidarla, no sé cómo estará y eso me da mucho miedo. La madre está totalmente desaparecida, tiene el teléfono incomunicado y se dedica a dar otros teléfonos. La denuncia está puesta en el juzgado, pero no se presenta y da teléfonos y viviendas falsas”, asegura el padre de la pequeña.

"Hay que tomar medidas respecto a las sustracciones parentales"


En una conversación con elcierredigital.com el presidente de SOSDesaparecidos, Joaquín Amills, defendía que “hace falta poner las cartas boca arriba y que tanto el Ministerio del Interior como el de Justicia tomen medidas en el tema de las sustracciones parentales. Cada vez son más frecuentes y suponen un mayor escarnio para el cónyuge que queda en España, además de una tortura terrible al no poder tener contacto con un hijo. Es muy triste apartarlo de uno de los progenitores sin motivo alguno y de manera deliberada. Es momento de tomar las riendas para prevenir todo esto”. 

Lucía García.

“Creo que habrá que tomar medidas porque cada día son más los casos similares. También son cada vez más países los que no cumplen con el convenio de la Haya o que muestran una pasividad exagerada que solo pone palos en las ruedas. Si hay un problema ha de solucionarse en el ámbito judicial, pero en este caso no existe ninguna denuncia previa. Los niños no pueden salir del país solo con uno de los progenitores sin comunicarlo y sin la autorización previa de la otra parte”, concluye Joaquín Amills.

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