Barones socialistas reconocen que el presidente de su formación "echó de menos a Iván Redondo y estuvo mal asesorado, a diferencia del líder popular"
Sectores del PSOE tras el debate Sánchez-Feijóo: "Miguel Ángel Rodríguez ha derribado nuestra última carta"
"Mal asesorado". Así estuvo Pedro Sánchez, según sectores del PSOE, en el único cara a cara entre los dos principales candidatos (Sánchez-Feijóo) para las elecciones generales del próximo 23 de julio. Fuentes de la formación socialista consultadas por elcierredigital.com aseguran que el presidente del Gobierno "echó de menos a su exconsultor Iván Redondo".
El spin doctor salió hace dos años del Gobierno tras barruntar que los puntales mediáticos de Sánchez pretendían pegarle "una patada hacia arriba", con el objetivo de que aceptara un ministerio menor a cambio de dejar el puesto de jefe de Gabinete del presidente. Pero Iván Redondo rechazó el envite y desde el Grupo Prisa le dijeron a Sánchez que tenía que "volver al partido" y apostar por figuras con carnet socialista.
"Miguel Ángel Rodríguez ha derribado nuestra última carta"
En el PSOE creían que la última carta que poseía Sánchez para hacer una remontada casi utópica era barrer en el debate, pero al presidente del Gobierno se le notó incómodo y tenso –según expertos en oratoria consultados por elcierredigital.com–, dando muestras de "nerviosismo" tanto a través de sus expresiones fuera de tono en algunos tramos del debate como por su aspecto, ya que "se le notaba que estaba sudando".
"Miguel Ángel Rodríguez ha derribado nuestra última carta", reconocen en referencia al histórico asesor 'popular', que fuera jefe de Gabinete de José María Aznar y de Isabel Díaz Ayuso. 'MAR', como se le conoce en la vida pública a Rodríguez, es "un clásico de estos formatos y supo suministrar munición al candidato 'popular' incluso en los temas en los que el PSOE partía como favorito", refiriéndose principalmente a la parte económica.
Fuego amigo
Incluso los principales apoyos mediáticos del PSOE han dado por derrotado a Sánchez, que tras el debate cae en el tracking diario de ABC y en la última encuesta publicada al alimón por la Cadena SER y El País.
Este último medio, próximo al Gobierno socialista, editorializaba este martes asegurando que "Sánchez perdió su oportunidad en el primer bloque, el de la economía, cuando lejos de sacar ventaja de los excelentes datos que puede presentar a lo largo de la legislatura, perdió la iniciativa, incapaz de rebatir con argumentos el dibujo catastrofista que Feijóo ofreció con eficacia".
"A partir de ahí, un Sánchez crecientemente a la defensiva se conformó con un pugilato televisivo en lugar de buscar la confrontación de ideas y modelos de gestión del país ante un Feijóo encaramado en la seguridad de su primera posición en las encuestas", añaden.
En el mismo medio del Grupo Prisa, Estefanía Molina aseguraba este miércoles que "el presidente del Gobierno también se redujo a sí mismo a mero aspirante a La Moncloa: traía los datos, pero patinó al obviar que aquello no era una comparecencia, ni una entrevista, sino un debate. Feijóo logró atomizar mejor los mensajes, aunque algunos fueran falsos o medias verdades".
Sánchez y Núñez Feijóo.
Y sobre Núñez Feijóo añadía: "Fue el principal objetivo comunicativo del PP: venderse como presidenciable. Génova sabía que Sánchez ha dedicado la legislatura a presentarle como un mal gestor, errático en sus exposiciones en el Senado. Las bajas expectativas jugaron a favor del gallego, que demostró llegar preparado para disparar sin contemplación, obligando al líder socialista a ir a rebufo, al refutarle".
Uno de los pocos gurús mediáticos socialistas que libra a Sánchez de la quema es el catedrático de Comunicación José Miguel Contreras, que en su columna de opinión en el medio Infolibre señala: "El líder socialista reaccionó intentando no dejarse pisotear. Hay gente que plantea que no debía haber entrado al trapo y que no tenía que haber caído en interrumpir a su adversario y en aceptar el juego inaudible".
"La duda es qué hubiera ocurrido si se hubiese dejado pisotear por un candidato que no iba a permitir desde el minuto uno que se desarrollara un debate ordenado y expositivo. Optó por no dejarse avasallar y defenderse con formas desconocidas en él. Más que una estrategia definida, pareció una reacción de indignación y supervivencia", asegura.
Las últimas encuestas pronostican un cómodo triunfo del Partido Popular, aunque previsiblemente tendrá que haber pacto con VOX, de Santiago Abascal, para que Alberto Núñez Feijóo alcance La Moncloa, como publica elcierredigital.com en la encuesta realizada para nuestro medio por la empresa Top Position.
Por contra, el PSOE intentará apretar en campaña para forzar un escenario de repetición electoral en caso de que los 'populares' y los de Santiago Abascal no alcanzaran un acuerdo.
