Pedro Sánchez cede a Susana Díaz el PSOE andaluz: Del odio político al 'matrimonio por conveniencia'

Mayo de 2017: Susana Díaz, que cuenta con el favor de los barones del PSOE, de la vieja guardia del partido y del establishment, se lanza a por Pedro Sánchez en las primarias socialistas. La por aquel entonces presidenta de la Junta de Andalucía pretende derribar a su rival, que había renunciado a la secretaría general del PSOE tras apostar por el 'no es no' a la investidura de Mariano Rajoy. 

Díaz, que apoyó que los diputados socialistas se abstuvieran con tal de no repetir por tercera vez elecciones en menos de un año, se lanza al cuello de su exaliado: "Los votantes no sabían si votaban al PSOE de Ciudadanos o al PSOE cercano a Podemos, si votaban al que saca una bandera de España más grande que la de Aznar o si votaban al PSOE plurinacional".

La baronesa no se cortaba: "Hemos dado muchos bandazos. Porque no sabemos qué defendemos. No es que seas voluble, es que cambias de opinión en función de la que te viene bien. No puedes tener, Pedro, 17 visiones de España (. . .) Ya nadie trabaja contigo. Ni Zapatero ni Felipe se fían de ti. Tú problema no soy yo, eres tú". 

Sánchez ganó... y ahora apuesta por la clemencia ante Díaz

La soberbia suele ser mala compañera de viaje y Susana Díaz, demasiada favorita en aquel entonces, perdió las primarias ante Sánchez. Posteriormente, Díaz caía en las elecciones autonómicas y el PSOE era desalojado por primera vez de la Junta de Andalucía en 37 años tras la mayoría conservadora que formaron PP, Ciudadanos y Vox.

La derrota de Díaz parecía que era propicia para que Sánchez asaltase la influyente baronía andaluza mediante algunos aliados como Alfonso Gómez de Celis o el alcalde sevillano Juan Espadas. Pero el presidente del Gobierno, consciente del peso del mundo rural en el PSOE, ha escuchado a Iván Redondo y ha apostado por contemporizar con su exrival. 

Pedro Sánchez intentó tutelar un relevo 'educado'

Pedro Sánchez ofreció el año pasado a Díaz la presidencia del Senado para facilitar la renovación del PSOE andaluz. Pero la baronesa se negó a aceptar el cargo y dejó claro que pretendía repetir como cabeza de cartel en las autonómicas de 2022. 

Y, tal y como señalan fuentes del PSOE a El Cierre Digital, Pedro Sánchez está dispuesto a apoyarla. No sería el primer favor del presidente del Gobierno a Díaz, que vio con buenos ojos que en febrero el 'sanchista' Lucrecio Fernández fuese relevado por su aliada Sandra Sánchez. 

Susana Díaz. Foto: Canal Sur.

Pedro Sánchez también había 'sacado' del sur a otro 'sanchista' que molestaba a Susana Díaz, Alfonso Gómez de Celis, recompensado con el cargo de vicepresidente primero del Congreso tras quedarse también sin el puesto de delegado de Gobierno en Andalucía (posición envidiable para ganar unas primarias o unas elecciones autonómicas).

Un rival para Susana

El diputado estatal Felipe Sicilia dejó claro hace unas semanas que tiene intención de rivalizar con Díaz por el liderazgo del PSOE andaluz: "No descarto presentarme. El PSOE de Andalucía necesita recuperar la confianza mayoritaria. Opinarán los militantes cuando se abra el proceso de primarias". 

Cierto es que su precipitada salida y su falta de apoyos le pueden complicar la aventura para alegría de Díaz, que asegura que sus miras están "puestas en los problemas de los andaluces. Aquí es donde quiero estar".

La expresidenta andaluza, en declaraciones a Público, aseguró que "cuando llegue el momento, todos los compañeros podrán optar y libremente los militantes elegirán. Y, en ese momento, buscaré con ilusión y ganas que nuestro proyecto vuelva a ser mayoritario en Andalucía". 

Aguas revueltas en la progresía andaluza

Susana podría tener ciertas facilidades para hacerse con las primarias del PSOE gracias a la postura conciliadora de Sánchez, pero las encuestas no son alentadoras para los progresistas en Andalucía. Y esta situación tiene visos de complicarse después de que Podemos e IU hayan expulsado del grupo de Adelante Andalucía a Teresa Rodríguez y sus partidarios. 

Rodríguez, que se ha intentado adueñar de una marca perteneciente a una coalición transversal, se habría quedado con 109.000 euros que pertenecen a Izquierda Unida y a Podemos Andalucía, tal y como denuncia el digital morado La última hora. 

Este dinero, sostienen los aliados de Iglesias, iba a ser utilizado por Rodríguez para poner en marcha su nueva aventura junto a Anticapitalistas. Pero la exbaronesa de Podemos no tendrá fácil continuar en política a partir de 2022. 

Y es que algunas encuestas pronostican que Podemos se mantendría holgadamente en el Parlamento andaluz mientras este nuevo proyecto no alcanzaría siquiera ni un escaño a pesar del tirón que se le presume a Teresa Rodríguez y al alcalde de Cádiz, 'Kichi'.