28 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco ya condenó al mandatario del equipo donostiarra al pago de 12 millones de euros por fraude a Hacienda

Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad de Fútbol, investigado por tráfico de armas por la CIA en Estados Unidos

Exclusiva Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad.
Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad.
El presidente de la Real Sociedad, Jokin Aperribay, está en el punto de mira de las autoridades estadounidenses, en concreto de la CIA, que investiga en la "operación Ruho" la venta de piezas para un vehículo anfibio al gobierno iraní. La empresa de Aperribay, Sapa Placencia de las Armas, cobró a primeros de 2019 el primer plazo de los 28 millones de euros que facturó a Irán por proveer de un motor propulsor estos vehículos. Los americanos han bloqueado en septiembre una cuenta en el extranjero.

Jokin Aperribay, actual presidente de la sociedad deportiva Real Sociedad SAD, está siendo sido investigado por el Gobierno de los Estados Unidos por tráfico de armas con destino a Irán. Este país es uno de los que sufren el embargo tecnológico por parte del gobierno federal norteamericano, de Donald Trump, que tiene advertido a sus socios de la OTAN que no pueden vender armas a Irán y a otros países.

La empresa de Aperribay, Sapa Placencia de las Armas SL, firmó el mencionado contrato en 2015 con el régimen de los Ayatolás de Irán. Para ello contó con el visto bueno del entonces ministro de Defensa del Partido Popular, el vizcaíno Pedro Morenés, ya que fue durante su época como titular ministerial del gabinete de Mariano Rajoy cuando se firmó este sustancioso contrato con los iraníes para la producción del motor propulsor y generación de energía para los sistemas embarcables de los vehículos 8x874, unos coches anfibios usados para el desembarco de tropas y material.

El negocio se cerró por 28 millones de euros de coste total, aunque realmente los costes de producción suman 17 millones, lo que supone un beneficio de 11 millones de euros. Es decir, un margen comercial de más del 40 por ciento del importe real, algo habitual en las empresas dedicadas al negocio armamentístico. A pesar de todo, la empresa Sapa Placencia presenta pérdidas en sus balances anuales con cierta frecuencia.

Pedro Morenés, exministro de Defensa.

En la operación se estipuló que el contrato se pagará en cuatro plazos por parte del gobierno de Irán. El primero de los cuales se realizó a principios de 2019. Fue entonces cuando el gobierno de Estados Unidos intentó bloquear las cuentas de la familia Aperribay y de su empresa Sapa Placencia de las Armas SL, que esperaban la recepción del primer plazo en este mes de septiembre en una cuenta en el extranjero que el servicio secreto americano de la CIA ha conseguido bloquear. Sin embargo, según las fuentes consultadas por elcierredigital.com, el primer plazo ya ha sido cobrado.

El contrato fue firmado en el año 2015 y durante dos años se realizó la producción en las fábricas de Sapa. Curiosamente, en este período el consejo de administración de la empresa de los Aperribay fichó a el exministro popular Pedro Morenés, tras abandonar el último gobierno de Mariano Rajoy.

Operación Ruho

La investigación actual se enmarcada dentro de una operación que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) ha denominado "Operación Ruho", en clara referencia a Ruhollah Musavi Jomeini, el ayatolá iraní fallecido en septiembre de 1983.

Una de las fábricas de Sapa.

El presidente de la Real Sociedad SAD, Jokin Aperribay, se ha encontrado con un enemigo poderoso. Este escenario dista mucho de los supuestos tratos de favor concedidos por parte de las instituciones políticas vascas, del PNV, que siguiendo su propia legislación debería retirar su apoyo al empresario vasco.

Precisamente, el 28 de diciembre de 2007 -día de los Santos Inocentes- se aprobó una iniciativa legislativa por la cual el Gobierno Vasco se comprometía a no colaborar con “aquellas personas físicas o jurídicas dedicadas a la producción, comercialización y financiación de armas”. Sin embargo, ocho días más tarde, el Boletín Oficial del País Vasco anunciaba la concesión a la empresa armamentística SAPA de una subvención de 3.000.000 de euros.

Ruhollah Musavi Jomeini, el ayatolá fallecido.

Según fuentes solventes consultadas, "en un ejemplo contradictorio, la Hacienda Foral de Guipúzcoa, con el visto bueno de su Dirección General, autorizó el empleo de “un arma fiscal de destrucción masiva” contra el erario guipúzcoano, denominada “Sociedades de Promoción de Empresas” a la familia Aperribay que así logró un ahorro fiscal de millones de euros".

La misma institución procedió a aceptar una petición del propio Aperribay para la aplicación de un plan de aplazamientos de deudas tributarias “ad hoc” tanto a la Real Sociedad como a su familia. El requerimiento del actual presidente de la Real Sociedad fue avalado con la firma del Subdirector General de Recaudación Mikel Romero Landa, y sustentado con un compromiso personal del actual Diputado foral de Hacienda y Finanzas, Javier Larrañaga, un cargo de confianza del PNV.

Jokin Aperribay se ha enfrentado ya a varias crisis dentro de la Real Sociedad, cuando los exjugadores Aguirretxe, Ansótegui, González, Labaka, Zubikarai, Bergara, Mikel Aramburu o David Zurutuza, éste actualmente activo como jugador y segundo capitán del equipo, se posicionaron a favor de una marcha en apoyo a los presos de ETA en Bilbao.

El presidente de la Real Sociedad y el jugador Zurutuza.

El club, presidido por Aperribay, no condenó la actuación de los jugadores. Eligió sucumbir al oportunismo de mezclar política con el deporte, "a pesar de que razones personales no le faltaban para haber actuado con más valentía y dignidad, ya que su familia había sufrido de manera directa el terrorismo de ETA  y un intento de secuestro de su padre Joaquín Aperribay, en el que falleció su chófer Gregorio Caño, y posteriormente la recepción de una carta bomba desactivada por las Fuerzas de Seguridad", afirman a elcierredigital.com fuentes próximas a la familia Aperribay.

Primera condena

El año pasado el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) condenó al actual presidente de la Real Sociedad de Fútbol S.A.D., Jokin Aperribay Bedialauneta, así como a otros miembros de su familia, al pago de un importe de unos 12 millones de euros así como al abono de una sanción y las costas por la utilización de sociedades de promoción de empresas para defraudar a Hacienda.

Ahora este asunto es mucho más serio, ya que es el gobierno de Estados Unidos quien amenaza los intereses económicos del hasta ahora presidente de la Real Sociedad, de profesión fabricante de armas.

Puestos en contacto con el gabinete de prensa de la sociedad anónima Real Sociedad SAD no han contestado a los emails de nuestro periódico.

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