Los Ruiz Mateos volverán al banquillo acusados de delito fiscal en la compra de un hotel en Mallorca

Los seis hijos varones del famoso empresario jerezano José María Ruíz-Mateos, Pablo, Zoilo, Javier, Álvaro, Alfonso y José María volverán a sentarse en el banquillo de los acusados en Palma de Mallorca. En esta ocasión están acusados por la Fiscalía de un delito fiscal en la compra del Hotel Beverly Playa Paguera en 2008.

La Fiscalía, que cifra el supuesto fraude en 1,9 millones de euros, pide cuatro años de prisión para cada uno y una multa de 9,5 millones. El miércoles el abogado defensor de los Ruiz Mateos intentó llegar a un acuerdo con la Fiscalía durante una vista previa convocada en el Juzgado de lo Penal número 4 de Palma de Mallorca.

Por videoconferencia

Los hermanos Ruiz Mateos comparecieron por videoconferencia desde la cárcel de Aranjuez donde cumplen condena por una estafa en la compraventa de este hotel. Los seis resultaron condenados sin posibilidad de recurso ante el Tribunal Supremo en octubre de 2018 a dos años y medio de prisión por una estafa agravada, en relación a la compra de dos hoteles, éste en Mallorca y otro en la localidad grancanaria de San Bartolomé de Tirajana.

El juicio se celebrará entre el 30 de marzo y el 2 de abril y los acusados no viajarán a Mallorca, ya que asistirán por videoconferencia a las sesiones. Además, el pasado octubre, la Audiencia Provincial de Baleares ya los sentenció a penas de entre dos años de cárcel, y un año y nueve meses por estafa agravada en la compra en 2005 del hotel Eurocalas de Mallorca.

Los Ruiz Mateos durante el anterio juicio en Palma.

Las madre de los seis Ruiz Mateos, Teresa Rivero, desahuciada recientemente de la casa donde vivía con Alfonso y su esposa, también fue sentenciada a finales de septiembre de 2018 a siete años de cárcel por fraude fiscal. Durante el juicio declararán más de una quincena de testigos, la mayoría propuestos por la defensa.

El fiscal Anticorrupción  de Palma de Mallorca, Juan Carrau acusa los seis hermanos de defraudar a la Hacienda Balear en el pago de un impuesto autonómico en la transmisión del hotel, que ahora reclama la Agencia Tributaria de Baleares a través de la Abogacía de esa comunidad autónoma.

La defensa de los Ruiz Mateos dice que no hay delito porque entiende que la operación estaba exenta de ese tributo y que no se produjo una ocultación a la Hacienda pública. Argumentan que no se trató de la compra de un inmueble, sino del 100 por ciento de una sociedad que poseía dos hoteles: el Beverly Playa en Mallorca y el Beverly Park en Gran Canaria.

La defensa también argumenta que en la escritura de compraventa el notario emitió "juicio de legalidad" y que el plazo para realizar la supuesta liquidación ya se habría extinguido, ya que la operación tuvo lugar en diciembre de 2008.