Respuesta oficial de Hacienda: estos trabajadores se ven afectados en 2025

Hacienda ha adaptado sus normativas para regular la fiscalidad de quienes trabajan a distancia. Con el teletrabajo, cada vez más profesionales desempeñan sus funciones desde cualquier lugar, incluso fuera de España, lo que ha generado dudas sobre la tributación. La clave está en saber si los ingresos deben declararse en el país de residencia o en aquel donde opera la empresa para la que se trabaja.

Al momento de declarar ingresos, surge una pregunta clave. ¿Se debe tributar donde se reside o donde está la empresa para la que se trabaja?. Las respuestas dependen de varios factores, como la residencia fiscal y los convenios de doble imposición​.

¿Dónde tributan los teletrabajadores?

Después de la pandemia, cada día son más los trabajadores por cuenta propia o ajena que desempeñan sus actividades desde casa. Esto lo hacen tanto desde su estado de origen como en el extranjero. Sin embargo, en términos de Hacienda, no todos los casos se tratan de la misma manera.

Un residente fiscal en España, es decir, una persona que vive aquí más de 183 días al año, está obligado a declarar en este país todos los ingresos mundiales. Esto significa que todos los ingresos que reciba, sin importar desde qué lugar provenga, deben ser declarados aquí.

En el caso de un español que trabaja en el extranjero, puede beneficiarse de la exención de 60.100 euros anuales, siempre que cumpla ciertos requisitos. Uno de ellos es si existe un convenio de doble imposición del estado donde trabajo con España​. Esta información puede revisarse en la página web del Ministerio de Hacienda. 

Para los extranjeros que trabajan para empresas en España mientras residen en otro estado, la situación varía. Si no se consideran residentes fiscales en España, solo deben tributar por los ingresos obtenidos dentro del territorio. Lo que implica posibles retenciones en origen o la obligación de presentar el modelo 210 de no residentes.

Aspectos clave de la tributación a Hacienda del teletrabajo

Cuando se acerca el momento del proceso de renta, comienza a crecer la incertidumbre sobre qué impuestos se deben pagar y cómo hacerlo. La clave está en determinar correctamente la residencia fiscal y comprobar si existen tratados entre las naciones implicadas.

En el caso de los autónomos que prestan servicios a clientes en el extranjero, es fundamental revisar si están sujetos a IVA. Y si están sujetos a retenciones fiscales en España como en el país de sus clientes. En algunos casos, es posible acogerse a convenios para evitar la doble imposición y evitar pagar impuestos dos veces por el mismo ingreso​.

Para evitar errores, lo recomendable es consultar con un asesor fiscal especializado en tributación internacional. Conocer las obligaciones fiscales con antelación puede evitar sanciones y garantizar el cumplimiento con Hacienda.