María José Álvarez, presidenta de Eulen, beneficiada por pacto familiar Vega Sicilia
La empresaria de 67 años obtiene 105 millones por salir de la bodega matriz y entierra la guerra fraternal por herencia
El Enebro comienza a saborear la paz interna tras sufrir durante casi 15 años una monumental guerra familiar protagonizada por los propietarios de la compañía dueña de Vega Sicilia, los Álvarez Mezquíriz.
A finales del pasado año María José Álvarez (la favorita del desaparecido patriarca David Álvarez y presidenta del Grupo Eulen) enterraba el hacha de guerra con cinco de sus siete hermanos, que se han hecho con el cien por cien de las bodegas tras abonar 105 millones a la empresaria.
Ésta, a su vez, ha conseguido sacar a sus hermanos de Eulen después de que el grupo les haya ingresado 129 millones de euros. Cantidad que podría servir, en parte, para consolidar el desembarco de Vega Sicilia en las Rías Baixas tras invertir 22 millones de euros en una bodega y 24 hectáreas de tierra que podría producir, a partir de 2025, alrededor de 350.000 botellas de dos marcas diferentes de albariño.
María José Álvarez ve acrecentar su patrimonio personal mientras consolida su poder en el gigante multiservicios Grupo Eulen, que opera en España, Portugal, EE.UU., Colombia, Costa Rica, Chile, Jamaica, México, Panamá, Perú, República Dominicana, Libia, Omán y Qatar; da trabajo a más de 80.000 empleados; y factura en torno a 1.600 millones de euros anuales.
Esta empresa de servicios auxiliares (seguridad, limpieza, gestión de residencias, etc.) fue creada por el empresario David Álvarez, que falleció en 2015 tras varios años de guerra contra cinco de sus siete hijos —lucha que 'heredó' su favorita— por el control de esta compañía dedicada a conseguir contratos de externalizaciones y emplear, normalmente por sueldos cercanos al Salario Mínimo Interprofesional, a miles de trabajadores.
El empresario leonés acabó sus días enfrentado a sus "hijos díscolos", así los llamaba en público, tras protagonizar una involuntaria parodia de 'Falcon Crest' a la española que tenía como epicentro a la otra compañía fundada por Álvarez, El Enebro, propietaria desde 1982 de la mítica bodega Vega Sicilia.
"Doy gracias a Dios porque el conflicto familiar y empresarial lo puedo arreglar en vida", decía Álvarez sin saber que iba a morir sin resolverlo. Y es que en 2022 el asunto seguía en los tribunales, en esta ocasión con triunfo para su hija favorita, principal heredera y albacea, la ya famosa María José.
El Supremo falló ese mismo año contra la junta de accionistas de El Enebro en 2013 que consiguió quitarle el control a su fundador, hombre hecho a sí mismo que nació en la montaña leonesa, se recrió en Bilbao y triunfó en Madrid.
Así se forjó una de las grandes fortunas del siglo XX en España
Los Picos de Europa vieron nacer en 1927 a David Álvarez, natural de una localidad que hoy ronda los 500 habitantes: Crémenes (León). Su familia, como tantas otras de la comarca, marchó al industrial Bilbao para prosperar.
Y su hijo lo hizo: se matriculó de Estudios Técnicos Industriales... y acabó abriendo academias para impartirlos. Este fue el nacimiento de su emporio, que a partir de los años 60 del siglo pasado se subió a la ola de desarrollismo español estimulado por la tecnocracia opusina que vino a enterrar la autarquía franquista de los años 40 y primeros 50.
La última fotografía de "don David", tal y como se le conocía en los círculos empresariales, y sus siete hijos data de 2009, año en el que el patriarca del clan, ya con 82 años y dos veces viudo, se casó con su secretaria.
El empresario firmó la separación de bienes, no sin antes asegurarle un futuro a su última mujer (3 millones de euros y 12.000 euros mensuales de pensión vitalicia actualizada al IPC). Este asuntó lo ató la última vez que diseñó su herencia. Por aquel entonces, declaró a dos de sus hijos como herederos universales mientras les forzaba a entregar la citada pensión si no querían que la fortuna acabase en la beneficencia.
Aquel año Álvarez anunció que se iba a jubilar para dar paso a uno de sus hijos, Juan Carlos. Este, junto a cuatro de sus hermanos, intentó anticipar la jubilación de su padre a la vez que relevaba a parte de la vieja guardia del holding familiar, empezando por Santiago Carrero, secretario general de Eulen y finalmente partidor de la millonaria herencia de su protector.
David Álvarez, en cólera, volvió al ruedo empresarial en 2010, retomó las riendas de Eulen y dos años después dejaría los mandos del gigante a su hija María José. "Mi padre es muy firme en lo que exige: primero justicia y después paz", aseguró la hoy presidenta de Eulen.
El patriarca acusó a cinco de sus siete hijos de "vaciar la caja" de Vega Sicilia y estos aseguraron que "las acusaciones de don David Álvarez se caen por su propio peso". "Sólo buscan lesionar el honor y los legítimos intereses de los cinco hijos que estamos agrupados en El Enebro, reactivando un conflicto familiar que no deseamos y que hemos intentado resolver pacíficamente y en privado en numerosas ocasiones, tristemente sin éxito", añadieron.
El patriarca murió anímicamente muy afectado por esta guerra por fin extinguida.
Los Álvarez, Corinna y el papel couché
David Álvarez nunca ocultó sus ideas conservadoras, que fueron orillándose con el paso del tiempo. El empresario, premiado con la Medalla al Mérito al Trabajo por el Gobierno de su amigo José María Aznar, aparece en los papeles de Wikileaks como financiador del polémico grupo antiabortista Hazte Oír, vinculado en el nacimiento de Vox.
Su millonaria hija no le va a la zaga: en plena pandemia criticó las subidas del Salario Mínimo Interprofesional mientras invertía en el portal Estado de Alarma, liderado por Javier Negre y con posiciones cercanas al partido de Santiago Abascal.
El fundador del clan empresarial profesaba un gran fervor monárquico y en 2014 Juan Carlos de Borbón le premiaba con el título de marqués de Crémenes. Eso sí, "de carácter vitalicio y no hereditario" para evitar que uno de "los díscolos", Jesús David, se convirtiera en marqués tras su fallecimiento.
María José también es firme defensora de la familia Borbón a pesar de los innumerables escándalos que ha protagonizado en los últimos años. Quizá esta cercanía ha invitado a que Corinna denunciase que la presidenta del Grupo Eulen fue la "organizadora" de la persecución que presuntamente sufrió por parte del CNI.
Presa del corazón es Corinna y también otro de los "hijos díscolos" de David Álvarez, Emilio, que protagonizó varias fotografías subidas de tono en Diez Minutos o Vanitatis con jóvenes mujeres que trabajaban en el negocio familiar.
Estas instantáneas forzaron su ruptura matrimonial con la célebre Paloma Segrelles junior, que en 2014 no se cortó a la hora de reconocer su hartazgo: "Me divorcié para no ver más fotos de mi exmarido con otras mujeres", señaló.
También saltó a la prensa del papel couché el primogénito, Jesús David, que compartió vida durante una década con la 'chica Almodóvar' Silvia Jofre. Esta actriz contó las interioridades del clan en una entrevista concedida en 2019 a Elcierredigital.com.
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