Las claves del éxito de RBI, 'rey' de la comida rápida con más de 30.000 restaurantes

El año 2023 concluyó para Restaurant Brands International (RBI) con buenas noticias. El grupo de comida rápida, que es dueño de las cadenas Burger King, Tim Hortons y Popeyes Louisiana Kitchen, contabilizó un beneficio neto atribuido de 1.190 millones de dólares, unos 1.104 millones de euros. Estos datos han hecho que la compañía se plantee salir a bolsa este 2024.

La cifra supone un incremento del 18,1% sobre los datos de 2022. También corrobora su buena situación la facturación, que alcanzó los 7.022 millones de dólares, unos 6.512 millones de euros, lo que supone un 7,9% más sobre 2022, como ha publicado la empresa.

Josh Kobza, director ejecutivo de RBI, declaró que estas cifras se deben a varias iniciativas puestas en marcha por la empresa: “Estamos ofreciendo mejores experiencias a nuestros clientes, mayor rentabilidad a nuestros franquiciados y estamos realizando las inversiones adecuadas a largo plazo que explican el crecimiento de nuestras marcas. Hemos empezado 2024 con una base de sólido rendimiento operativo”.

El director también expresaba su gratitud hacia los trabajadores del Grupo: “Estoy agradecido a todos nuestros equipos, franquiciados y miembros de su equipo que trabajan tan duro para que tengamos éxito”. La compañía ha publicado que las ventas procedentes de los restaurantes en régimen de explotación directa crecieron un 4,6%, hasta alcanzar los 2.950 millones de dólares.

Por su parte, los ingresos de las franquicias hicieron lo mismo, con un 9,1% de incremento, llegando a los 2.903 millones de dólares. Y no hay que olvidar los 1.169 millones de dólares procedentes de la publicidad y otros servicios, cifra que supone un 14% más.

El origen de RBI

Restaurant Brands International Inc. es una de las compañías de restaurantes de comida rápida más grandes del mundo. La empresa obtiene, como indica en su web, más de 40.000 millones de dólares en ventas anuales en todo el sistema. Cuenta con más de 30.000 restaurantes alrededor del mundo en más de 100 países diferentes.

RBI es la propietaria de cuatro de las marcas de restaurantes de servicio rápido más destacadas e icónicas del mundo: Tim Hortons, Burger King, Popeyes y Firehouse Subs. Todas ellas operadas de manera independiente durante décadas de servicio de restauración.

Este holding multinacional de origen canadiense-estadounidense surgió en 2014, cuando la cadena estadounidense de restaurantes de comida rápida Burger King se fusionó con Tim Hortons, una cadena canadiense de cafeterías. La fusión hizo nacer a una de las empresas de servicios de alimentos más grandes del mundo. En 2017, RBI adquirió Popeyes Louisiana Kitchen, lo que agregó otra marca popular a su cartera.

En marzo de 2023 Joshua Kobza fue nombrado CEO de Restaurant Brands International, tomando el relevo de José Cil, que ostentaba el cargo desde 2019. “Estoy emocionado de liderar la compañía y trabajar en estrecha colaboración con nuestros presidentes de negocios para poner a nuestros franquiciados en el centro de nuestro éxito y acelerar el crecimiento que sabemos que nuestras marcas son capaces de hacer”, expresaba Josh Kobza.

Kobza ya había ocupado cargos de gran importancia en RBI durante los últimos once años: fue director financiero, en el periodo comprendido entre 2013 y 2018, director de Tecnología y de Desarrollo, entre 2018 y 2019, y director de Operaciones, de 2019 a 2023, con responsabilidad también sobre la estrategia del grupo.

Además, Kobza fue parte integral de las adquisiciones de Tim Hortons en 2014, Popeyes en 2017 y Firehouse Subs en 2021. “Hemos hecho un gran progreso en los últimos años y estoy muy orgulloso del equipo que hemos construido en RBI. He trabajado en estrecha colaboración con Josh durante muchos años y espero apoyarlo a través de esta transición mientras trabajamos para acelerar aún más nuestro negocio”, explicaba José Cil en aquel momento.

Sus marcas 

Una de sus cadenas más populares es Burger King, que fue fundada en 1954 y opera en más de 18.700 ubicaciones repartidas en más de 100 países y territorios de Estados Unidos.

Casi el 100% de los restaurantes de la marca son propiedad y están operados por franquiciados independientes, muchos de ellos en operaciones familiares que llevan activos en el negocio durante décadas. En Estados Unidos y Canadá, durante el año 2023, Burger King generó unos ingresos netos de 1.297 millones de dólares, unos 1.203 millones de euros, un 8,4% más que en 2022.

RBI también es propiedad de Popeyes, una cadena fundada en Nueva Orleans en 1972, que tiene ya más de 50 años de historia. Popeyes se ha conviertido en uno de los restaurantes de pollo de servicio rápido más grandes del mundo, con más de 3.600 restaurantes en el mundo. El pasado año, en relación a EE.UU., se situó en 692 millones de dólares, 641,8 millones de euros, que se traduce en un 11,9% más que en 2022.

Tim Hortons es otra de las cadenas de restaurantes de la empresa, una de las más grandes de América del Norte operando en el segmento de servicio rápido. Fue fundada como una sola ubicación en Canadá en 1964 y en la actualidad cuenta con más de 5.400 restaurantes en todo el mundo. En el pasado año, en Estados Unidos y Canadá, mejoró un 4,5% sus ingresos netos, hasta los 3.972 millones de dólares, unos 3.684 millones de euros.

Finalmente, Firehouse Subs es la última de sus cadenas de restaurantes. Fundada en Jacksonville, Florida, en 1994, por dos hermanos y exbomberos. Firehouse Subs consiguió el pasado año 187 millones de dólares, 173,4 millones de euros, un 34,9% más en EE. UU. y Canadá que lo obtenido en 2022.

Con más de 400 franquiciados sirviendo en sus comunidades locales, según datos de Technomic Insight, Firehouse Subs fue nombrada por cuarto año consecutivo la marca número 1 en la industria de restaurantes que "apoya las actividades de la comunidad local".

En el resto de países del mundo, las ventas totales de todas estas marcas crecieron un 16,5%, llegando a los 874 millones de dólares. Como indica RBI, durante 2022 y 2023 “se produjeron aumentos en los costes de las materias primas, la mano de obra y la energía, por lo que se ha vivido una inflación y volatilidad de los tipos de cambio, aumento de las tasas de interés y suavización general del entorno de consumo, que se han visto exacerbados por los conflictos en Oriente Medio”.