El drama de una madre desamparada ante la Justicia: "No puedo ver a mis hijos desde hace 10 meses"

Dicen que no hay nada más doloroso que perder a 1 hijo, pero el caso de Olga Chernyakova es más grave porque no puede ver a sus 2 mellizos desde hace 10 meses. Esta ciudadana rusa afincada en Zaragoza se ha puesto en contacto con Elcierredigital.com para denunciar lo que ella cree que es un caso injusto. 

"No puedo ver a mis hijos desde hace 10 meses. Estoy dispuesta a compartir la custodia con la familia de mi exmarido, me puede controlar la Policía, no tengo ningún problema. Yo solo quiero ver a mis hijos. A mí, el dinero de la familia de mi exmarido no me importa en absoluto", lamenta en conversación con este periódico. 

A Chernyakova se le está atragantando la Justicia española, ya que este no es un caso fácil (y mucho menos para una ciudadana extranjera). Lo cierto es que esta pesadilla tiene varias aristas que pasamos a detallar. 

La pérdida de la custodia de sus 2 hijos

Los problemas de Chernyakova (antes Olga Saltikova) comenzaron antes de poder ver a sus hijos, hace 10 meses, e incluso antes de la muerte de su exmarido, el empresario José Ignacio Fernando Castillo (con el que se casó en 2013 y que falleció el 3 de septiembre de 2019). 

Olga Chernyakova. 

Y es que su calvario comenzó hace 7 años a cuenta de un fallo judicial fechado el 19 de abril de 2017 dice lo siguiente: "Doña Teresa Aznar Primicia, letrada de la Administración de Justicia del Juzgado de Primera Instancia número 6 de Zaragoza; Hace saber: Que en el presente procedimiento de divorcio contencioso número 268/2016-5.ª, seguido a instancia de José Ignacio Fernando Castillo frente a Olga Saltikova, se ha dictado sentencia en fecha 3 de abril de 2017, y encontrándose dicha demandada Olga Saltikova en paradero desconocido se expide el presente a fin de que sirva de notificación en forma a la misma, poniendo en su conocimiento que la sentencia no es firme y que podrá ser recurrida en el plazo de veinte días desde su notificación, quedando dicha resolución a su disposición en la Secretaría de este Juzgado. Zaragoza, a cinco de abril de dos mil diecisiete". 

Preguntada por este asunto, Chernyakova señala que su exmarido "tenía miedo de que me llevara los hijos a Rusia, y simplemente me denunció para garantizarse que iba a mantener el control de mis hijos". 

Esta ciudadana no tiene demasiada buena opinión de la familia de su exmarido, de la Justicia española, o del Punto de encuentro habilitado en Zaragoza para poder ver a menores de edad. Pero lo cierto es que, parapetada en un torrente de papeles jurídicos, Chernyakova reclama justicia. 

Antes lo intentó en 2020, pero tras ser adjudicada la custodia a la abuela paterna, la Audiencia Provincial de Zaragoza dictaminó que el tío de los menores tuviese "la guardia y custodia de sus sobrinos (. . .) conservando únicamente Chernyakova la titularidad de dicha autoridad familiar, por lo que no será preciso el consentimiento ni autorización de la progenitora para que" el tutor legal "pueda decidir sobre aquellas cuestiones de especial trascendencia que afecten a la vida de los menores (decisiones en el ámbito educativo, religioso, intervenciones quirúrgicas, tratamientos médicos, cambios de residencia o de centro escolar, obtención del DNI o pasaporte, administración y enajenación de sus bienes conforme a lo establecido en las leyes civiles, etc.)". 

La Justicia prohibió la salida de los menores de territorio español al entender que había riesgo de fuga con los menores. En 2022 Chernyakova volvió a intentar recuperar la custodia de los niños, pero los tribunales volvieron a darle la espalda.