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Una exhibición de relojes antiguos con detalles dorados en un ambiente iluminado con luz azul.
CULTURA

Qué ha sido del Palacio del Tiempo: Uno de los edificios más desconocidos de España

El Palacio del Tiempo alberga el Museo de casi 300 relojes en Jerez, que vuelve en febrero con un especial desayuno

Una mesa de seis metros de larga preside el salón Luis XV. Es el lugar donde se realiza la recepción al Museo de los Relojes de Jerez. Antes, los visitantes, han tenido ocasión de ver unos jardines con toque romántico. Estos sirven de entrada a las instalaciones de los Museos de la Atalaya, en Jerez de la Frontera.

Del techo cuelgan lámparas de cristales y la estancia está presidida por un gran reloj. Cada vez que marcan las horas el ambiente nos lleva al palacio de Buckingham. ¿Cómo sería un desayuno en ese escenario?

Se podrá salir de dudas el próximo sábado, 8 de febrero, a partir de las diez de la mañana. A esa hora comenzará el evento organizado por los Museos de la Atalaya de Jerez, la pastelería La Rosa de Oro, el catering Primitivo y el guía gastronómico Benjamín Colsa.

Un desayuno rodeado de 287 relojes históricos

El evento consistirá en la visita a las cinco salas del Palacio del Tiempo, una impresionante colección de relojes de gran valor histórico. En total se exponen 287 relojes alojados en un palacete de 2 plantas construido a mediados del siglo XVIII. Hay relojes de varios países europeos, especialmente franceses, y están datados desde el siglo XVII hasta el XIX.

Destacan por su valor artístico, no solo por su maquinaría. Como curiosidad, la gran mayoría de ellos siguen funcionando. Los presentes asistirán a un verdadero espectáculo de esculturas y creaciones en torno a los relojes.

Pero no se queda atrás la «exposición comestible». Esta incluirá un desayuno con 4 dulces típicos de la ciudad por los que no pasa el tiempo. Son dulces con muchas décadas de historia.

Los asistentes podrán degustar uno de los más famosos y originales de Jerez, “el pocito”. Se le llama así por su parecido a un pequeño pozo, relleno de una suave crema, entre la crema pastelera y el merengue.

Varios pasteles pequeños con cobertura de crema batida en una bandeja.
Pocito de Jerez. | Cedida

También se probará un dulce cuyo origen podría ser jerezano, el tocino de cielo. Y será en una de las versiones más celebradas, la del maestro pastelero Daniel Jiménez de "La Rosa de Oro", de Jerez. Elaborará las cuatro piezas «de arte dulce» que se degustarán durante el desayuno.

El tercer bocado será la popular “Carmela”, un dulce casi centenario y también nacido en la confitería de “La Rosa de Oro”. Se trata de un bollo alargado relleno de crema pastelera y recubierto de azúcar glas. El cuarteto dulcero se complementa con un merengue, otro clásico de la pastelería andaluza que también tiene mucha tradición en Jerez.

Para acompañar habrá café, infusiones o chocolate caliente. Todo ello servido por el catering de “Primitivo”, un lujo de Jerez.

Pero el desayuno tiene mucho valor añadido. Y es el sitio en que se llevará a cabo. Un salón inspirado en el estilo Luis XV, a la entrada del museo, presidido por una gran mesa de madera.

Una sala elegante con sillas de madera y tapizado beige dispuestas a lo largo de una mesa central, decorada con candelabros y un altar al fondo, con paredes adornadas y un techo con molduras.
Salón de recepción. | Cedida

Debido a las dimensiones del espacio el desayuno se llevará a cabo en dos turnos. Una parte de los asistentes verá el museo antes de desayunar y otro grupo hará el turno inverso, es decir, primero desayunarán y luego harán la visita a las instalaciones.

Los Museos de la Atalaya es un espacio cultural museístico con salas polivalentes localizado en Jerez de la Frontera. Comprende el Misterio de Jerez como complejo destinado a celebraciones, espectáculos o reuniones y el Palacio del Tiempo, como "Museo" de Relojes.

El edificio palaciego que acoge el museo data de 1873, si bien la institución museística (Fundación) se inicia en 1987.

La gestión del conjunto de los Museos de la Atalaya corre a cargo de la Fundación Andrés de Ribera, cuya presidencia la ostenta la alcaldía de Jerez de la Frontera o la Diputación de Cádiz, con alternancia cada 4 años.

Escultura metálica abstracta frente a un edificio histórico con cielo despejado.
Los jardines del Palacio del Tiempo. | Cedida

El centro cuenta con amplios jardines, un palacete que acoge el museo Palacio del Tiempo y unas antiguas bodegas de 1881 adaptadas como espacios polivalentes para reuniones, congresos y celebraciones.

Se cree que fue un general inglés el que, en 1877, compró La Atalaya. Unas tierras en las que construyó un palacio de estilo neoclásico-victoriano, donde vivió. Los jardines que rodean el complejo fueron diseñados según el paisajismo francés del siglo XIX. Han sido declarados Bien de Interés Cultural, catalogados dentro del Patrimonio Histórico Nacional en su acepción de Andalucía.

El Palacio del Tiempo

El Palacio del Tiempo acoge el conocido como Museo de los Relojes, que expone una de las colecciones de mayor valor en Europa.

Fue inaugurado el 20 de marzo de 1973 con 152 relojes heredados de la condesa viuda de Gavia. El coleccionista Pedro León aumentó la colección en 1974 con 74 relojes y en 1977 con 76 relojes más.

Actualmente, la colección cuenta con 287 piezas expuestas. Se recogen las técnicas relojeras inglesa, francesa, italiana, suiza, austriaca, y alemana.

Una colección de relojes antiguos decorativos con figuras escultóricas en una estantería de madera iluminada.
Parte de la colección de relojes. | Cedida

La colección de relojes se encuentra distribuida en diferentes salas del museo, divididas a su vez en dos plantas del edificio. Tiene seis salas. Los relojes franceses de estilo imperio de 1800 a 1830 están en la sala oro. Los del periodo de Carlos X, de 1824 a 1830, están en la púrpura.

Los relojes ingleses de todas las épocas están situados en la sala verde para llegar a la Sala Arturo Paz. Allí están expuestos maravillosos relojes de bolsillo, muchos de ellos piezas únicas. Por último, tenemos el taller del relojero, que incluye una colección majestuosa de bastones del siglo XIX.

Igualmente hay que resaltar el valor arquitectónico del edificio, destacando su capilla. En su interior conserva otras obras de arte, como tapices de la Escuela Flamenca.

Un pasillo de museo con vitrinas llenas de figuras doradas y una sala iluminada en rojo al fondo.
Colección de relojes. | Cedida

Es el único museo de España abierto al público dedicado íntegramente a relojes históricos. Los maestros relojeros Berthoud, Leroy, Frodsham, Lepaute, Lepine, Guydamour, Raingo & Freres, Losada, Bennet, Angoille, Markham y Robin  firman las 287 piezas en exposición permanente, auténticas obras de arte, de los siglos XVII al XIX.

Entre los fines de la entidad están los de contribuir al desarrollo cultural y turístico de la ciudad de Jerez. Además de la exposición permanente de las colecciones de relojes en el Palacio del Tiempo, hay piezas de plata y bastones de colección. También una exposición acerca del vino, brandy y vinagre de las DD.OO. Jerez y Manzanilla de Sanlúcar. 

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