El Cierre Digital Giro de 180º de Julián Contreras: Una nueva vida en Córdoba al cuidado de su padre
El hijo pequeño de Carmina Ordóñez parece haber encontrado cierta tranquilidad en Córdoba, donde vive desde hace un año
Ha pasado ya un año desde que el hijo pequeño de Carmina Ordóñez, Julián Contreras, quiso dar un giro de 180 grados a su vida. Un año desde que decidió establecerse en Córdoba junto a su padre, Julián Contreras Rodríguez.
Su llegada a la ciudad andaluza marcó el fin de un período turbulento. Periodo en el que Contreras Jr. tuvo algún que otro conflicto legal con la casera de su piso de Móstoles. Después pasó de manera breve por Cuenca.
Hoy, Julián Contreras Jr. parece haber encontrado en su vida la estabilidad que tanto buscaba. Aunque el camino para conseguirlo no ha sido nada sencillo.
Su nueva vida en Córdoba llena de comodidades donde prima la tranquilidad
Julián Contreras y su padre optaron por mudarse a una moderna urbanización en las afueras de Córdoba. La urbanización dispondría de apartamentos de entre 50 y 110 metros cuadrados, con precios que oscilan entre 650 y 700 euros mensuales. Un lugar perfecto para primar su calidad de vida.
Sin duda, a la vivienda que escogieron para vivir no le faltan detalles. Tal y como ha informado El Español, el piso que alquilan cuenta con gastos incluidos y ofrece servicios exclusivos. Comodidades diseñadas al detalle para garantizar el confort de sus inquilinos.
La urbanización cuenta con piscina con zona chill out, gimnasio completo, espacios de coworking, aparcamientos para bicicletas y hasta un mini market. Además, el edificio tiene servicio de conserjería y seguridad las 24 horas. La urbanización fue inaugurada en el año 2023 y pertenece a una cadena inmobiliaria que gestiona propiedades similares en otras ciudades españolas.
La tranquilidad que le aporta a Julián vivir en esta residencia, ha sido clave para reorientar su vida tras un pasado reciente lleno de problemas. Según reveló una fuente cercana al medio Jaleos, Julián "está bien dentro de todo. Tiene un gran mundo interior".
La enfermedad de su padre y la lucha contra la depresión
El traslado a Córdoba no es casualidad. Uno de los principales motivos de la decisión de Julián Contreras fue el estado de salud de su padre.
Julián Contreras padre sufre un glaucoma degenerativo que ha provocado un deterioro progresivo de su visión en los últimos años. El pasado mes de junio tuvo que someterse a una intervención quirúrgica para tratar su problema ocular. Aunque la operación fue de éxito, el postoperatorio ha sido complicado durante los meses siguientes.
"Mi padre está bien, pero el postoperatorio está siendo complicado. Es una dedicación constante, al final no se puede defender debidamente por sí solo y hay que estar muy al quite", explicó Julián.
El hijo de Carmina Ordóñez ha asumido la responsabilidad de cuidar a su padre a tiempo completo. Una dedicación que le ha supuesto un gran esfuerzo físico y emocional. Sin embargo, esta dedicación no ha impedido que también tenga que enfrentarse a sus propios demonios.
Julián no ha escondido la difícil etapa que ha vivido al atravesar una depresión durante cuatro años. Precisamente, habló sin tapujos sobre sus intentos de suicidio en una entrevista con el influencer Luc Loren en su canal de YouTube No estamos locas.
"Me pasé un año entero pensando sistemáticamente en que mi vida tenía que terminar. Y cuando lo haces, tu relación contigo mismo se vuelve mala y tóxica, convives con una persona que te quiere destruir, que eres tú mismo", contó a Loren.
Durante ese tiempo incluso llegó a prepararse para su fin. "Llegué a escribir 420 cartas de despedida", dijo.
Confesó en el programa que había sido su gato el que le había salvado. "Cada noche se me tumbaba en el pecho y yo decía, 'cómo voy a dejar a esta criatura'", contaba.
"Habría sido un error, siempre es un error", afirmaba sobre la idea de quitarse la vida.
Tras haberla superado, Julián se mantiene activo en YouTube y Twitch, donde genera contenido y comparte reflexiones con sus seguidores. Parte de sus ingresos se deben a sus sesiones de coaching y participación en actividades comerciales.
Carmina Ordóñez y Julián Contreras: una historia de amor y desencuentros
Mientras Julián Contreras rehace su vida en Córdoba, el recuerdo de su madre sigue presente en los medios.
Precisamente, hace tan solo unos días se cumplían 52 años de la boda entre la aristócrata Carmina Ordóñez y el torero Francisco Rivera 'Paquirri'. Un enlace al que asistieron 1.500 invitados, cargado de destacadas personalidades del papel couché. De este matrimonio nacerían Francisco y Cayetano, los hermanos mayores por parte de madre de Julián Contreras Jr.
La separación llegó años después, en 1982. Año que coincidía con la aprobación de la Ley del divorcio en España.
Tras el divorcio con Paquirri y un breve noviazgo con Antonio Arribas (ex de la que fuera su amiga Lolita), llegó de nuevo el amor a su corazón.
'La divina', icono de la prensa del corazón, vivió un intenso romance con Julián Contreras Rodríguez. La pareja contrajo matrimonio en Miami en 1984 en una ceremonia civil, después de que la Iglesia se negara a casarles. Cuatro años después, volvieron a casarse en una íntima boda religiosa en Madrid, en la que apenas asistieron invitados.
El 14 de enero de 1986 llegaba al mundo Julián, el primer hijo en común de ambos.
Sin embargo, aunque intensa, la relación no estuvo exenta de altibajos. Aunque en un principio se mostraron como una pareja unida, con el tiempo surgieron diferencias irreconciliables. Finalmente, en 1994 decidieron separarse de manera definitiva.
A pesar del divorcio, Julián Contreras Rodríguez siempre se mantuvo cerca de su hijo. A diferencia de los otros hijos de Carmina, Francisco y Cayetano. Con ellos la relación de Julián Jr. ha sido distante y, en ocasiones, conflictiva, pasada por el ojo crítico de los medios.
En varias entrevistas, Julián ha expresado lo que significó su padre en su vida. "Me han llegado a decir que mi mayor lastre es mi padre, pero para mí es todo lo contrario. Me hace muy feliz estar con él", rescataba Divinity de unas palabras de Julián.
El compromiso de Julián Jr. con el bienestar de su progenitor es inquebrantable, y eso ha sido clave en su decisión de trasladarse a Córdoba. Allí espera seguir reconstruyendo su vida con mayor tranquilidad.
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