Este 21 de junio, el príncipe Guillermo de Gales celebra su 43 cumpleaños en uno de los momentos más singulares de su vida pública. El heredero al trono británico atraviesa una etapa marcada por la ausencia prolongada de su esposa, Kate Middleton. Además del creciente peso institucional que recae sobre él y los persistentes rumores sobre tensiones familiares y matrimoniales.
Hace apenas unos días, el príncipe reapareció en solitario en el hipódromo de Royal Ascot, uno de los eventos más emblemáticos de la realeza británica. Lo hizo sin la princesa de Gales, quien canceló su asistencia a última hora alegando motivos personales, relacionados con su salud.
La imagen de Guillermo junto a su suegra, Carole Middleton, fue uno de los momentos más comentados del acto. Ambos se mostraron cómplices y sonrientes, lo que alimentó titulares y también especulaciones.
El Palacio de Kensington insiste en que la princesa se encuentra en proceso de recuperación. Aunque su ausencia reiterada en actos oficiales ha llamado la atención. Además, el rol cada vez más visible de Guillermo como representante de la Corona ha hecho crecer el interés público.
Entre el deber y la discreción: un rey en preparación
Desde la coronación de Carlos III, el papel de Guillermo ha cobrado aún más relevancia. Se ha convertido en el rostro más cercano y moderno de la monarquía, con un estilo sobrio pero comprometido. A diferencia de su padre, Guillermo proyecta una imagen más cercana y accesible, alejada de la pomposidad tradicional de la institución.
Con una agenda centrada en causas sociales, medioambientales y de salud mental, el príncipe se ha ganado el respeto de buena parte de los británicos. Sin embargo, su ascenso público también ha coincidido con un distanciamiento evidente respecto a su hermano menor, el príncipe Harry.
El príncipe Guillermo y el príncipe Harry | Europapress
La relación entre Guillermo y Harry está rota desde hace años. El tiempo no ha ayudado a curar las heridas. Desde que los duques de Sussex se instalaron en California, comenzaron una carrera mediática plagada de confesiones familiares.
Ante esto, Guillermo ha optado por el silencio absoluto. No ha hecho declaraciones públicas. Ni siquiera tras la publicación del libro Spare, donde Harry lo acusa de agresiones físicas y maltrato emocional.
Curiosidades del heredero: de su apodo a su primer amor
Más allá del protocolo y los discursos institucionales, Guillermo es también un personaje con un pasado lleno de anécdotas curiosas. Durante sus años en la Universidad de St Andrews, conoció a Kate. Allí fue apodado como "Steve" para despistar a la prensa.
Antes de iniciar su relación con la actual princesa de Gales, tuvo romances adolescentes discretos. Entre ellos con la aristócrata Jecca Craig, a quien muchos veían como la posible futura reina.
A Guillermo le apasiona el fútbol, es hincha declarado del Aston Villa. Además, ha sido piloto de ambulancia aérea, una faceta menos conocida que le acercó a la vida de la ciudadanía común. Su experiencia en labores de emergencia moldeó gran parte de su compromiso con la salud mental, uno de los pilares de su labor pública actual.
El príncipe Harry y Kate Middleton | Europa Press
Este 21 de junio no habrá grandes celebraciones oficiales. El cumpleaños del heredero transcurre entre incógnitas y expectativas. Su reaparición sin Kate y su creciente presencia institucional refuerzan su imagen como fututo rey.
Su papel como padre de tres hijos refuerza una imagen de estabilidad y compromiso institucional.
A la espera de que la princesa retome su agenda y de que los rumores se disipen, Guillermo afronta una etapa decisiva. Tanto para su familia como para la monarquía.
Montaje propio 
