27 de abril de 2024
|
Buscar
FIN DE SEMANA

El madrileño falleció diez días antes de cumplir los 66 años tras pasar más de un mes en la UCI del Hospital San Carlos

Adiós a Enrique San Francisco: El cómico que sobrevivió a la maldición del cine "quinqui"

Enrique San Francisco.
Enrique San Francisco.
El actor Enrique San Francisco falleció a pocos días de cumplir 66 años tras pasar más de un mes la UCI del Hospital San Carlos de Madrid. Hijo de interpretes, comenzó su carrera a los seis años en el teatro y los siete en el cine, llegando a intervenir en más de 70 obras. Entre otras, destacaron sus intervenciones en el llamado cine "quinqui" y en series de televisión como 'Los ladrones van a la oficina', 'Colegio mayor' o 'Cuéntame cómo pasó'.

El humorista y actor Enrique San Francisco falleció el lunes 1 de marzo a los 65 años a causa de una neumonía bilateral severa. Llevaba más de 40 días ingresado en la UCI del Hospital San Carlos de Madrid. 

Las alarmas saltaron el pasado 12 de enero, cuando el Aula de Cultura de Getxo (Vizcaya) anunció la suspensión de la representación de la función de La penúltima prevista para el día 23 de ese mes por "problemas de salud" del actor, que estaba de gira con ese espectáculo de humor.

Enrique San Francisco nació el 10 de marzo de 1955 en Madrid. Era hijo de dos actores, Vicente Haro y Enriqueta Cobo. Su padre biológico nunca le reconoció como tal y no se conocieron hasta muchos años después aunque acabaron viviendo juntos. 

Con seis años ya estaba haciendo teatro y con siete debutó en el cine en Diferente (1962) de Luis María Delgado, una película que hablaba veladamente de la homosexualidad. Empezó así una carrera fílmica de más de setenta títulos que, además, combinó  con el teatro y la televisión. 

Su primer papel protagonista fue con 12 años en El aprendiz de clown (1967) junto a Charlie Rivel. Fue en los años de la Transición cuando consiguió los papeles que le hicieron especialmente popular. Títulos como Arriba Hazaña (1978) o La larga noche de los bastones largos (1979)  le convirtieron en uno de los actores del momento. 

El cine "quinqui"

Sin embargo, su reconocimiento más popular lo consiguió a través del conocido como cine "quinqui" con títulos clásicos como Maravillas (1980), Colegas (1982) o El pico (1983). Su relación con otros protagonistas de este tipo de filmes como José Luis Manzano o Antonio Flores fue más allá de la pantalla, al igual que con los elementos más peligrosos de ese universo: las drogas. El actor nunca evitó mostrar las debilidades que había tenido a lo largo de su vida, como las drogas y el alcohol, que siempre reconoció consumir.   

En esos años también mantuvo un largo noviazgo con Rosario Flores. En los 80, la hija pequeña de La Faraona trabajaba como actriz de cine y durante un tiempo compartió vida con el actor. Incluso llegaron a protagonizar algunas portadas de las revistas del corazón. 

Las drogas, la delincuencia y el VIH acabó con la mayor parte de los protagonistas de esta corriente cinematográfica. San Francisco se libró de ello cuando decidió abandonar ese ritmo de vida. "Mi madre me dijo: 'Prefiero que me mates antes que verte así, porque ya me estás matando'", contó el actor a Risto Mejide durante una entrevista. 

Rosario Flores fue pareja durante años de Quique San Francisco. 

Con el paso del tiempo siguió sumando títulos reconocidísimos a su carrera como Amanece que no es poco (1989), Tirano Banderas (1993) o París-Tombuctú (1999). Fue nominado en dos ocasiones al Premio Goya a Mejor Actor de Reparto por El baile del pato (1989) u Orquesta Club Virginia (1992). En televisión se le pudo ver en producciones como Los ladrones van a la oficinaColegio Mayor o Cuéntame cómo pasó. 

En los últimos años de su carrera profesional tomó más fuerza su faceta como humorista, sobre todo gracias a El club de la comedia. Esto hizo que mucha gente le descubriese a través de otra de sus facetas y que presentase varios espectáculos teatrales con sus monólogos. El último, llamado La penúltima, que tuvo menos repercusión de la esperada debido a la pandemia del Covid-19. En enero suspendió su presentación en Bilbao por motivos de salud que, tristemente, han acabado con su vida. 

COMPARTIR: