26 de abril de 2024
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FIN DE SEMANA

Estas instalaciones telefónicas dejarán de considerarse como un servicio universal obligatorio en España a finales del año 2021

El adiós a las míticas cabinas de teléfonos: Sus últimos meses de vida en nuestro país

Mujer hablando por teléfono al lado de una cabina telefónica.
Mujer hablando por teléfono al lado de una cabina telefónica.
Las cabinas telefónicas han ofrecido a los ciudadanos españoles servicio para ponerse en contacto con sus allegados cuando no tenían acceso a un teléfono fijo pero como consecuencia de la aparición de los teléfonos móviles, su función ha quedado completamente olvidada. Actualmente, en nuestro país, quedan unas 15.000 cabinas que serán desmanteladas a lo largo de 2022 debido a su poca utilización y a su escasa rentabilidad.

El incesante desarrollo de la tecnología que ha tenido lugar durante el siglo XXI ha provocado que las relaciones interpersonales alcancen una dimensión nunca antes vista ya que, gracias a la conexión a Internet y al avance de los dispositivos móviles, cualquier ciudadano del mundo puede enviar un mensaje a un receptor que se encuentre a cientos de miles de kilómetros en segundos.

Pero hubo una época en la que entablar el contacto con una persona que se encontraba a cierta distancia resultaba una tarea ardua y ciertamente compleja que solo podía llevarse a cabo con un teléfono convencional. En el año 1877 y tan solo seis meses después de la primera demostración de Alexander Graham Bell, Barcelona se convirtió en ciudad pionera en lo que a pruebas telefónicas se refiere, unos experimentos que se trasladaron a Madrid y que, pese a su éxito, no fueron suficientes para implantar la tecnología en España.

No fue hasta cinco años más tarde cuando el Gobierno de nuestro país presentó la primera reglamentación del servicio telefónico, un hecho que demostraba que este artefacto tecnológico se había convertido en una realidad. Pero hacerse con uno de estos teléfonos no era sencillo por lo que la mayoría de los ciudadanos no contaba con la posibilidad de hacer uso de este gran invento.

Modelo de teléfono utilizado en el siglo XIX.

Para solucionar este inconveniente se instaló en el año 1928 en el Parque del Retiro el primer teléfono de uso público previo pago, el antecesor de lo que actualmente conocemos como cabinas telefónicas. Este tipo de teléfonos fueron utilizados durante casi 40 años hasta que, en el año 1963, se creó en España la primera cabina tal y como la conocemos actualmente.

Durante mucho tiempo, las cabinas telefónicas han formado parte del paisaje urbano y rural de nuestro país. Pese a que el teléfono fijo era una realidad en casi todos los hogares, estas estructuras seguían siendo útiles para las personas que se encontraban de vacaciones alejados de sus casas y querían ponerse en contacto con un amigo o familiar. Pero, el golpe definitivo llegó con la aparición de los teléfonos móviles que anularon completamente la funcionalidad de las cabinas telefónicas.  

Según el último estudio que realizó la empresa Telefónica, nuestro país cuenta actualmente con casi 15.000 cabinas y cada una de ellas registra una media de 0,17 llamadas al día, un dato que refleja perfectamente la decadencia de estos aparatos y la nula rentabilidad que supone mantenerlos en funcionamiento.

Cabina telefónica.

Por otra parte, se prevé que en el último trimestre de este año el Gobierno apruebe la nueva Ley Estatal de Telecomunicaciones por la que, tanto las cabinas como las guías telefónicas, dejarán de considerarse como un servicio universal obligatorio. Por el momento, Telefónica no ha desvelado sus planes de desmantelamiento de las cabinas aunque, en algunas ocasiones, estos espacios han sido utilizados como puntos de información turística, cargadores o puntos de acceso a conexión WiFi.

Lo que sí es una realidad es que estamos presenciando los últimos meses de vida de las cabinas en nuestro país, un invento que ha resultado muy útil durante una buen número de años pero que, como consecuencia de la revolución tecnológica, ha quedado definitivamente obsoleto.

No obstante, algunas administraciones públicas, como el Ayuntamiento de Albacete, con su alcalde Emilio Sáez Cruz al frente, ya ha comunicado a la empresa Telefónica su deseo de "indultar" alguna de estas míticas cabinas y dedicarla a ser un punto municipal de referencia informativa digital. "Una muy buen idea", según los historiadores consultados por elcierredigital.com, "para que siga vivo el recuerdo de unas instalaciones telefónicas que tanto aportaron a la creación de la democracia española mediante la comunicación de sus ciudadanos". 

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