María Valverde, amor de Gustavo Dudamel y actriz destacada del cine español.

El 3 de diciembre de 2010 las salas de cine españolas acogieron del estreno de la cinta A tres metros sobre el cielo, dirigida por el cineasta Fernando González Molina. Esta película, basada en la novela homónima del escritor Federico Moccia, fue uno de los proyectos cinematográficos de aquel año y consagró a dos de los actores de nuestro país como grandes promesas del séptimo arte.

Mario Casas  y María Valverde  formaban el ‘tándem’ perfecto y de nuevo conquistaron la gran pantalla en la piel de una joven estudiante que se enamoraba del chico malo con ‘chupa’ de cuero que se paseaba en moto por la ciudad de Barcelona.

Han pasado catorce años desde aquel estreno y María continúa siendo, para muchos, la ‘candidez’ del cine español. Aquella joven que, con tan solo 16 años, se puso a las órdenes del director Manuel Martin Cuenca en La Flaqueza del Bolchevique. Una película que reflejó la perversión y una historia de amor puro y platónico.

Aquella interpretación cautivó no solo a periodistas o a críticos —Carlos Boyero definió a María como “una de las criaturas más sexys de la que estaba profundamente enamorado”— sino que la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas la propuso como candidata al Goya en la categoría de Mejor Actriz Revelación en la 18ª edición de los galardones. Y lo consiguió. 

Aquella niña que subió al escenario del Palacio de Congresos de Madrid para recoger el ‘cabezón’ creció, o como cantaba  Julio Iglesias, pasó ‘de niña a mujer’. Hoy, la actriz madrileña reside en la ciudad estadounidense de Los Ángeles donde lleva una vida discreta y lejos de los flashes. Lo hace junto a su marido, el compositor venezolano y director de la Filarmónica de Londres Gustavo Dudamel  con quien contrajo matrimonio este pasado 2017. En la actualidad, la pareja convive con Martin, el hijo que el músico tuvo con la actriz venezolana Eloísa Maturen.

Precisamente,  el músico, que ha recibido un título honorario de la Universidad británica de Harvard,  ha regresado a nuestro país  y este pasado domingo llevó, junto a su orquesta LA Phil, el ‘Fidelio’ de Beethoven al Liceu de la Ciudad Condal.  Una versión inclusiva tanto para público sordo como oyente que también podrá disfrutarse en el Palau de la Música y en la playa de Sant Sebastià en el marco de los actos de la Copa de América.

Desde hace años la actriz madrileña se ha convertido en el mejor apoyo para Dudamel y son una de las parejas más notorias y discretas del panorama artístico nacional. Pero, ¿cuál es la historia de aquella joven que con tan solo 17 años conquistó a la crítica cinematográfica nacional?

María Valverde, la ‘candidez’ del cine español

Han pasado 21 años desde que María Valverde debutara en la gran pantalla con la cinta La Flaqueza de Bolchevique. La madrileña fue la elegida de entre más de 3.000 jóvenes, pero el mundo de la interpretación no formaba parte de su entorno familiar pese a que desde pequeña comenzó a interpretar obras de teatro familiares que escribía una de sus primas.

María, nacida el 24 de marzo de 1987, creció en el barrio madrileño de Carabanchel. Su padre, que soñaba con ser piloto acabó trabajando en una gestoría, y su madre como enfermera en un centro de educación especial. Las raíces siempre han sido muy relevantes para la madrileña y, de hecho, cada vez que regresa a España su barrio sigue siendo su refugio. 

La actriz perfeccionó su trabajo a las órdenes de Cristina Rota en su Escuela de Interpretación y, como mencionábamos, debutó en la gran pantalla con La Flaqueza del Bolchevique junto a  Luis Tosar, Mar Regueras  o Nathalie Poza. Una cinta que reflejaba la obsesión enfermiza de un ejecutivo de 33 años con una joven mucho menor que él y cuya interpretación le valió para lograr el premio Goya en la categoría de Mejor Actriz Revelación en la XVIII edición de los galardones. 

Posteriormente llegaron otros trabajos. En la gran pantalla, películas como Fuera del cuerpo, Melissa P., Los Borgia, Ladrones, Madre 1987, Fuimos canciones, Ahora o nunca o La mujer del anarquista. No obstante, fue en 2010 cuando le llegó uno de los papeles más recordados de toda su carrera. Una adaptación del best seller del escritor italiano Federico Moccia, donde encarnó al personaje de Babi Alcázar. Todo un éxito comercial que se convirtió en la película más taquillera del año.

En la cinta, Babi se enamora perdidamente de Hugo Oliveira, conocido como  ‘H’, un malote de buen corazón encarnado por Mario Casas  con quien vivía una historia de amor que se volvería a repetir en Tengo ganas de ti, la segunda parte de la colección de Moccia. Junto al actor gallego volvería a coincidir en La Mula, una película del cineasta Michael Radford.

En la pequeña pantalla ha participado en series como La Fuga o Hermanos y, también en videoclips de artistas como el exvocalista del Canto del Loco Dani Martin, David Bisbal  y, uno de los últimos, del cantante Carlos Sadness. 

Los amores de María Valverde

Además de la dulzura, la elegancia y la candidez, María Valverde se caracteriza por ser una de las actrices más discretas del panorama artístico. Y aunque trató de mantener la discreción, fue en 2010 cuando junto a Mario Casas se convirtió en una de las parejas más mediáticas de la crónica social. El amor surgió rodando ‘A tres metros sobre el cielo’ y la reacción traspasó la gran pantalla. Fueron pareja durante cuatro años y a principios de 2014 comenzaron a resonar los primeros rumores de ruptura, que finalmente confirmó la abogada Sheila Casas, hermana del actor gallego. 

Aquella ruptura marcó un punto de inflexión en la vida de la actriz madrileña y decidió dejar España para afincarse en Londres. Fue entonces cuando comenzó a rodar su siguiente proyecto, la película Libertador, basada en la vida del político venezolano Simón Bolívar. En la cinta, la actriz madrileña daba vida a María Theresa Bolívar, la esposa del protagonista y el compositor venezolano Gustavo Dudamel fue el encargado de poner la banda sonora.

Por aquel entonces, el compositor estaba casado con la actriz y bailarina venezolana Eloísa Maturén, con quien tuvo a Martín, su único hijo. En 2015 Dudamel y Valverde iniciaron una relación sentimental que mantuvieron lejos de los medios de comunicación, aunque la actriz se deshacía en halagos y palabras hacia su pareja. "Estoy muy enamorada, y sobre todo tranquila. El amor es tranquilidad y cuando te viene el amor verdadero es la mayor tranquilidad que uno puede pedir y Gustavo es el amor de mi vida. Absolutamente. No tengo ninguna duda", confesó la actriz.

Dos años después ambos contrajeron matrimonio en la más estricta intimidad. Fue en Las Vegas. En la actualidad residen en la ciudad de Los Ángeles, ya que Gustavo ostentaba el cargo de  director al frente de la Orquesta Filarmónica y, posteriormente, desempeñó el mismo cargo al frente de la Ópera de París. No obstante, Dudamel anunció su dimisión y puso rumbo a Estados Unidos donde el director de orquesta ha sido elegido director musical de la Filarmónica de Nueva York.

Desde que comenzara su historia con el compositor, la música se ha convertido en un aspecto clave en la vida de la madrileña y, de hecho, forma parte de la fundación de su marido para favorecer el desarrollo de la juventud a través de la música.

Familiar, amante de la moda y una vida muy discreta

Y precisamente, durante su estancia en la capital gala María continuó con sus proyectos profesionales y con algunas de sus aficiones como la moda. A lo largo de su trayectoria ha sido nombrada embajadora de marcas como Nina Ricci o  Hoss Intropia. Desde que saltara a la palestra mediática, la actriz madrileña es considerada una de las mujeres más elegantes del panorama artístico. Y en Paris asistía a desfiles de firmas como  Loewe, Chanel, Valentino  o Dior.

Según ha trascendido, María mantiene una vida muy discreta y pese al frenético ritmo laboral que mantiene, la ciudad de Madrid es un refugio al que se escapa cada vez que tiene ocasión y en la que no duda en reunirse con su familia. 

En el tiempo de ocio de la actriz madrileña no puede faltar la cultura y nombres como Alessandro Varico, Sofía Coppola,  Mike Mills o JD Salinger. También le encanta viajar. Entre sus destinos favoritos está Florencia, Venezuela, algunos de los puntos de la Costa Brava, Paris y, quién sabe si ahora la ciudad de Nueva York, donde su marido ha sido nombrado director musical de la Filarmónica de Nueva York.